domingo, 7 de agosto de 2011

“El fútbol es corrupción, dinero y muerte”

El ‘futbolista antisistema’ se retira: “El fútbol es corrupción, dinero y muerte”
06/08/2011 | Quique Peinado

Javi Poves, que debutó este año con el Sporting en Primera, se retira con sólo 25 años. Le definen como antisistema. Tanto, que el 15-M se le queda corto: “Lo que hay que hacer es quemar los bancos, cortar cabezas”, dice.
Javi Poves se presentó un día en las oficinas del Sporting de Gijón y pidió, ante la sorpresa de la gente del club, que dejaran de pagarle por transferencia bancaria: “No quiero que se especule con mi dinero ni un segundo. No pienso utilizar un banco”, les dijo. Otro día, devolvió un coche que el club había dado a cada jugador: “Me sentía mal teniendo dos coches. No lo necesitaba”.

Javi Poves vivía una contradicción vital permanente. Después de que Manolo Preciado le premiara con su debut en Primera División contra el Hércules (salió de la cantera del Atlético de Madrid y jugó en el juvenil del Rayo, en Las Rozas y Navalcarnero), en su cabeza sólo estaba dejarlo. “Lo que se ve desde dentro lo deja claro: el fútbol profesional sólo es dinero y corrupción. Es capitalismo, y el capitalismo es muerte. No quiero estar en un sistema que se basa en que la gente gana dinero gracias la muerte de otros en Sudamérica, África, Asia. Simplemente, mi yo interior me impide seguir en esto”, dice Poves.

Tiene 25 años y mucha pasión. A veces, hasta le cuesta explicar quién es. “Me llaman antisistema, me han encasillado ahí, pero no sé lo que soy. Sí que sé que no quiero vivir prostituido como el 99% de la gente. Si no puedo tener una vida limpia en España, la tendré en Birmania, donde sea”, dice. Estudiará Historia por la UNED y verá lo que hace. No lo tiene claro. Si acaso, planea viajar por el mundo oprimido. “Quiero conocer el mundo de verdad, saber lo que hay. Ir a África. Para eso no hace falta mucho dinero. He estado en Turquía en hoteles de tres euros”, recalca.

En un magnífico artículo de ‘La Nueva España’, Poves cuenta que, aunque se acercó al 15-M al comienzo y constató la pasión e ilusión de la gente, el movimiento se le queda muy corto. “Plantean cambios muy superficiales, a mí no me valen. ¿De qué me sirve ganar 1.000 euros en vez de 800 si están manchados de sangre, si sé que se obtienen con el sufrimiento y la muerte de mucha gente? La suerte de esta parte del mundo es la desgracia del resto. En vez de tanto 15-M y tanta hostia, lo que hay que hacer es ir a los bancos y quemarlos, cortar cabezas. Así de claro te lo digo”, señala. Efectivamente, más claro no puede ser Javi Poves, el chaval de 25 años que deja el fútbol para tomar un camino incierto lejos de todo.

En “juicio público”, ONG culpan a militares de desapariciones forzadas

Con cuatro casos emblemáticos, evidencian excesos del Ejército

Emir Olivares Alonso

Periódico La Jornada
Domingo 7 de agosto de 2011, p. 6
“Culpables”, fue el veredicto durante un juicio público –afuera de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) efectuado por familiares de víctimas de desaparición forzada– contra las fuerzas armadas mexicanas por abusos y delitos cometidos contra la ciudadanía.

Como cada primer sábado de mes, desde septiembre de 2008, integrantes del Comité Eureka y de la organización Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio (HIJOS) México se manifestaron ante el máximo tribunal para demandar la presentación con vida de centenares de desaparecidos políticos, del pasado y del presente.

Informaron que el próximo mes cumplirán tres años ininterrumpidos de presentarse cada mes ante la SCJN, acto al que calificaron de “ejercicio de memoria con la gente”.

Los manifestantes montaron un sketch en el que se instaló un jurado que analizó cuatro casos emblemáticos de violaciones a garantías fundamentales cometidas por militares:

La desaparición forzada de Rosendo Radilla Pacheco durante el periodo conocido como guerra sucia en el municipio de Atoyac, Guerrero. Recordaron que por este caso la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ya juzgó y sentenció a México encontrando que se habían vulnerado varios derechos, como el acceso a la justicia, a la víctima y su familia.

Otro fue el de la indígena nahua Ernestina Ascencio Rosario, caso por el que se acusó a militares de haber abusado sexualmente de la anciana, lo que habría causado su muerte. Sin embargo, las autoridades concluyeron que no existió abuso y que la mujer murió de parasitosis.
El caso de Valentina Rosendo y Inés Fernández, violadas sexualmente en 2002 por elementos del Ejército en Guerrero, fue el tercero en el “juicio”. Recordaron que por estos hechos la CIDH también ya emitió una sentencia, la cual el Estado mexicano aún no cumple totalmente.

Agregaron que la CIDH sentenció a México por las violaciones a los derechos humanos de Rodolfo Montiel y Teodoro Cabrera, campesinos ecologistas de Guerrero que padecieron detención arbitraria y tortura en 1999 a manos del Ejército por su activismo ambientalista.

Ayer al mediodía, frente a la SCJN, el jurado conformado por miembros de HIJOS México y el Comité Eureka encontró que en estos cuatro casos las fuerzas armadas son responsables de violaciones a derechos humanos, delitos de lesa humanidad y abusos contra ciudadanos.

Recordaron que desde 1969 en el país oficialmente existen 600 desaparecidos políticos, pero subrayaron que el número seguramente es aún mayor, pues ese delito de lesa humanidad continúa perpetrándose.

Como en cada una de estas manifestaciones, que pronto cumplirán tres años, sobre las rejas que rodean la entrada a la Suprema Corte colgaron decenas de fotografías con los rostros de algunos de los desaparecidos políticos y carteles en los que se rechaza la impunidad.

Decisión. Hernández



Las justas demandas de la Juventud Chilena

Un operativo importante. monosapiens



Un operativo importante 

Reservación. Naranjo


Reservaci{on

Anticipa Cordero victoria del PAN en 2012 con él como candidato

¿ Te cae ?
La Redacción
6 de agosto de 2011 · Nacional
MÉXICO, D.F. (apro).- Al sostener que el Partido Acción Nacional (PAN) es una alternativa aún vigente, Ernesto Cordero Arroyo aseveró este sábado en Puebla que ese partido ganará la Presidencia de la República en 2012 con él como candidato.

Sin embargo el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) sostuvo que aún no renunciará a su cargo para dedicarse a la actividad proselitista, ya que debe trabajar en la elaboración del presupuesto federal del siguiente año.

En un evento realizado en la capital ante unas 3 mil 500 personas provenientes de municipios como San Pedro Cholula, Izúcar de Matamoros, Chiautla de Tapia, Tilapa y Axutla, Cordero Arroyo consideró que este es el tiempo del PAN.

El funcionario federal encabezó una reunión con presidentes municipales en la junta auxiliar de Metepec, en Atlixco y después se trasladó a la ciudad de Puebla, donde tuvo un evento en el Centro de Convenciones y Exposiciones, acompañado por el gobernador Rafael Moreno Valle.

Este último recinto fue resguardado por agentes de la policía estatal, por patrullas de seguridad vial municipal, y en los estacionamientos contiguos se observaron patrullas de los municipios de Axutla –placas SJ24180- y de Tilapa –placas SJ78152-.

Aunque el encuentro de la capital fue de carácter partidista, destacó la presencia de personal de logística, camarógrafos y fotógrafos de comunicación del gobierno del estado y del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia.

Al encuentro acudió Gerardo Rodríguez Regordosa, subsecretario de Hacienda y Crédito Público, así como su hermano Pablo Rodríguez, titular de la Secretaría de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico en Puebla, y el secretario de Desarrollo Social, Néstor Gordillo Castillo.

Al iniciar Cordero Arroyo su presentación, uno de los asistentes le preguntó a grito abierto si quería ser presidente de la República, a lo que el llamado “delfín” de Felipe Calderón respondió con un nuevo grito que “sí”.

Dijo que pese a que existen “entusiasmados” que disminuyen las posibilidades para el PAN ante los recientes triunfos del Partido Revolucionario Institucional en el estado de México o Coahuila, asentó que estas no son victorias representativas, ya que estaban gobernados por el PRI.

Destacó los triunfos del PAN en Puebla, Sinaloa, Baja California Sur y Oaxaca, por lo que consideró que esta tendencia se repetirá en 2012, “tenemos victorias importantes, tenemos buenos gobiernos y buenos candidatos”.

En entrevista posterior, Cordero aseveró que aún no renunciará a pesar de los rumores que lo ubican fuera del gabinete en un posible relevo de funcionarios antes del 15 de agosto, e indicó que se mantendrá en su cargo al menos mientras concluye la negociación del presupuesto del año entrante.

Larga marcha. Rolando Cordera Campos

En materia de pobreza y otros aspectos del bienestar o del desarrollo social no hay nunca acuerdos unánimes, mucho menos definitivos. Así como un ministro de la señora Thatcher declaró alguna vez superada la pobreza en Gran Bretaña para ser refutado por los estrujantes datos de la pobreza infantil, así el secretario de Hacienda Cordero fue echado para atrás por las cifras de pobreza, desigualdad, malestar y mal empleo que se construyen con los productos estadísticos del Inegi, y que dan cuenta no sólo de nuestra desprotección generalizada sino de la incapacidad del gobierno y del Estado para reaccionar con oportunidad y eficacia ante fenómenos devastadores, como la crisis iniciada en 2008 o muchas de las desventuras naturales que caen sobre regiones enteras del país para sumir a los pobladores en nuevas calas de pobreza de las que resulta siempre difícil salir.

A pesar de lo mucho hecho en materia de protección civil, es claro ya que muchos de los descalabros atribuibles a las agresiones y veleidades de la naturaleza están predeterminados por la inexistencia de la ordenación urbana, la pobreza que lleva a la invasión o a vivir dónde y cómo se pueda, o la falta de infraestructura adecuada para canalizar las aguas, encauzar crecidas y demás fallas de fondo de nuestro hábitat urbano. Y lo mismo puede decirse del campo de la acción estatal que pomposamente llamamos política social.

Los hallazgos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social, tan bien reporteados por los colegas de este periódico, dan para mucho en la glosa o la mera descripción y traducción de sus cifras y coeficientes, y deberían dar para mucho más si los medios de comunicación se decidieran a hacer de la pobreza y la desigualdad tema de fondo y compromiso editorial. Entonces tendríamos el panorama viviente, como el desierto de aquella inolvidable serie, de lo que significa vivir “aquí donde nos tocó”, para parafrasear a la maestra Cristina Pacheco.

Tomar conciencia de la cuestión social mexicana, resumida aún por la pobreza de masas y la desigualdad inconmovible, no es asunto de los pobres sino sobre todo de los que no lo son. En primer lugar de los legisladores y sus partidos, de los gobernantes, hasta del secretario metafórico y del gobernador del Banco de México.

Asumir como entorno la presencia cotidiana de decenas de millones de mexicanos acorralados por la incapacidad monetaria o la insuficiencia de garantías de sus derechos fundamentales, es un ejercicio ciudadano elemental y poco o nada tiene que ver con el folclor de la pobretometría o el regodeo con la pobreza que habríamos heredado de no sé qué deidad azteca. Tiene que ver, sobre todo, con nuestra integridad intelectual y con alguna manera, no siempre precisable, de adscribirnos a un orden moral y político colectivo, a una comunidad basada en la simpatía, diría Adam Smith, con el conocimiento de sí misma y el mínimo común denominador de un futuro compartido y compartible.
De esto están hechas también las naciones que de ser comunidades imaginadas, casi siempre por su elites, se vuelven espacios difícilmente sustituibles para la subsistencia y la reproducción. Desde luego en la globalización y su cosmopolitismo.

Saber que hay 35.8 millones de mexicanos que no tienen garantizado su acceso a los servicios de salud, o que 28 millones no tienen garantizado el acceso a la alimentación, no se edulcora al saber que antes eran más, mucho menos si ocurre que eran menos. La carga de la tarea para cubrir a los no cubiertos es tal, el ritmo de reducción de la carencia es tan lenta, que lo primero que se ocurre es poner la indignación a buen recaudo y prohibir que en las sobremesas se toque el tema, aunque sea parte de los acontecimientos del día o la semana.

A esta fuga seguirá el autosabotaje, el adoptar las más grotescas teorías, casi siempre raciales, sobre los pobres, para terminar recriminando a López Obrador por haberlos vuelto sujetos y objeto de la política democrática, hasta repetirle que “por eso perdió”, por aquello de por el bien de todos, primero los pobres.

Pues resulta que, según la maestra, López Obrador no perdió pero sí lo hicieron los pobres de entonces, cuya presencia protagónica en la campaña de 2006 hubo de pagar inaceptables posposiciones de una urgente revisión de la política social, desviaciones y manipulaciones groseras con los programas en curso y, al final, la adopción necia de una política económica antes, en y después de la crisis, que los condena a hacerse más y a dejar en la entrada del circo político toda esperanza. El circo electoral se ofrece, se anuncia de tres pistas y muchos clowns, pero la marca histórica de la desigualdad queda fuera del cartel.

Desprotección laboral inicua; desprotección personal galopante; desprotección sanitaria que se reproduce a pesar del espectacular empadronamiento del Seguro Popular: nada de esto se puede exorcizar con juegos de ingenio para inventar mayorías o poner siempre en relativo las magnitudes agresivas de la cuestión social contemporánea. Con lo que sabemos ya, podríamos intentar, como se pretende hacer en la medicina avanzada, una “política basada en la evidencia”.

El boleto de entrada para los aspirantes debería ser su compromiso con el conocimiento adquirido y su rechazo a todo aquello que huela a mistificaciones hechas por encargo. Sólo así se adquiriría el pase a la lucha por el poder que se presume democrática.

Con eso tendríamos para empezar lo que cada día parece más obligado para la existencia en común: un saneamiento de la política que se ha vuelto inconcebible sin poner en práctica la consigna gramsciana de una reforma intelectual y moral.

La izquierda debería ser abanderada de esta marcha… si la entiende como tal y con esos fines, intelectuales y morales; esquivos y peligrosos pero irrenunciables.

Calderón: ¿un solo error?. José Agustín Ortiz Pinchetti

El despertar

El general Obregón decía –como recuerda Agustín Basave– los políticos cometen un solo error, todos sus demás errores derivan de ese”. Pongamos a prueba esa tesis en el caso de Felipe Calderón: podría pensarse que su macroerror ha sido la macroguerra. 40 mil muertos. El tráfico y las redes criminales se han duplicado, la escalada sigue y seguirá hasta el fin del sexenio. Si uno no sabe a dónde va puede terminar en el peor lugar posible.

Si vemos un poco más a fondo, ese macroerror se derivó de otro. Calderón se lanzó a la aventura militar para compensar su ilegitimidad de origen. Quiso justificarse demostrando que “tenía agallas” imitando a Salinas, un usurpador anterior. Pero él no podía detener a ninguno de los innumerables políticos –delincuentes– porque dependía de ellos.

Atrás de la ilegitimidad de origen hubo otra pifia: perdió su oportunidad de limpiar su elección y demostrar que tenía verdadera valentía aceptando la propuesta de la oposición del recuento (voto por voto, casilla por casilla). Prefirió llegar al poder manchado.
Atrás de ese error hay otro: haber autorizado la campaña del miedo, el terrorismo mediático contra Andrés Manuel López Obrador impulsado desde la Presidencia y la cúpula empresarial, en violación al espíritu y la letra de la ley. La campaña dividió a la sociedad, la puso al borde de la violencia, que se hubiera producido si AMLO no hubiera disciplinado a su gente. La poralización puede revivirse potenciada a la décima en 2012.

Y más profundo encontramos otro error de los que se derivan todos: violentar los principios democráticos al intentar ganar “a como diera lugar” como hacían los priístas, según denunció en 1988 Manuel Clouthier. Sabemos o deberíamos saber que el que rompe con sus principios en aras de sus intereses, tarde o temprano también destruye sus intereses. A esto se debe la múltiple ruina del régimen de Calderón, del PAN y del país.

Policías comunitarias abaten índices de criminalidad

Más pueblos indígenas de Guerrero y Michoacán organizan su autodefensa
“Existimos porque el gobierno no hace su trabajo”
En marcha, sistema basado en sus normas tradicionales
Ostula, Cherán y San Luis Acatlán defienden sus tierras
“No disputamos el poder; aquí los partidos políticos no entran, advierten en Xayakalan
Foto
Imagen de Cherán, Michoacán, donde luego de 16 años de haberse formado la policía comunitaria, por primera vez una mujer se sumó a las labores de vigilancia de la comunidadFoto Notimex
Foto
Pobladores de Cherán reforestan el cerro de San Miguel, el cual fue devastado por los talamontes, apoyados por el crimen organizadoFoto Notimex
Gloria Muñoz Ramírez
 
 
Especial para La Jornada
Periódico La Jornada
Domingo 7 de agosto de 2011, p. 2
Cherán y Ostula, Mich., y San Luis Acatlán, Gro. Cansados de los asaltos, robos y violaciones en La Montaña y la Costa Chica de Guerrero, de la tala de los bosques y de la delincuencia organizada en Cherán, así como de la invasión a su territorio en Ostula, miles de indígenas de estos pueblos decidieron valerse por sí mismos y organizar su autodefensa.
Con historias y dinámicas distintas, los comuneros de Cherán, en la meseta purépecha; los nahuas de Ostula, en el litoral del Pacífico michoacano, y los mixtecos, nahuas y mestizos de La Montaña y Costa Chica de Guerrero, reivindican sus sistemas de seguridad tradicionales y tienen en sus manos la vigilancia de sus comunidades.
Mientras en Ostula y Cherán los pueblos –al margen del gobierno– se hacen cargo de la vigilancia local, en Guerrero 65 comunidades tienen, además de los cuerpos de seguridad, un sistema de impartición de justicia propio basado en la reducación.
Representantes entrevistados en sus respectivas sedes coinciden en que ninguna de estas experiencias corresponde a grupos armados contra el gobierno, pero sí reflejan la falta de justicia y de seguridad en sus zonas. En una palabra, existimos porque el gobierno no hace su trabajo, afirma Pablo Guzmán, uno de los nueve coordinadores de la policía comunitaria de Guerrero.
No es casual que los tres casos se lleven a cabo en comunidades indígenas. Son los pueblos indios de México los que están ofreciendo una alternativa para el país, señalan pobladores de Cherán entrevistados en la casa comunal, en el mismo inmueble que anteriormente albergó la presidencia municipal, hoy recuperada por los pobladores.
El reto actual, además de la seguridad interna, son los megaproyectos que intentan despojarlos de su territorio. La amenaza en Ostula –explica el jefe de Tenencia– es la construcción de la supercarretera Coahuayana-Lázaro Cárdenas y el Plan Regional para el Desarrollo Turístico Integral de la costa de Michoacán. Un puerto, hoteles y demás planes inmobiliarios están contemplados para esta región; mientras en Cherán es la riqueza de sus bosques la que está en juego, donde los talamontes son los que se han beneficiado. En La Montaña de Guerrero, por su parte, la amenaza actual al territorio viene de los proyectos mineros de origen inglés y canadiense.
Las recientes intimidaciones, los levantones y homicidios de que han sido víctimas los comuneros de Ostula y Cherán los obligan a permanecer en el anonimato. Acceden a las entrevistas y acompañan el recorrido por sus poblados pero piden no dar sus nombres. Los de la policía comunitaria de Guerrero sí se identifican, pues aunque tienen órdenes de aprehensión en su contra, su situación actual es distinta.
Ostula: De aquí nadie nos saca
El 29 de junio de 2009, los nahuas de Ostula recuperaron más de mil hectáreas de tierras, montes y playas que durante más de 40 años estuvieron en manos de pequeños propietarios de La Placita. Desde ese momento esas tierras llevan el nombre de Xayakalan.
Pudimos recuperar nuestras tierras, señala El Trompas, uno de los responsables de la seguridad, gracias a que todos le entramos a reorganizar nuestra policía tradicional. Ahora, de aquí no nos vamos; para eso tenemos nuestra policía.
El paraje de Xayakalan está destruido. Una playa tapizada de palmeras y cocos en el piso, los techos de las palapas hechos pedazos, enormes troncos encima de lo que hasta poco fueron casitas, cientos de árboles de tamarindo arrancados desde la raíz, casas de adobe sin techo y con enormes boquetes en las paredes, un jardín de niños del que, literalmente, sólo queda un palo, dan cuenta del paso del huracán Beatriz, que en junio pasado azotó a esta comunidad de la costa michoacana.
Poco más de dos años después de haber recuperado estas tierras, El Trompas asegura: todos aquí seguimos puestos. Si el huracán no nos sacó, menos el gobierno.
Junto con otro grupo de indígenas explica que la policía comunitaria de Ostula está conformada por cerca de 500 integrantes y su función es resguardar el perímetro de las tierras en conflicto. No están –insisten– para enfrentar a la delincuencia organizada, para desarmar a nadie ni para intervenir en otras cosas; sólo para cuidar el territorio que nos pertenece.
Una característica común en Ostula, Cherán y los poblados de Guerrero es que ninguno de sus policías recibe sueldo ni retribución alguna. En Cherán y en Ostula no tienen uniforme ni distintivos, mientras en Guerrero cuentan hasta con credenciales y modestas camisetas y gorras con el emblema de la policía comunitaria de Guerrero, que está por cumplir 16 años de existencia; la de Ostula tiene dos años y la de Cherán sólo cuatro meses de haber sido reactivada, aunque en realidad, coinciden todos, lo que se está poniendo en práctica es una organización basada en sus sistemas normativos tradicionales. Nada nuevo.
Ostula es una de las tres comunidades nahuas del litoral del Pacífico michoacano. Las otras dos son Pómaro y Coire. Juntas poseen más de 200 mil hectáreas de territorio dentro de la costa y los montes de la Sierra Madre del Sur hasta Guerrero y Oaxaca. En las más de mil hectáreas de Xayakalan actualmente habitan unas 250 personas pertenecientes a 40 familias. Este es el territorio vigilado.
Foto
Policías comunitarios de Guerrero, luego de una asamblea de las autoridades autónomas. Imagen de 2002Foto Marco Peláez
En ocasión de su segundo aniversario, denunciaron el asesinato de 26 comuneros, cuatro desaparecidos, decenas de viudas y huérfanos y cientos de desplazados. Pero hoy, señalan, la situación está más tranquila.
El pasado 20 de julio, la asamblea general decidió no participar en las elecciones estatales de Michoacán, previstas para el próximo 13 de noviembre. Los partidos políticos, cuando andan queriendo el puesto, te platican bonito, pero después ni te conocen. Todo está por demás con ellos y aquí no entran, finalizan los entrevistados bajo una palapa semidestruida en Xayakalan.
No volvemos a entregar nuestra seguridad
En otro lado de Michoacán, en el corazón de la meseta purépecha, la cotidianidad de la comunidad de Cherán cambió radicalmente a partir del pasado 15 de abril, fecha en que decidieron reactivar la autodefensa de un pueblo asolado por los talamontes que casi terminan con sus bosques.
Han pasado casi cuatro meses desde que los pobladores decidieron prácticamente encerrarse en su comunidad. Instalaron barricadas en todos los accesos y en las noches cerca de 200 fogatas alumbran la vigilancia de un pueblo entero que se cuida a sí mismo. Al igual que en la comunidad nahua de Ostula, las armas son más simbólicas que otra cosa: machetes, palos, hachas y una que otra escopeta de cacería.
El movimiento empezó cuando, cansados de la tala clandestina de sus bosques, decidieron enfrentar a quienes saquean la madera desde hace tres años. Los pobladores denuncian que los talamontes, armados hasta los dientes, hasta el momento han destruido totalmente más de 15 mil hectáreas (80 por ciento del bosque de 20 mil hectáreas).
A partir de que la seguridad está en sus manos, los delitos al interior han bajado hasta en 90 por ciento. No han logrado abatir por completo la tala, pero también la han mermado de manera considerable. Asimismo, en sólo tres meses consiguieron reducir más de 50 por ciento el alcoholismo en la comunidad.
Actualmente está prohibida la propaganda electoral. Ni los autos ni las casas pueden exhibir pancartas o calcomanías de un partido político, y si los candidatos intentan entrar lo consideramos un acto de provocación.
La ronda tradicional está a cargo de la seguridad de los más de 20 mil pobladores, pero es más interna que externa, pues no podemos competir con las armas que trae la delincuencia organizada.
La comunidad tiene ley seca desde que empezó la movilización, por lo que una de las tareas de la ronda es vigilar el orden y amonestar o detener a quienes ingieren bebidas alcohólicas: si un compañero se emborracha y es la primera vez que lo agarramos, lo exhortamos a que ya no lo haga. La segunda vez se le castiga con trabajos comunitarios, como la limpieza de las barricadas o de las fogatas. Y la tercera vez se le manda obligatoriamente a rehabilitarse en Alcohólicos Anónimos. Todo esto por decisión de la asamblea.
Independientemente de lo que ocurra en el futuro –señalan–, el proceso que iniciamos ya no tiene regreso. Nosotros ya no volvemos a entregar nuestra seguridad interna al gobierno.
Una de las experiencias autónomas más notables en cuanto a sistemas de impartición de justicia (fuera de Chiapas), la protagonizan 65 comunidades de la Costa Chica y La Montaña de Guerrero, que desde hace casi 16 años se hacen cargo de su seguridad, disminuyendo la delincuencia hasta en 90 por ciento.
Juan González Rojas, fundador de la policía comunitaria y su primer coordinador, recuerda la región azotada por innumerables delitos, con la indiferencia y/o complicidad de los gobiernos en turno. Homicidios, abigeatos, asaltos en carreteras y violaciones de mujeres eran comunes en la zona, hasta que el pueblo de Santa Cruz del Rincón se cansó y se juntó para ver qué hacía para defenderse, y así empezó la policía comunitaria.
Al gobierno –recuerda uno de los fundadores– no le gustó la idea, pero les dijimos que no íbamos a negociar, sino a informar lo que estábamos haciendo. Entonces, nos dio un ultimátum para que nos desarmáramos. Les dijimos que no éramos un grupo armado para enfrentarlos, sino para coadyuvar en la seguridad de la población.
Empezaron aproximadamente 10 comunidades, y 16 años después son 65, cada una con su propio grupo de policías. En total cuentan con alrededor de 600 policías para una población de 100 mil habitantes de 11 municipios.
Pablo Guzmán, uno de los nueve coordinadores actuales, explica: ya no se trata sólo de detener delincuentes ni sólo de impartir justicia y reducarlos, sino de ir al fondo de los problemas, pues nada resolvemos si recibimos denuncias todo el día, lo que debemos atacar es el origen de las mismas, como el alcoholismo, el desempleo, la descomposición familiar, la falta de educación, etcétera. Y en eso están.
Su relación actual con el gobierno, con todo y las órdenes de aprehensión en su contra, es de no enfrentarnos, pues no le disputamos el poder. Sólo que nos dejen trabajar en paz
Felícitas Martínez Solano fue la primera mujer dentro de la policía comunitaria. Es coordinadora regional y señala que en estos 16 años las mujeres han sido invisibles. No ha sido fácil su inclusión, pero ya no es lo mismo que antes, afirma.

El mandato de Calderón está marcado por la "inmoralidad", sostiene periodista

¡ Como han robado !
"La política ya estaba corrompida en este país, no voy a decir que la corrompió el Partido Acción Nacional (PAN). Quiero decir que el Gobierno de Calderón y el PAN, que lleva poco más de diez años (en el poder), prometieron el cambio, otro tipo de gobierno, y han sido lo mismo", explicó en entrevista el periodista.
Cruz Jiménez (México, 1956) acaba de publicar en México "Las concesiones del poder. El tráfico de influencias que ha marcado al sexenio" (Planeta, 2011), una "revisión crítica" de los más de cinco años del actual Gobierno donde denuncia que sus integrantes "aprendieron todos los vicios del pasado, pero nunca a gobernar".
La crítica es especialmente dura con Calderón y su esposa, Margarita Zavala, de quien dice que "es la primera beneficiaria del nepotismo" ligado a la política, que dispensó favores a algunos de sus familiares.
Entre ellos cita a su primo Carlos Felipe Zavala Gómez del Campo, quien pasó "gracias a los apellidos" de ser asesor de Petróleos Mexicanos (Pemex) en 2006 a ser alto funcionario en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), refiere el comunicador.
También señala que Mariana Gómez del Campo, "sobrina consentida" de la esposa de Calderón, se convirtió en líder del PAN en el Distrito Federal como favor por su parentesco con la primera dama, comportamientos en los dos casos poco decorosos.
Al mandatario le reprocha que haya permitido que su hermana, Luisa María, incumpliera la promesa de que no iba a ser "la hermana incómoda", se alejara de la política en 2006, pero después volviera a su estado natal, Michoacán, a controlar buena parte de lo que allí sucede "a través de los apoyos que le daban los secretarios (ministros) de Estado".
"Hoy acaba de iniciar formalmente su campaña por la candidatura del PAN a la gubernatura de Michoacán", que se decidirá en noviembre próximo.
Cuestiona también el enriquecimiento de Calderón en un momento particularmente duro para su país, que pasó de tener 45 millones mexicanos en la pobreza en 2006 hasta más de 52 a mediados de este año.
"Mientras todos los mexicanos nos empobrecíamos, ellos empezaron a crecer sus propiedades. No es ilegal, es inmoral", añade.
También critica la falta de interés del gobernante por hacer que las grandes fortunas del país aporten más al erario público.
La obra, sin testimonios directos de Calderón y su entorno, está basada en informes de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) e información periodística.
"Calderón va a pasar a la historia con ese dudoso honor de haber perdido a medio sexenio gran parte del electorado duro del PAN. Y además va a entrar como el presidente que reposiciona al Partido Revolucionario Institucional (PRI)", señala.
En materia de seguridad, el periodista afirma que desde el Ejecutivo "no saben lo que están haciendo".
"Empezaron una guerra solo para legitimar a Calderón sin saber lo que estaba pasando, de tal forma que hoy tienes más de 40.000 muertos y todavía no saben cómo va a terminar", agrega.
De cara a las elecciones presidenciales de 2012, cree que "a menos que Felipe saque un as bajo la manga contra el PRI" ese partido las ganará.
Frente a esa circunstancia no descarta que el beneficiado de una coyuntura adversa pudiera ser el izquierdista Marcelo Ebrard, actual alcalde de Ciudad de México.
Además de su libro sobre Calderón, Cruz ha escrito varios sobre narcotráfico, como "El cártel de Juárez"(2008) y "Tierra narca" (2010), y otros sobre política como "Enrique Peña Nieto y el Grupo Atlacomulco" (2009).
En enero del próximo año tiene previsto lanzar uno más sobre el exaspirante presidencial Andrés Manuel López Obrador.

Amor traicionero. Omar



Esclavos de las apariencias



Se gobernará con el pueblo, manifiesta López Obrador



Tuxtepec, Oaxaca
Sábado 06 de agosto de 2011


Se fortalecerá la democracia participativa y se incorporarán a la Constitución las figuras de la consulta, el referéndum, el plebiscito y la revocación de mandato, para gobernar de la mano con el pueblo, informó Andrés Manuel López Obrador, en caso de favorecerle el voto en la contienda presidencial del 2012.


Los temas de interés nacional se someterán a consulta, cada uno de ellos se revisará a detalle, se pondrá a consideración de los ciudadanos y se solicitará la opinión de expertos y especialistas, explicó al destacar la necesidad de pasar de la democracia representativa a la democracia participativa.


“Yo voy a establecer el método de la consulta, del referéndum y del plebiscito y de la revocación del mandato e incorporar dichas figuras en la Constitución, para que el pueblo no sólo vote y no se le vuelva a tomar en cuenta, hasta la celebración de nuevas elecciones, cada tres o seis años; se debe gobernar con el pueblo y fortalecer la democracia participativa y no quedarnos nada más en la democracia que tiene que ver con las elecciones”, abundó.


En entrevistas con representantes de los medios de comunicación, el presidente legítimo de México expresó que en el 2012 se presentarán, a diferencia del 2006, mejores condiciones para derrotar nuevamente en las urnas a la mafia del poder. Hace cinco años “nos robaron la Presidencia de la República, porque se valieron de que no teníamos organización”.


Ahora –explicó— “tenemos más organización, mucha unidad y no nos vamos a dividir, vamos a ir juntos todos, tenemos que buscar la unidad de todas las fuerzas progresistas”.


De cara a la próxima elección presidencial, las dirigencias nacionales del PRD, PT y Convergencia “están buscando que haya unidad y que se forme una coalición de los tres partidos”, señaló al asegurar que el jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, es su amigo y que mantienen un acuerdo: Que va a ser candidato el que esté mejor posicionado frente al electorado.


Con relación a la guerra que emprendió el gobierno del presidente espurio Felipe Calderón en contra de la delincuencia organizada, López Obrador calificó como un fracaso la política seguida en la materia. ”Lo peor de todo es que no quiere cambiar, a pesar de que ya van más de 40 mil asesinatos y un indeterminado número de desaparecidos”, aclaró.


Como lo ha sostenido en todas las plazas públicas, dijo que el problema de la violencia e inseguridad no se va a resolver con soldados, policías y cárceles, sino que “tiene que cambiar la política económica, tiene que haber empleo y bienestar y atención a los jóvenes. Además de limpiar el gobierno de corrupción, como se limpian las escaleras, de arriba hacia abajo”.


El problema fundamental es la corrupción imperante y no se distinguen las fronteras, “no se sabe dónde está la autoridad y dónde está la delincuencia organizada. Son lo mismo. Hace falta que haya honestidad y combate a la corrupción”.


En las asambleas informativas de este día en Tuxtepec, Oaxaca, así como en Cosamaloapan y San Andrés Tuxtla, Veracruz, el presidente legítimo subrayó que el combate a la delincuencia organizada pasa por atender los problemas sociales, en particular dar respuesta a las necesidades de los jóvenes.


Informó que después de derrotar a la mafia del poder en la jornada del 1 de julio de 2012, en el nuevo gobierno “iríamos casa por casa, para incorporar a los jóvenes al trabajo y al estudio, porque si no lo hacemos, los jóvenes son tentados para tomar los caminos de las conductas antisociales”.


En la delincuencia organizada “los vacíos siempre se llenan. Si no se va por los jóvenes, llegan otros y los enganchan. Por esa razón, lo primero que se tiene que hacer es brindar oportunidades a los jóvenes, y con ello se crearía un ambiente de progreso y de justicia”, enfatizó.


Al reiterar la necesidad de garantizar mínimos de honestidad en el manejo de la seguridad pública y la procuración de justicia, señaló que resulta fundamental designar a gente honorable en esos cargos, pagar bien a los policías, brindarles seguridad social, “para que también representen a la autoridad y no sean penetrados por la delincuencia organizada”.


Por tratarse de un asunto fundamental, aseguró que “se requiere mucha organización entre las corporaciones policiacas, porque ahora por un lado está el Ejército, por su lado la Marina, por su lado la Policía Federal Preventiva, por su lado la policía ministerial y por su lado las policías estatales y las policías municipales. Entonces, tiene que haber una coordinación permanente, para que se actúe de manera conjunta”, abundó.


Descartó sin embargo una eventual militarización del país y subrayó que la apuesta a las elecciones, por considerar que es la única vía pacífica para transformar al país y sus instituciones.


En el mensaje que dirigió a los pueblos de Oaxaca y de Veracruz, López Obrador expresó que el Movimiento Regeneración Nacional se construye para sacar a México del atraso en que se encuentra.


El país cuenta con mucha potencialidad y recursos naturales, pero muy abandonado, porque no hay apoyos a los productores ni créditos baratos, tampoco facilidades para la comercialización de los productos del campo, admitió.


Manifestó que el gobierno democrático convertirá al petróleo en palanca del desarrollo nacional y “no vamos a permitir la privatización de la industria petrolera y eléctrica”.