lunes, 10 de mayo de 2010

La Guerra Perdida

por: Ferrer Galván Acosta
http://ferrergalvan.blogspot.com

Yo si creo que encuartelando al Ejército se da un gran paso para pacificar al país.

1. México es el Vietnam de Felipe Calderon Hinojosa. Debe retirar al ejercito, pues ha perdido la guerra.

2. Las guerras se ganan con balas, con estrategia, con política y sobretodo con propaganda.

3. Calderón ha perdido su Guerra porque no tiene estrategia ni propaganda, la percepción de la violencia es y ha sido contra él.

4. La Guerra la gana el que tiene una paz que ofrecer o una violencia a la cual teman los adversarios. Y al Gobierno Federal solo le temen los civiles y no tiene paz para ofrecer.

5. La paz se construye con justicia social, con estabilidad económica y con la garantía de la supervivencia. O sea con un gobierno.

6. Calderón no puede ofrecer esa Paz porque no es un gobierno y porque no tiene consenso para crear uno.

7. Es decir, Calderón perdió la guerra. Ahora debe retirar su ejercito, renunciar al cargo que usurpa y México debe construir un gobierno.

8. Alguien tiene que decirlo, sin ambages: Se tiene que negociar con los carteles, ofrecerles una paz duradera.

9. Calderón no puede encabezar la negociación pues es la cabeza que el Estado ofrece ante su derrota.

10. Se tiene que negociar con los Cárteles al tiempo de legalizar el consumo de Mariguana para desfondar el mercado ilegal interno.

11. Es una obligación del pueblo en resistencia derribar al "general" que perdió la batalla.

12. Para pacificar al país solo queda la resistencia civil pacífica, con tres banderas:

13. UNO: Retiro del Ejército y restablecimiento del Estado Civil y de Derecho.

14. DOS: Renuncia de Felipe Calderón Hinojosa.

15. TRES: Legalización de la Mariguana

16. Bajo el entendido de que el Gobierno de Usurpación es sólo el instrumento de intereses oligarcas y no se espera su renuncia de forma racional, sólo queda la resistencia pacífica y la desobediencia civil.

17. El camino es conminar civilmente al ejército federal a abandonar su derrota y permitir el restablecimiento del orden constitucional.

18. Es la hora de los cinturones de Paz en Reynosa, Cd. Juárez, Morelos y Nuevo León

19. Es el momento de propagandizar entre las tropas del Ejército del Estado Mexicano, que son un Ejército de todo el Estado, no de su gobierno y que la arenga para matar civiles tarde o temprano los llevará a matar a sus familiares.

20. México no está en Paz.

21. Hoy más que nunca es inminente la necesidad de un Gobierno Legítimo. Que llame a los sectores sociales, políticos y económicos para pacificar al país.

22. Porque esta guerra, la de Calderón contra sectores del crimen organizado, no es una guerra del Estado mexicano.

23. Viva la Resistencia Civil Pacífica

Gamboa Patrón recibiendo instrucciones:

Tacha Fox de “vagos y baquetones” a diputados... y sólo son sus encubridores.



Notimex/Notimex | 10 de Mayo, 2010 - 06:55
Se trata de los mismos legisladores que acusaron de corrupción, opacidad, falta de rendición de cuentas y derroche el anterior sexenio. Las cuentas públicas que están pendientes son las del 2003 a 2006.

Vicente Fox.San Cristóbal, Gto.-El ex presidente Vicente Fox calificó como ‘vagos y baquetones’ a los diputados que no han aprobado las cuentas públicas del segundo periodo de su gobierno.

Se trata de los mismos legisladores que acusaron de corrupción, opacidad, falta de rendición de cuentas y derroche el anterior sexenio. Las cuentas públicas que están pendientes son las del 2003 a 2006.

La que se aprobó a finales de abril fue la de 2002, en medio de fuertes disputas entre legisladores de los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI).

‘Por vagos no las han aprobado, ahí están, no sé qué están esperando… pues que las saquen, yo no sé que están esperando, cual es el problema… Por vagos, cómo te puedes esperar cinco años, ocho años para aprobar una cuenta pública si ahí está presentada en tiempo y forma cuando lo marcó la ley, ahí están las cuentas’, expuso.

‘Son baquetones en el Congreso y no hacen el análisis de las cuentas, es problema de ellos, yo estoy tranquilo, absolutamente tranquilo”, indicó Fox.

El ex mandatario también manifestó su preocupación por el caso de Aguascalientes, donde no se ha podido registrar al candidato a la gubernatura por el PAN, Martín Orozco.

‘Debió haberse resuelto esto, ir con otro candidato, no entiendo por qué cuando la circunstancia marca ese impedimento se fue perseverante e insistente y necios en seguir adelante con algo que no iba a funcionar’, expresó.

Sobre las encuestas que marcan una tendencia negativa a los candidatos de alianza y a los mismos candidatos del Partido Acción Nacional (PAN), pidió esperar a que inicien las campañas para ver una competencia más reñida.

No obstante, pronosticó un fracaso en las elecciones donde van en alianza con otros partidos.

‘Yo ya he señalado mi impresión ahí, me temo que no van a funcionar, el ciudadano no compra estas revolturas sin tener una verdadera ideología atrás, sin tener valores, sin tener una propuesta de gobierno, así es que hay que ver en estas dos o cuatro semanas’, dijo.

Por otra parte, Fox Quesada rechazó la ley antiinmigrante aprobada en Arizona.

Indicó que el gobierno de ese estado y sus legisladores se están equivocando, ya que no distinguen entre un inmigrante y un terrorista o criminal.

Señaló que la migración enriquece la economía y la cultura de las naciones, e indicó que esta medida la pueden lamentar a mediano y largo plazos.

‘El propio estado de Arizona va a pagar un alto precio por esto, porque ellos necesitan a los migrantes, porque el estado necesita el ingreso de los turistas mexicanos, porque están rompiendo una relación de muy largo plazo que se había establecido entre los estados del norte de la República Mexicana con los estados del sur de los Estados Unidos’, manifestó.

Vicente Fox hizo estos comentarios en el marco del Primer Festival Cultural Internacional España, que se lleva a cabo en el Centro Fox.

Combatir la pobreza, solución a la delincuencia, dice AMLO

Asiste en Acapulco al informe del senador Lázaro Mazón Alonso


Misael Habana de los Santos
Corresponsal
Periódico La Jornada
Lunes 10 de mayo de 2010, p. 8
Acapulco, Gro., 9 de mayo. La forma más barata, más humana y más eficaz de acabar con el flagelo de la delincuencia es combatiendo la pobreza, así como garantizar el trabajo y mejores formas de vida a los mexicanos, consideró aquí Andrés Manuel López Obrador.

El ex candidato presidencial asistió al cuarto informe del senador perredista Lázaro Mazón Alonso, considerado en sectores locales aspirante a la candidatura del Partido de la Revolución Democrática (PRD) al gobierno del estado de Guerrero para los comicios de enero próximo. El informe del legislador se realizó este domingo en el Centro de Convenciones de Acapulco.

En ese acto, López Obrador dijo que la inseguridad y la violencia no se resolverán con soldados ni policías ni con cárceles, amenazas de mano dura o leyes más severas.

Entrevistado después del informe, el ex jefe de Gobierno del Distrito Federal señaló, como lo hizo durante el acto ante casi 3 mil asistentes, que “el grupo gobernante, los 30 potentados que detentan el poder económico y político en México”, lo mismo que el presidente Felipe Calderón, carecen de una idea clara sobre el problema.

“Tienen una idea muy atrasada; el asunto de la inseguridad y la violencia no se puede resolver de manera coercitiva; todo lo enfocan así. Por ejemplo, en el gabinete de seguridad, donde están los secretarios de Defensa, el de Marina, el procurador, el secretario de Seguridad Pública, el de Gobernación, deberían estar también los titulares de Desarrollo Social, de Educación y de Salud. Éste no es un asunto que vayan a resolver los jefes de los soldados, los jefes de los policías”, afirmó.
Dijo también a los asistentes al acto de Lázaro Mazón –al cual asistió el coordinador del partido del sol azteca en la Cámara de Diputados, Alejandro Encinas– que la violencia que se vive en Guerrero “es un asunto que tiene que resolverse con el desarrollo social, no con el uso de la fuerza, con el uso de la violencia; es con la inteligencia y con la atención de los problemas sociales” como podrá salirse de esta situación, afirmó.

En entrevista, López Obrador lamentó los asesinatos de alcaldes perredistas y priístas ocurridos en Guerrero, el del dirigente estatal del PT, Rey Hernández García, al igual que los de “mucha gente inocente, de niños y también de los que caen por pertenecer a organizaciones delictivas; son seres humanos todos y también mexicanos”.

Añadió que “debe regularse la situación del país y lo primero para regularla es que haya trabajo, empleo. Lo que está sucediendo es fruto prohibido de la política excluyente que se ha venido imponiendo desde hace 20 años”.

Deploró que a pesar de “que cada vez esta peor la situación de inseguridad en el país, no hay ninguna medida, ninguna acción para atender los orígenes, las causas del problema; nunca he escuchado a Calderón hablar de que va a impulsar un programa de empleo, de atención a los jóvenes para contrarrestar la violencia” que se ha desatado.

Los hijos del narco

Lydia Cacho
Plan B
10 de mayo de 2010


El único gobernador de la historia de México que ha sido juzgado por vínculos con el narco es Mario Villanueva, el priísta extraditado ayer a Estados Unidos. Curiosamente quien tuvo la valentía para arrestarlo fue el presidente Ernesto Zedillo, quien antepuso la evidencia aportada por la DEA y SIEDO a la consabida colusión partidista que se estila en nuestro país. Este es un hecho histórico.

En aquel entonces las y los quintanarroenses vimos el dramático aumento en circulación de cocaína colombiana para mercados locales y el trasiego a Estados Unidos por el aeropuerto de Cancún y vía marítima por el Golfo. Villanueva recibía, según las autoridades, medio millón de dólares por cada cargamento propiedad de El Señor de los Cielos, Amado Carrillo, por ello el ex gobernador protegió y fortaleció al cártel de Juárez durante su mandato (1993 y 1997). Hay un sinfín de evidencias y testimonios sobre los narcorranchos y los servidores públicos que se aliaron para lograr introducir, según la DEA, cientos de toneladas de droga. Gracias a ello Villanueva logró lavar 100 millones de dólares.


Su familia lo sabía todo, pero favorecida por el enriquecimiento ilícito, usual entre políticos corruptos, lo apoya incondicionalmente. Lo sorprendente es que sus fechorías le convirtieron en héroe, creando un movimiento social que lo avala y que ha normalizado que un gobernador sea aliado de los cárteles mientras beneficie a sus huestes. Respaldado por este movimiento, el hijo de Mario Villanueva ha logrado imponer su poder en Quintana Roo y el PRI se vio “obligado” a darle la candidatura para la alcaldía de Othon P. Blanco (Chetumal). Pretende más tarde convertirse en gobernador y reivindicar la política de su padre. Miles de personas que se beneficiaron de la corrupción de Villanueva y de la entrada del narco en el estado, defienden al ex mandatario como a un mártir, casi con devoción. Algunos argumentan que es inocente, pero la mayoría, en un discurso totalmente amoral, insiste en que fue un buen gobernador y que “ayudó” a mucha gente (como si mezclar dinero público e ilícito fuera insustancial). Ahora las huestes del PRI villanuevista se fortalecen y con ellas se advierte la decadencia total de la capital estado.


El fenómeno Villanueva es ejemplar porque muestra claramente que el reto de toda la sociedad mexicana consiste en reconstruir y fortalecer la ética pública desde lo individual; de no ser así las próximas generaciones crecerán con una visión absolutamente cínica del mundo. Tal como sucedió con Berlusconi en Italia. Cuando le reeligieron sabían de sus vínculos mafiosos, de la corrupción de Estado, y sin embargo le dieron más poder. Hay quien dice que quienes votaron por Berlusconi no solamente se rindieron ante la mafiopolítica italiana; también asimilaron los principios corruptos del líder y coinciden con la cultura del “quien no transa no avanza”.


Quintana Roo da el ejemplo de cómo la sociedad, o una buena parte de ella, se hace cómplice abierta de la narcopolítica. En contraste, Juan Pablo, el hijo del capo Pablo Escobar, en su documental Los pecados de mi padre hace una revisión ética y emocional sobre el impacto del crimen organizado y sobre el daño que el narcotráfico y los cárteles hacen a la sociedad. Algunos aprenden la lección, otros simplemente viven de ella.

De la conjura de los yuppis a la conspiración de los necios




“El triunfo de la reacción es moralmente imposible”


ABRAHAM GARCÍA IBARRA

(Exclusivo para Voces del Periodista)


“No hay cosa más perjudicial a la República que un necio con opinión de
sabio, mayormente si tiene algún mando y gobierno…”. Huarte de San Juan

Examen de Ingenios para la Ciencia.


Al cerrarse el siglo XX, los arrogantes mandarines de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial (BM), que impusieron a las economías llamadas “periféricas” sus feroces políticas depredatorias, ante el cataclismo socioeconómico que derivó de esa criminal estrategia, declararon la última de ese periodo la Década perdida. Por fin rendían las banderas de su pretendida infalibilidad. Pero siguieron montados en su macho, hasta que, entre 2007 y 2010, la crisis del sistema económico globalizado desveló la tercermundización del campeón histórico del neomercantilismo: los Estados Unidos.


Desde la década de los cincuenta del siglo pasado, lúcidos estudiosos liberales de La sociedad de la abundancia, pertrechados en los enclaves académicos, bucearon profundo en la realidad estadunidense para desmontar ese mito genial, con el que la propaganda imperial exportó el “modo de vida americano” como modelo a armar en los territorios tercermundistas y aun en los del Primer Mundo. Pronto le cambiarían de apellido y, envuelta en sus astrosos paños, la bautizarían como Sociedad del desperdicio. Medio siglo después, sociólogos identificaron a la juventud crecida entre los mandatos de los republicanos Ronald Reagan y los Bush, como Generación X. Algunos sociólogos domésticos especulan que, caído el muro de Berlín, publicitado como inexorable triunfo del sistema capitalista, los idólatras del mercado, en su innoble euforia, se olvidaron de producir una nueva filosofía y una nueva economía que inyectara sentido de esperanza y realización a las nuevas generaciones paridas entre guerras sin justificación moral y sin gloria.







LA GENERACIÓN NINI


En México, puesto a remolque de los designios imperiales por la tecnoburocracia nativa, robotizada en el extranjero -mucho especialismo y poca sabiduría-, lo que se denominó “la anexión silenciosa” (a la “locomotora yankee”, según uso de Los científicos mexicanos decimonónicos), se ha expresado en tres décadas perdidas al hilo. La de la Decena trágica, comandada por el Partido Acción Nacional (PAN), ha registrado patente a una poblada Generación nini: Ni estudia ni trabaja, no precisamente por falta de ambición o voluntad. Es el resultado del abandono del humanismo político, volcado en una doble vertiente: 1) un eclecticismo ultramontano, enraizado en la incultura y el relativismo moral de la banda panista en turno, y 2) un pragmatismo cerril, ineficaz y estéril que, sin embargo, pretende maquillarse de excelencia.


El tema de esta entrega pretendía seguir dándole vueltas a la ensangrentada noria de la espantosa guerra calderoniana contra el narco, habida cuenta reciente filtración periodística que dio a conocer la supuesta intención del gobierno de retirar a las Fuerzas Armadas del combate directo a los cárteles, para limitarla a la localización y destrucción de cultivos y laboratorios de procesado de narcóticos.


Si fuera ese un propósito real, nos parecería juicioso desde dos enfoques: a) el de la verdadera preservación de la seguridad territorial y nacional, y de la soberanía. El desgaste físico y moral de las tropas frente a un enemigo interior al que se califica de minoría ridícula, puede ser fuente de tentación aun para el más pequeño ejército soberano de alguna República vecina que se viera en conflicto con México. Ya no digamos para los poderosos ejércitos del norte, tan ansiosos de continuar la cadena de agravios históricos contra nuestra nación, según lo recordó hace unos días aquí el ex presidente Bill Clinton. Si la primera hipótesis es simple imaginaria; la segunda es amenaza subyacente, latente y objetiva. ¿Qué resistencia efectiva pueden poner unas Fuerzas Armadas menguadas por el desaliento de una campaña sin solución de continuidad? Y…


HUMILLACIÓN AL EJÉRCITO


B) la humillación generada desde el interior mismo del gabinete presidencial. Frente al sacrificio de activos militares, a los que, a la hora de su muerte, se les rinde homenaje como héroes, al secretario de Economía, Gerardo Ruiz Mateos, se le ocurre soltar una monumental burrada, sostenida además en una vil mentira: La violencia no sólo no ha hecho huir a los empresarios de México. Lo que estamos viendo nosotros son los flujos de capital que están llegando a México. “Eso muestra que hay confianza en los inversionistas. En lugares donde el problema de inseguridad existe, hemos tenido muchas inversiones”. Ergo: Hay que seguir matándonos para satisfacer el interés de los inversores. Ruiz Mateos salió al paso así a una declaración del embajador de los Estados Unidos, Carlos Pascual, quien observa inversión extranjera a la baja por el aumento de la violencia. El cuadro se completa con una denuncia del claridoso general de división en retiro, Luis Garfias Magaña: “Hay una cosa importante: No se llega hasta arriba… Se llega con El Barbas, con El Chapo, pero no se llega hasta arriba, donde se hace el lavado de dinero (…) y verán qué sorpresas se encuentran. En México hay medios (para atacar ese frente), lo que falta es voluntad política”. (La Jornada, 22-IV-2010.)









El aplazamiento de ese tema específico que, según convicciones y cálculos de logística y estrategia militar, puede estar abierto durante los próximos diez años, nos lo impuso una licencia personal, sin embargo relacionada con la situación del México de nuestros días. La sentencia con la que encabezamos estas notas: El triunfo de la reacción es moralmente imposible, es atribuida a don Benito Juárez y la retomamos para nuestro trabajo periodístico presentado hace 25 años por El Día en Libros bajo el título Apogeo y crisis de la derecha en México. (En 1988, otros colegas nos editaron Los bárbaros del norte/ La contra mexicana, en el que, desde entonces, acopiamos información sobre las andanzas del “narco de Estado”, patrocinado desde la Casa Blanca por la dupla Reagan-Bush, una cuyas pistas genéricas se conoció como el Irán-Contra, que tuvo implicaciones decisivas y decisorias en México. Pero esa es otra historia.)



LA CONJURA EN JUÁREZ


A principios de 1982, vísperas de la sucesión presidencial -justamente seis años después de abortada la Conspiración de Chipinque (área metropolitana de Monterrey, Nuevo León, Hotel Ambassador-Chipinque), para derrocar al presidente Luis Echeverría-, precisamente en la hoy atribulada Ciudad Juárez, Chihuahua, conspicuos hombres de negocios, algunos de los cuales habían participado en el aquelarre de la capital regia, se convocaron secretamente para deliberar sobre una iniciativa y su correspondiente opción: Formar un “partido de los empresarios”, tentativa fallida a fines de la década de los setenta, cuando los impulsores del Partido Demócrata Mexicano (PDM: el partido del gallito) se negaron a la maniobra; o penetrar y apoderarse del Partido Acción Nacional. Se inclinaron por la opción. El calendario para las elecciones generales de ese año ya estaba en marcha y no daba tiempo de organizar y registrar un nuevo partido.


En el interior del PAN, hubo cuadros directivos que no ignoraban esa operación. Eran aquellos que, de su lado, sostenían contactos con la fundación alemana Konrad Adenauer -en la que se gestaron tentativas para enrolar al PAN en la Democracia Cristiana-, algunos de los cuales provenían de la Unión Social de Empresarios Mexicanos (USEM). Casualmente, varios de los conspiradores de Ciudad Juárez combinaban maliciosamente su agenda secreta con la pública: Aceptaban la invitación de José López Portillo a la última Reunión de la República (5 de febrero, 1982, Guadalajara, Jalisco), donde el mandatario, arrinconado ya por la crisis económica, trataría de explicar su filosofía del perro defensor del peso. Un discurso improvisado y hondamente conmovedor que horas después, en acto relativamente privado, hizo exclamar al presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Manuel El Maquío Clouthier del Rincón (Chipinque-Ciudad Juárez): “Nos hizo sentir orgullosamente mexicanos…”.





MÉXICO EN “LA LIBERTAD”


Cinco meses después, se daría la elección de Miguel de la Madrid, y el 1 de septiembre el sorpresivo decreto de expropiación de la banca, oportunidad calva que los empresarios tomaron por los pelos, para cumplir el objetivo que se trazaron en Ciudad Juárez, lanzarse sobre la ciudadela panista: Quien en febrero se sintió “orgullosamente mexicano” al calor de la oratoria lopezportillista, asumió el liderazgo de la campaña antigubernamental México en la libertad y el 21 de abril de 1983 (cuando los mexicanos conmemoraban el 79 aniversario del asalto al puerto de Veracruz por tropas estadunidenses), de la mano del embajador de los Estados Unidos, John Gavin, se presentaba en Salt Lake City, Utah, para denunciar que al PAN le habían robado el año anterior la elección presidencial.


Se trataba, según el contenido de su discurso, de prevenir al gobierno norteamericano (el republicano de Reagan), sobre los grandes riesgos “al sur de la frontera” que implicaba la instalación de un gabinete presidencial sin experiencia: “Riesgos”, aseguraba, “de que las tensiones sociales retarden nuestra recuperación económica. Peligro de que el actual sistema se destruya y los activistas dogmáticos -los que reciben consignas del exterior- y los anarquistas, puedan aprovechar para alcanzar el poder. Peligro de que los cambios que habrán de producirse sean por la vía violenta. Peligro de que el temor se apodere de muchos, porque éste es mal consejero. Los problemas internos de México deben ser resueltos con ayudas y soportes de tipo internacional”. Era 1983. Este antecedente está consignado en Apogeo y crisis de la derecha en México, mayo de 1985.


1983: El PAN irrumpe exitosamente el espacio electoral bajo el impulso de la derecha clero-empresarial; la segunda pinza, resentida por la expropiación bancaria. Una victoria emblemática es el arribo del Francisco Barrio Terrazas al gobierno municipal de Ciudad Juárez, financiado por el bancario clan Vallina (Comermex). El ex candidato presidencial del PAN, Luis H. Álvarez despacha en la alcaldía de Chihuahua-capital. Para entonces, empezará a ser visible el cruzamiento de nombres entre los directorios de los comités del PAN y el de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex). Hacia 1985-1986, cobra fama la Triple Alianza: Embajada de los Estados Unidos-Empresariado-Clero, como tripié soporte de la marcha triunfal panista. En 1986, un segmento intelectual viaja desde la Ciudad de México “de ida y vuelta” a Chihuahua. Barrio Terraza le pone el cascabel al gato tras la gubernatura del estado, y el discurso electoral empieza ya a hablar de fraude patriótico para tratar de contener el galope de Los bárbaros del norte. Infructuosamente. En 1988, ya con el chihuahuense Luis H. Álvarez en la presidencia del partido, éste firma la Alianza estratégica con el usurpador Carlos Salinas de Gortari. Fraude patriótico a la inversa. Primera recompensa: En 1989 Salinas de Gortari cede la primera gobernación, la de Baja California, al PAN. A Barrio Terraza le tocará el premio en 1992.


AHIJADOS DEL NAZIFASCISMO


Apogeo y crisis de la derecha en México hace en 1985 un recorrido histórico, así aparezca rudimentario y francamente empírico, de las andanzas de la reacción nativa, escasa de héroes, a no ser Agustín de Iturbide, Antonio López de Santa Anna y Maximiliano, y de doctrina propia -para eso bastaba la monárquica europea, con su posterior viraje hacia el norte republicano, pero igualmente imperialista-, a fin de describir las fuentes tributarias que dieron soporte y aliento a la contra-independencia, a la contra-reforma y a la contra-revolución, y desembocaron en la Cristiada como Alma Mater, primero, de la Unión Nacional Sinarquista, y luego del Partido Acción Nacional. Ambas formaciones cobrarían vida cuando el mundo está invadido por la peste del nazifascismo, en cuyo caso la derecha en México explora en busca nuevos prototipos de “libertadores”.


En el texto comentado, se prefigura el esquema táctico empleado por la contrarrevolución en México y que, particularmente a partir del gobierno de Echeverría, opera con toda su desnudez, hasta volverse moneda corriente en la era tecnoburocrática: El constante amago del golpe de Estado para dar golpes de bolsa. En efecto, ahí se registra la recurrente acusación de la plutocracia al gobierno como proclive al totalitarismo en su modalidad socialista o comunista, mientras bajo cuerda se negocian favores inconfesables y concesiones públicas que a la larga institucionalizaron el saqueo del patrimonio nacional, que devino en lo que ahora se codifica como economía criminal.


Casos concretos, los anteriores, que nombran a quienes, con el petate del muerto, se deshicieron de sus empresas quebradas, muchas de ellas familiares, para enjaretárselas al gobierno, al que inmediatamente denunciarían como pésimo administrador y corrupto. Casos que se citan, ni casual ni gratuitamente, porque en la nómina aparecen aquellos que primero se apoderaron de las estructuras del Partido Acción Nacional, y aún antes de que el PRI fuera echado de Los Pinos en 2000, ya estaban enquistados en las esferas de decisión del sector público, donde cumplieron la labor de zapa que hizo decir a López Portillo que fue el último Presidente de la Revolución Mexicana.


EL HOMBRE “PROVIDENCIAL”


En este momento, para mejor entendimiento, conviene precisar que la mudanza doctrinaria y programática del PAN, desde la brega de eternidad de los padres fundadores hasta la década de los ochenta, no es un punto, sino un proceso de inflexión que madura a la muerte de sus creadores. En este proceso, que culminó al tiempo con la separación de los integrantes del Foro Democrático y Doctrinario, una figura señera y altamente disolvente, es la El Maquío. Descendiente de familia terrateniente (que amplió su poderío económico en los sectores comercial, bancario y financiero), aliada en Sinaloa al sostenimiento de la jefatura política -agente de la dictadura porfirista en la entidad-, Clouthier del Rincón fue forjado en la dureza de la disciplina de la academia militarizada y del futbol americanos. Pasa, no precisamente inadvertido, por el Instituto Tecnológico de Monterrey, brazo académico del otrora imbatible Grupo Monterrey, nostro grupo, según llegaron a identificarlo sus detractores en alusión a la mafia italiana.







Varón de alcurnia ya, Clouthier del Rincón responde a su vocación empresarial -que herencia no le falta- y a su formación religiosa que lo encamina al Movimiento Familiar Cristiano. Tres episodios, entre otros, parecen marcar su desarrollo público. Dedicado a los negocios privados y a cierta forma de altruismo, en los que potencia su naturaleza de líder, 1) hacia principios de los setenta, es implicado en sospechas de narcotráfico por el hallazgo de droga en una de las bodegas de El Palmito, Culiacán, de su propiedad, a la que después él mismo se refería a modo de broma como La bodega de la mariguana; 2) aunque no es militante partidista, pretende la alcaldía de Culiacán, nominado por el PRI, sin éxito, y 3) dueño del latifundio Paralelo 38, es empujado a la su defensa frente a la amenaza de afectación. Este es un hecho clave en su posterior activismo: En 1975, preliminares de la sucesión presidencial, Echeverría emite el decreto de expropiación de los latifundios de los valles de El Yaqui y El Mayo, Sonora, que pone en pie de guerra a los terratenientes del noroeste, dispuestos incluso a tomar las armas. La acción siguiente se anuncia para Sinaloa. Clouthier del Rincón se erige en caudillo. El expediente habla de que, en su predio, el Ejército descubrió e incautó un arsenal, “para lo que pudiera ofrecerse”, compuesto por R-15s. La expropiación agraria en Sinaloa se suspende.


Clouthier del Rincón dejó de ser “El Maquío de Culiacán”. Su nombre aparece ya en las primeras planas de la prensa escrita de la ciudad de México y algunos medios internacionales: A paso incontenible recorre los liderazgos nacionales de los horticultores, de la Coparmex y del CCE. En su despacho exhibe, gratificado, una fotografía con López Portillo, dedicada amistosamente por éste. Es el hombre aceptado para conducir la campaña México en la libertad, de resistencia contra la expropiación bancaria. Es incesantemente solicitado por las corporaciones empresariales de los Estados Unidos. Es cuando, en 1983, viaja a Salt Lake City. Un año después, el PAN ya tiene gafetes de invitado a la convención del Partido Republicano, en Texas, en que se lanza a Reagan a un segundo mandato.


LA AMENAZA DE LAS ARMAS


La suerte está echada: El proyecto inmediato es la disputa por la gobernación de Sinaloa. La constancia de mayoría es para el priista Francisco Labastida Ochoa. Movilizaciones multitudinarias con escala en las oficinas consulares de los Estados Unidos en Sinaloa. Personalmente da el imprimatur de Cruzada por la Salvación de México, donde cuenta esa historia, y en cuya carátula aparece la desgarbada figura de Don Quijote, aunque en el texto hace apología al rey David: “Estoy convencido de que para emprender este tipo de acciones, jamás deber ser cien por ciento racional, porque si David lo hubiese pensado mucho, no se hubiera enfrentado a Goliath…”. Es la carta de presentación que le abre el acceso a la candidatura presidencial del PAN en 1988, con el refuerzo de Poder Ciudadano, operado desde la Confederación Patronal de la República Mexicana. Luego la traición panista.


En ese tortuoso recorrido, el PAN abandonó su espíritu fundacional para convertirse en membrete de uso, costo de la tentación de Mefistófeles. No hay más “principios de doctrina”. La exclamación intimidatoria, de la que se apropian Los bárbaros del norte, retumba en todo el territorio nacional con acento clouthierano: (Si tal es el candidato presidencial del PRI), pues de plano tomamos las armas; nuestra situación no se arregla más que con las armas; mi objetivo será desestabilizar este gobierno: Tengamos confianza, pronto habremos de trazar un plan nacional para derrocar al actual régimen corrupto y opresor, aún no hemos empezado a pelear; no puedo garantizar a nadie que no habrá violencia en las elecciones presidenciales…”. Traicionado, Manuel de Jesús Clouthier del Rincón acabó sus días en misterioso “carreterazo” la primera semana de octubre de 1989. El rayo se apagó, pero el trueno, a escala de escasos decibeles, quiso hacerse eco en Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón. Aquél, con sus célebres amigos, entre los que debe contar a Ernesto Zedillo y José Woldenberg; éste, con el eficaz algoritmo y la concupiscencia de consejeros y magistrados electorales que fabricaron al presidente designado.


YA NI LLORAR ES BUENO


Ahora, que no queda jugo para una lágrima -ni siquiera furtiva-, la Patria sucumbe bajo la peste de la miseria material y la lepra espiritual; la política, en viejas palabras de don Manuel Gómez Morín, fundador del PAN, es suplantada por la escatología; la sociedad se ahoga en un océano de sangre y, su potencial motor de regeneración, la juventud, está encarnada en la generación nini. ¿Es cierto o no que el triunfo de la reacción es moralmente imposible? Que quede de tarea para los “buenos mexicanos”. Mientras tanto, las bocas de ganso reeditan la historia nacional y su héroe epónimo, el usurpador, es exaltado dulcemente por su discreción. ¿De a cómo no? Sólo falta que en la segunda edición, corregida y pervertida, sea El patriota. ¿Por qué no? La insensata arrogancia de los necios da para eso y más.

Madres que no se festejan

Editorial EL UNIVERSAL

10 de mayo de 2010

2010-05-10


En este día se suele enaltecer el rol de las madres en este país, pero no todo es color de rosa cuando se trata de maternidad en México. El porcentaje de embarazos en menores de 20 años se mantiene en 18% —una de cada seis— desde 1990. Para una adolescente sin recursos económicos propios, ni una relación familiar o de pareja estable, tener un hijo no planeado no necesariamente es una bendición.

Para empezar, los embarazos en adolescentes son contraproducentes por cuestiones de salud. En ellas es mayor el riesgo de trastornos digestivos, abortos espontáneos, anemia, infecciones urinarias, hipertensión arterial gravídica, parto prematuro, entre otros padecimientos. Para el recién nacido se incrementan las posibilidades de ser concebido con bajo peso, mayor incidencia de muerte súbita y son más frecuentes las malformaciones congénitas.


Además, las madres menores de edad sufren estigmatización social, les resulta más difícil continuar con estudios o trabajos y sus hijos padecen las consecuencias de estos obstáculos.


El embarazo de menores de edad tiene relación con la pobreza, la baja escolaridad y el limitado acceso a los servicios de salud. Por ello son más comunes en zonas rurales. Si tomamos en cuenta esos indicadores el número de mujeres adolescentes con hijos tendría que haberse reducido en México en los últimos 20 años con el aumento en la información, la escolaridad y la cobertura de los servicios de salud; sin embargo, no fue así.


De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud 95% de las adolescentes conoce algún método anticonceptivo, pero 9 de cada 10 tuvieron su primera relación sexual sin protección. La demanda insatisfecha de anticonceptivos (mujeres expuestas a un embarazo que no usan esos métodos pese a su deseo de emplearlos) se incrementó de 26% en 1997 a 36% en 2006.


Lo anterior podría deberse a que los gobiernos locales y federal no han hecho lo suficiente en materia de educación sexual, como reconoció en septiembre pasado Patricia Uribe, directora del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva de la Secretaría de Salud.


En respuesta a este problema el gobierno federal aumentó el presupuesto desde 2006 para la compra de anticonceptivos y campañas de prevención, pero ¿será suficiente cuando aún hay gobiernos estatales renuentes a proporcionar información sexual a los alumnos? ¿Se puede con este sistema de salud y de educación? Urge por el bien de las madres en México que son menores, y sus hijos, hallar la respuesta cuanto antes.

Las mentiras de Presidencia para acabar con Luz y Fuerza


Daniel Lizárraga  en Proceso.com



Las verdaderas causas de la extinción de Luz y Fuerza del Centro, que lanzó a la calle a por lo menos 44 mil trabajadores, siguen siendo un misterio debido a la cerrazón del gobierno calderonista, impuesta por motivos de “seguridad nacional”. Aunque el presidente Calderón defendió esa medida con argumentos como la “corrupción” e “ineficiencia” que privaban en la paraestatal, una investigación realizada durante siete meses por Proceso reveló que las dependencias gubernamentales, empezando por la Presidencia, carecen de información que sustente los dichos del mandatario y, por consiguiente, sus acciones de fuerza contra los integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas.



El 11 de octubre de 2009, las televisoras interrumpieron sus programas estelares para transmitir un mensaje del presidente Felipe Calderón: la empresa paraestatal Luz y Fuerza del Centro (LFC) sería liquidada.

Serio, muy serio, de traje negro y con una pequeña bandera mexicana prendida a la solapa, Calderón actuó ante los televidentes para anunciar que esa determinación –la extinción del organismo descentralizado y el despido de 44 mil trabajadores– era inaplazable.

A pesar de que el jefe del Ejecutivo habló de pérdidas, ineficiencias y corrupción en la paraestatal, los expedientes que pudieran sustentar o documentar sus dichos fueron enviados a reserva.

En busca de esa información, Proceso emprendió una investigación que en abril pasado cumplió siete meses y a raíz de la cual el gobierno calderonista reconoció haber elaborado el expediente llamado Luz y Fuerza del Centro; Agosto del 2009 y el titulado Acta de la Primera Sesión Extraordinaria de la Comisión Intersecretarial de Gasto Público, Financiamiento y Desincorporación 2009.

Sin embargo, se determinó que ambos documentos sólo podrían desclasificarse después de 12 años, pues de acuerdo con las secretarías de Hacienda, de Energía y del Trabajo abrirlos antes del año 2021 sería tanto como permitir que los extrabajadores –afiliados al Sindicato Mexicano de Electricistas (SME)– pudieran realizar actos de sabotaje en el suministro de energía.

Al responder a un paquete de solicitudes de acceso a la información planteadas por este semanario, Hacienda sostuvo que los archivos sobre la extinción de LFC fueron reservados porque es un asunto de “seguridad nacional”, ya que los extrabajadores podrían utilizar su contenido para apelar ante los tribunales internacionales, creando con ello un clima de inestabilidad en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Para sostener esa reserva por el plazo máximo que permite la Ley de Transparencia, Hacienda destacó que el SME tiene capacidad para poner de cabeza al país mediante bloqueos en calles y autopistas, aun cuando Luz y Fuerza del Centro abasteció de energía sólo al Distrito Federal, Morelos, Puebla, Hidalgo y el Estado de México.

No obstante, al analizar la respuesta de la Secretaría de Hacienda –por petición de Proceso–, el Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI) redujo a sólo dos años el tiempo de reserva de dichos expedientes, aunque también a su juicio contienen información sensible que “podría poner en riesgo la seguridad nacional”.

Pese a que en su mensaje Calderón utilizó dos veces la palabra “corrupción”, otras dos el término “ineficacia”, y acusó a los trabajadores de tener “prestaciones onerosas”, la investigación de este semanario determinó que en Los Pinos no cuentan con pruebas de actos de corrupción ni con datos concretos sobre las fallas técnicas, ineficiencias y privilegios sindicales que el presidente argumentó.

Más aún, al atender una de las solicitudes de acceso a la información presentadas por Proceso, la Presidencia de la República reconoció no tener registro de averiguaciones previas sobre corrupción que respaldaran el discurso del jefe del Ejecutivo.

La declaratoria oficial de inexistencia de averiguaciones previas sobre corrupción la firmaron la Coordinación de Asesores, la Coordinación de Gabinetes y Proyectos Especiales, la Dirección de Administración, la Oficina de la Presidencia de la República, la Secretaría Particular del Presidente y la Coordinación de Estrategia y Mensaje Gubernamental, encabezada por Alejandra Sota, una de las colaboradoras más cercanas del mandatario.

Otro de los integrantes del gabinete y amigo del presidente, el secretario del Trabajo, Javier Lozano, también se refirió en ruedas de prensa a los desfalcos presentados en LFC, pero también en la Secretaría del Trabajo rechazaron contar con una lista de casos sobre malversación de recursos públicos. En su respuesta oficial, incluso reportaron que buscaron documentos al respecto en la oficina de Lozano, y que nunca los hallaron.

Aun cuando la secretaria de Energía, Georgina Kessel, igualmente comentó a la prensa que en la paraestatal se registraban actos de corrupción, su equipo de trabajo no pudo precisar qué tipo de casos irregulares conocían y endosaron la responsabilidad de atender las solicitudes de información correspondientes a la Procuraduría General de la República (PGR) y a la Secretaría de la Función Pública (SFP).

Respecto de los privilegios sindicales, Kessel respondió que este tipo de casos no los conocieron de cerca y sugirió buscar esa información en el Contrato Colectivo de Trabajo.



Las “ineficiencias”



La Secretaría de Energía (Sener) pretendió documentar las ineficiencias de la empresa en el Informe de reclamaciones presentadas contra Luz y Fuerza del Centro y la Comisión Federal de Electricidad correspondiente al primer semestre del año 2009.

Pero sólo se trata de un documento de 10 páginas donde se exponen quejas de ciudadanos y empresarios por el deficiente suministro de energía o por cobros irregulares de recibos. Señala que de las 49 protestas presentadas en seis meses, el 90% correspondieron a LFC, y 10% a la CFE.

El mayor número de este tipo de quejas contra la LFC se presentaron en abril de 2009, cuando hubo 10 reportes, por cortes en el suministro de energía, por afectaciones a viviendas en obras y por cobros indebidos.

Las 44 quejas contra el servicio que prestó LFC en medio año –el último que estuvo operando– equivalen, en promedio, a siete por mes y a 1.8 por semana, según se desprende del documento referido. Pero no se estableció ningún vínculo entre estas quejas y las auditorías practicadas por la Secretaría de la Función Pública para evaluar el desempeño de los servidores públicos.

En diferentes foros, el presidente Calderón ha dicho que las ineficiencias de LFC –de manera especial los vaivenes en el voltaje– provocaron que muchos empresarios optaran por instalarse en las áreas controladas por la CFE e inclusive fuera del país.

Pero sobre este punto la Presidencia tampoco pudo aportar detalles.

Por separado, la Sener entregó una tabla según la cual en 1994 la paraestatal perdió 16.32% de la energía producida, y en 2009 la pérdida llegó a 32.45%, lo que equivale a unos 24 mil 822 millones 688 mil 700 pesos. Según los cálculos oficiales, estos números exceden los estándares internacionales.

Aunque en su mensaje Calderón habló de actos de corrupción que carcomieron a la empresa, su gobierno no abrió ni un solo expediente por delitos relacionados con malversación de recursos públicos, y en la Secretaría de la Función Pública no tienen registradas investigaciones en torno a redes de corrupción en las que pudieran haber participado funcionarios y trabajadores sindicalizados de la paraestatal.

La indagatoria más reciente, sin concluir, data del 18 de septiembre de 2009, pero de los datos disponibles se desprende que se trata de una acusación contra una persona.

Durante el actual gobierno se han abierto cinco expedientes en la Secretaría de la Función Pública relacionados con presuntas irregularidades en LFC, y únicamente dos personas resultaron sentenciadas por cohecho (recibir dádivas a cambio de hacer algo ilegal): Marco Antonio Morales Castañeda (23 de julio de 2007) y Jorge Ávila Pérez (14 de enero de 2009).

Otras tres investigaciones siguen abiertas, sin que por lo pronto pueda conocerse la identidad de los acusados. No obstante, las pesquisas hasta el momento indican que se trata de personas que no tienen relación entre sí y que no forman parte de redes corruptas.

Si se amplía históricamente la falta de pesquisas y de sentencias condenatorias por desvíos del erario, el saldo es aún más pobre.

Entre 1998 y 2009 –esto es, entre el último gobierno del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y las dos administraciones del Partido Acción Nacional (PAN)–, la Secodam y posterior Secretaría de la Función Pública hicieron nueve investigaciones, de las cuales en sólo tres casos lograron que se castigara por cohecho a Alejandro Carrasco Silva (el 21 de mayo de 1998) y, como ya se mencionó, a Marco Antonio Morales Castañeda (el 23 de julio de 2007) y a Jorge Ávila Pérez (14 de enero de 2009).

En otros expedientes las autoridades no pudieron comprobar actos de corrupción.

El caso más representativo implica a una red de extrabajadores –vinculada a la dirigencia nacional del SME– que presuntamente se dedicaban a extorsionar a empresarios.

En 2003, la Secodam capturó a Mario Garfias –inspector y hermano de uno de los líderes del SME–, Gustavo Vanegas, Jesús Nájera y Enrique Martínez –funcionarios de nivel medio– cuando cobraban un soborno de 45 mil pesos a cambio de no cortar el suministro de energía a la empresa Cepra Servicios, la cual supuestamente tenía un adeudo de 192 mil pesos.

Estos empleados fueron detenidos en los baños de un restaurante Sanborns en la Ciudad de México, justo en el momento en que les entregarían un sobre con parte del dinero. Los implicados terminaron tras las rejas. Pero tiempo después la empresa se echó para atrás en la demanda, el SME se volcó para apoyar a sus compañeros y el gobierno cometió errores en la presentación de los hechos ante un juez, lo que facilitó el hecho de que los aprehendidos quedaran libres mediante un amparo y sólo fueran inhabilitados para volver a ejercer cargos públicos por dos años.

Por separado, la PGR tiene en sus archivos 14 averiguaciones previas sobre presuntas irregularidades cometidas en la historia de LFC. Todas ellas corresponden sólo al gobierno de Calderón, aunque ninguna concluyó antes de la desaparición de la empresa. Hasta el momento siete de esos expedientes permanecen abiertos.

La PGR no informó respecto de las fechas precisas en que iniciaron tales indagatorias, pero pudo determinarse que seis de ellas corresponden a 2009 y una a 2008.

Además, existe otro grupo de averiguaciones (seis en total) que permanecen en la reserva. Esto es, que se quedarán congeladas hasta que existan más pruebas. De estos archivos, uno corresponde al año 2007, dos a 2008 y tres a 2009.



El alud de denuncias



El domingo 11 de octubre de 2009, Calderón tardó 10 minutos con 24 segundos para explicar la extinción de LFC y la liquidación de 44 mil trabajadores.

En los alegatos enviados al IFAI para mantener la reserva de dos archivos especiales, la Secretaría de Hacienda destacó que no era posible soslayar que el número de trabajadores pertenecientes al SME representó para el gobierno ciertos riesgos sociales.

“El conflicto ya ha sido utilizado políticamente por diversos actores y agrupaciones sociales cuya intención pareciera ser no sólo mantenerlo, sino avivarlo”, estimó Hacienda en un informe enviado al comisionado del IFAI, Ángel Trinidad Zaldívar.

Aunque fueron escasas y poco significativas las averiguaciones previas por irregularidades antes de que desapareciera LFC, el gobierno de Calderón sí canalizó numerosas denuncias y abrió investigaciones contra los trabajadores electricistas en cuanto iniciaron las protestas por la extinción de la paraestatal.

Hasta abril pasado, la PGR mantenía abiertas 250 averiguaciones contra líderes y miembros del SME. Además, se redactaron 26 actas circunstanciadas –sobre posibles delitos– y, sobre todo, figuraban ya 19 expedientes en manos de jueces federales.

El desglose de las averiguaciones previas respecto de los presuntos delitos cometidos es el siguiente: 111 por robo, 67 por sabotaje, 11 por amenazas, 7 por ataques a las vías generales de comunicación, 6 por actos contra el consumo y la riqueza nacional, 5 por oponerse a la ejecución de obras, 5 por lesiones y 2 por fraude, además de otras 36 en las que igual número de personas son acusadas de diversos delitos.

Hacienda le dio al SME un trato de grupo extremista con capacidad de poner en riesgo la seguridad nacional por medio de sabotajes. Una de sus pruebas consistió en un resumen de 18 noticias sobre bloqueos en calles, desórdenes, marchas, riñas en mítines y la protesta realizada ante la casa del secretario del Trabajo.

Pero el comportamiento y el perfil de los extrabajadores sindicalizados no se ajustan a las características de un grupo extremista: El SME puso en internet su plan de acción y una cuenta bancaria para allegarse fondos, sus líderes son conocidos y decenas de sus integrantes se hallan expuestos públicamente en huelgas de hambre…