lunes, 23 de febrero de 2015

Detienen a alumno del Tec por ser cómplice del secuestro y asesinato de un compañero

La víctima, Sebastián Préstamo Rivera, estudiante. Foto: Especial
La víctima, Sebastián Préstamo Rivera, estudiante. 
PUEBLA, Pue. (proceso.com.mx).- Un estudiante de la Preparatoria del Tecnológico de Monterrey fue identificado como responsable de haber planeado y participado en el secuestro de su compañero, Sebastián Préstamo Rivera, el joven de 18 años que apareció muerto en Veracruz desde el 7 de febrero.
La Dirección General de Atención a Delitos de Alto Impacto (DGADAI) de la Procuraduría de Justicia de Puebla informó que el sábado detuvo al joven Edson “N”, de 17 años, quien habría entregado a Préstamo Rivera con otros dos cómplices para pedir 15 millones de pesos por su rescate.
El titular de la DGADAI, Fernando Rosales Solís, informó que por esa razón, los secuestradores asesinaron al joven desde el primer día del cautiverio, el 6 de febrero, ya que no lo podían liberar porque tenía identificado a su compañero de clases.
El ahora detenido es originario de Xalapa, hijo de una familia de comerciantes y estudiaba en la Preparatoria del Tecnológico con una beca. Además de que, según las investigaciones, es primo de uno de los otros participantes en el secuestro también procedentes de Veracruz.
Edson además se mantuvo todo el tiempo cercano a la familia del joven victimado para tener al tanto a sus cómplices -también menores de edad y originarios de Veracruz- de los movimientos y decisiones que se tomaban en torno al rescate y sobre la participación de la policía.
Rosales Solís afirmó que los otros dos implicados en este hecho ya están plenamente identificados y que podrían estar vinculados con un secuestro anterior, pero hasta ahora no han sido detenidos.
Por las imágenes de videos de la Preparatoria del Tec de Monterrey y de una taquería ubicada en Lomas de Angelópolis, la corporación policiaca pudo confirmar que Edson fue quien entregó a su compañero de clases a los otros dos jóvenes, que lo asesinaron desde el primer día, no obstante después se mantuvieron en comunicación con la familia para exigirles el pago de rescate.
Según la Procuraduría, el 6 de febrero la víctima se comunicó con su familia para informarles que se dirigía al Hospital de la Beneficencia Española donde estaba internada su madre, pero que antes pasaría por comida a una taquería y daría un “aventón” a Edson.
De acuerdo con los videos, los dos jóvenes salieron de la Prepa alrededor de las cuatro de la tarde y fueron a una taquería del fraccionamiento Lomas de Angelópolis, donde pidió su orden para llevar y después se dirigió al fraccionamiento El Molino, para dejar a Edson.
Rosales Solís relató que antes de llegar al fraccionamiento El Molino, ubicado frente al Tecnológico de Monterrey, Edson supuestamente le pidió a Sebastián que se detuviera para que llevara a dos de sus amigos.
Las investigaciones señalan que una vez arriba del carro, los otros dos jóvenes atacaron a Sebastián, lo sometieron y lo pasaron para el asiento trasero, en tanto que Edson los guió para que pudieran encontrar la salida a la autopista rumbo a Veracruz. Luego se bajó del carro y volvió a sus actividades para actuar como si no estuviera involucrado en los hechos.
El carro Mercedes Benz CL250, placas PZZ2354, que era propiedad de la víctima, fue encontrado el 13 de febrero en el estacionamiento de un negocio de comida rápida de Xalapa, Veracruz.
El cadáver del joven, con heridas de arma punzocortante, fue localizado desde el día siguiente de su desaparición, el 7 de febrero, en un paraje conocido como “La Curva Z”, en el municipio de Yecuatla, pero fue plenamente identificado hasta el 11 de febrero, cuando se realizaron los estudios correspondientes.
A pesar de esto, los plagiarios se comunicaron en los días siguientes con la familia de la víctima para negociar el rescate por 15 millones de pesos, mientras que Edson se comunicaba a diario con ellos.
Rosales Solís informó que, por ser menor de edad, el detenido será consignado al Juzgado Calificador Especializado en Justicia para Adolescentes y como condena máxima podría cumplir siete años en prisión especial.

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