Veintisiete mil los muertos
y la cuenta va en ascenso
por la guerrita que un menso
declaró entre desaciertos
y aviesos fines cubiertos,
pues al narco que es su socio
el FECAL cobra buen precio
y al narco su competencia
lo mata con complacencia
muy feliz desde el palacio.
La guerra va para largo
hay que irse acostumbrando
y tu mortaja apartando
con harto café amargo,
y un testamento de encargo
por si te llega el final
cual “Daño Colateral”,
y un número en estadística
te imponga la casualística
que en listas lleva el FECAL.
Tu nombre a nadie le importa
no harán investigación,
te tirarán al panteón
bajo una tumba incierta
y de epitafio desierta.
Habrá en tu casa los rezos
pidiendo por tu regreso
entre un milagro pedido
y un cirio siempre encendido:
no sabiendo tu deceso.
No hay héroes en esta guerra
sólo victimas caídas,
y que han perdido la vida
porque su suerte fue perra.
No hay lugar pa donde corras
te ha condenado el PRIANismo
a vivir con terrorismo,
y el barón de los dineros
te dejará a ti en los cueros
y el clero en oscurantismo.
El sistema está podrido
por FECAL de coladeras.
Urge un cambio de a de veras
para este estado fallido,
porque si no está perdido
irremisible el futuro.
No creo, sea tan duro
organizar a la raza
para limpiar nuestra casa
de pinche FECAL espurio.
1 comentario:
Valga decir que la fotografía que ilustra este artículo fue tomada en Honduras tras el golpe de estado en contra de Zelaya. La foto es de Eduardo Verdugo/Associated Press.
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