jueves, 12 de noviembre de 2009

.¿Cuñada contra cuñada?



Noviembre 12, 2009 Qué hay detrás del “destape” de Margarita Zavala a la gubernatura michoacana que recién hiciera su cuñada Luisa María Calderón? Quienes tienen acceso a la residencia Los Pinos hablan del cobro de cuentas, de una a la otra. Sólo habría que recordar que “Cocoa”, como se conoce familiarmente a la hermana del Presidente Felipe Calderón, fue prácticamente desterrada del país al inicio del sexenio –se fue a Barcelona--, para que no se inmiscuyera en asuntos públicos, no obstante que ya tenía una carrera política más o menos consolidada que la había llevado hasta a una de esas senadurías plurinominales. En cambio, los hermanos –y sobre todo los primos Gómez del Campo-- de Margarita Zavala sí se quedaron al país y se dedicaron a llenar la hucha y a ocupar cuanto cargo público, asesoría o hasta aviaduría se les atravesaba en el camino. Al cabo de dos años, “Cocoa” regresó al país. Pero no aterrizó en el DF, sino en Morelia, donde está el solar familiar, en donde ocupa un puesto de segunda línea en el invariablemente disminuido comité estatal del blanquiazul. A ese rencor habría que sumar otros más recientes, como el del inusitado protagonismo que la señora Zavala ha desplegado en las últimas semanas –apenas fue a Veracruz, llevando de la oreja al titular de Sedesol del gabinete de su marido--, lo que ha quitado reflectores a don Felipe. “Cocoa” es la encargada de la familia para cobrar cuentas. Pregúntele si no al “Jefe” Diego, contra quien arremetió cuando ambos ocupaban sendos escaños en la Casona de Xicoténcatl… aunque hay quien dice que en este caso fue por razones sentimentales. Ahí está el caso. Analícelo, por favor.

La Huelga General



La Huelga General es un método de lucha histórico del movimiento obrero, uno de los más poderosos. En México, un antecedente de huelga nacional con caracter general se produjo a inicios del siglo XX.
Martín Moreno
Para Kaos en la Red
La Huelga General es un método de lucha histórico del movimiento obrero, uno de los más poderosos. En México, el antecedente de una huelga nacional que pueda recibir el calificativo de general se produjo en las primeras décadas del siglo XX. No hay una tradición de huelgas generales, igual que no la había de consultas. Es el legado de 72 años de control político corporativo del PRI en el gobierno, bajo sus diferentes denominaciones, y su continuidad por la derecha panista.

Desde entonces hemos asistido a diferentes formas de la huelga de masas: luchas parciales, huelgas sectoriales, incluso con carácter semi-general pero la huelga general sigue siendo una asignatura pendiente y se ha perdido de la memoria colectiva del movimiento obrero.

Por tanto, no es de extrañar que muchas cuestiones surjan en torno a la Huelga General: ¿En qué consiste? ¿Por qué es necesaria una huelga general? ¿Por qué decimos que existen las condiciones ahora, y no a futuro como se suele argumentar, para el desarrollo de una huelga general? ¿En qué forma se puede dar una huelga general? ¿Cómo se puede participar en ella? Por supuesto nada más alejado de recetas o formulas. No hay un manual para la huelga general, no se puede pretender que exista. La teoría es gris, el árbol de la vida eternamente verde, proclamaba Goethe. La experiencia histórica del movimiento obrero y la teoría, forjada por el marxismo desde el siglo XIX, que no es otra cosa que la generalización de la experiencia histórica, permiten una aproximación a los elementos centrales de la cuestión.

La Huelga General combinada




La Huelga General es uno de los instrumentos pacíficos más poderosos del movimiento obrero. Nada funciona sin el permiso de la clase trabajadora: no se prende un foco ni se mueve una rueda. La huelga general ataca los beneficios que obtiene la clase dominante, la máxima ganancia, esencia del capitalismo, fruto de la más amplia y profunda explotación por medio de la plusvalía, que es el salario no retribuido al trabajador.

Todo lo que produce el capitalismo: fábricas, fincas agrarias, maquinaria, ferrocarriles, son ruedas de un gran mecanismo que es la sociedad capitalista. Este mecanismo suministra productos, los transforma y distribuye. Todo este mecanismo lo mueven los trabajadores. Sin su concurso, no existiría. Este es el poder real de la clase trabajadora, en esto, junto al hecho de constituir la mayoría de la sociedad, radica su fuerza: son los generadores de la riqueza social.

El proceso en que las condiciones para una huelga general maduran comienza con la indignación y el enojo de los trabajadores y la mayoría de la población contra sus condiciones de vida, su futuro, que ven negado por la clase dominante, a la vez que comparan la pobreza creciente con los lujos asiáticos de los ricos parásitos. Así, la lucha lleva a la necesidad de huelgas más o menos pacificas y cuando el poder dominante se obstina en preservar sus privilegios se pudieran dar enfrentamientos iniciados por la represión y el terror del estado burgués.

Toda huelga infunde confianza a los trabajadores en la idea de que otra sociedad es posible. La idea del auténtico socialismo se abre paso en la conciencia. Durante la huelga, los trabajadores que antes aguantaban en silencio su carga, manifiestan en voz alta sus reivindicaciones, recuerdan los atropellos, proclaman sus derechos, no piensan en si solos (rompiendo las cadenas del individualismo egoísta que proclama el capitalismo) ni en sus reivindicaciones particulares sino que piensan en todos sus compañeros que se arriesgan al entrar en la lucha a sufrir privaciones, despidos, represión, detenciones en ocasiones, y como la historia del mismo PRD demuestra, hasta pagar con su propia vida el precio de luchar por ser libres y por una sociedad liberada de la explotación del hombre por el hombre.

Las huelgas y la huelga general empujan a los obreros a unirse y despiertan la conciencia de que el gobierno es su enemigo, no nada más su patrón particular. Las huelgas son “escuelas de lucha y estrategia" para los trabajadores, verdaderas “escuelas de guerra de clases". Muestran claramente la verdadera naturaleza de las instituciones burguesas, en contra de los intereses de los trabajadores.

Una vez desencadenado el proceso, aun antes de realizarse el paro general, la acción de la huelga nacional no se detiene ni un solo instante. Aporta otras formas organizativas, crea nuevos espacios de organización, se extienden, amplían y generalizan sus objetivos, sus efectos, pero no cesa. La huelga de masas representa el movimiento mismo de los sectores oprimidos y democráticos, la fuerza acumulada con que se manifiesta la lucha.

Una huelga general tendería a arar más el camino, sería un ejemplo para profundizar y extender las huelgas de masas por todo el país a regiones o ciudades enteras, luchas reivindicativas pacíficas o enfrentamientos callejeros debidos a la violencia provocada por el gobierno espurio y sus aparatos represivos. Abriría más luchas y de forma más diversa: huelgas políticas, económicas, de masas y huelgas parciales, huelgas de demostración o combativas, y en este proceso la semilla de las huelgas de masas, incluida la huelga general se sembraría por todo el país y se incorporaría a las tradiciones de lucha del proletariado mexicano. Todas estas formas de lucha se entrecruzarían, se combinarían y desbordarían una sobre la otra, en “cascadas de acción".

Las huelgas han enseñado a la clase obrera en todos los países a luchar contra los gobiernos por los derechos de los trabajadores y de todo el pueblo. Y la ley del movimiento de esas huelgas no reside en la huelga general en sí misma sino en la correlación de fuerzas sociales y políticas en el proceso actual de transformación social. La huelga general solo es una de las formas que adoptaría la lucha transformadora revolucionaria. Una huelga general no constituiría ahorita mismo una huelga general revolucionaria. De nuevo, los restos del naufragio poco honroso del anarquismo y el ultraizquierdismo probablemente gritarán encolerizados a los dioses por haberlos abandonado.

Mientras tanto, indiferente, el viejo topo de la historia sigue su curso. Dicho esto también se debe afirmar que la huelga general no es un fin en si misma. No es un fetiche, la solución “mágica" postulada por los anarquistas y algunos ultraizquierdistas. Es parte del proceso de la lucha de clases.

En nuestro país, una huelga general no se daría en forma “clásica" sino combinada, debido a un factor central: el control charro de la mayoría del sindicalismo, donde a pesar del avance de las tendencias democráticas un 80% sigue en manos oficialistas, lo que constituye un obstáculo objetivo en la situación. Por tanto, no seria un paro nacional en líneas clásicas o como en los países con más tradición de organización independiente y democrática, sino una variante particular: un paro nacional combinado, que se daría conjuntando un paro clásico en las fabricas, centros de trabajo y de estudio simultáneamente a acciones propias del llamado “movimiento ciudadano": cortes de carreteras, tomas de edificios públicos, cercos a las cámaras legislativas, instalaciones de televisoras y radios, cierre de los paso aduanales en la frontera norte, faltas colectivas, mítines y demostraciones en todo el país.

Cuando la huelga general no sólo se declara sino que se produce es que las contradicciones de la situación y las condiciones objetivas han madurado a tal nivel que la han convertido en necesaria, y por tanto inevitable antes o después, como una forma superior de lucha y un nivel superior de organización.

La huelga general no es un hecho subjetivo. No es una decisión fruto de la simple suma de voluntades políticas o la decisión individual de nadie. No es un ejercicio de voluntad política. Ni siquiera es producida por una decisión del factor subjetivo. La decisión, proclamación o propaganda voluntarista de un grupo por importante y grande que fuese, no es suficiente. Es un hecho objetivo. La expresión de un momento determinado del proceso político de la lucha de clases: las masas toman noción de su propia fuerza, necesitan expresar su descontento y enojo; obreros y clase media no ven una salida al final del túnel, existe una debilidad del gobierno, espurio o no, y una división de la clase dominante y sus partidos…..En ocasiones se ven obligados a saltar por encima de sus direcciones tradicionales que constituyen un freno y un obstáculo objetivos, aquellos empedernidos devotos del permanente “ no hay condiciones", “no estamos preparados" que repiten como retahíla penitente.

Son los mismos burócratas sindicales o políticos que si estuvieran 50 mil obreros organizados proclamarían que hasta no organizar a 500 mil no se podría plantear el paro nacional, y si hubiera medio millón que hasta que hubiera cinco millones y así hasta el infinito…y más allá. Sobran las excusas para la cobardía y miopía política, venderse por un plato de lentejas, viajes y prebendas o la traición por mezquinos intereses personales. Todo menos tener confianza en la decisión y capacidad de lucha y el poder revolucionario de la clase trabajadora.

Es pueril el argumento de los que se oponen a la huelga general planteando que no “somos" lo suficientemente fuertes, poco menos que antes el movimiento debe agrupar detrás de si a todos los trabajadores. En la historia del movimiento obrero eso no ha sucedido ni sucederá. Hay obreros atrasados sindical y políticamente, de ideología reaccionaria e incluso hubo en el periodo del fascismo, obreros fascistas. No idealizamos a la clase obrera. Bajo el capitalismo nunca el 100% de la clase trabajadora estará organizada. Si proclamar una huelga dependiera de alcanzar una meta de esa naturaleza, se convertiría en una espera de Penélope.

Ninguna huelga general puede pretender que para realizarse las organizaciones sindicales o políticas deban alcanzar un nivel “ideal" de organización, disciplina y claridad programática, esa espera es criminal cuando la lucha de clases se agudiza de forma objetiva, así como tampoco esperar que surja de la acción espontanea más azarosa. La teoría es la superioridad de la previsión sobre la improvisación. Y la acción es la conjunción de la previsión con la dosis necesaria de improvisación ante el constante flujo de los acontecimientos. Por eso, una huelga general, como una revolución, son una ciencia y también un arte que no se puede pretender aprender en los libros. Es la experiencia la que educa en ese sentido. Y nada la puede sustituir.

Una de las grandes teóricas del marxismo y del movimiento obrero, Rosa Luxemburgo, que algo sabía de huelgas de masas y huelgas generales, sentencia: “(…) En consecuencia, la revolución rusa nos enseña que la huelga de masas no es ni ´fabricada´ ni ´decidida´ o ´propagada´ en un espacio inmaterial y abstracto sino que representa un fenómeno histórico resultante de un cierto momento de una situación social, a partir de una necesidad histórica. El problema no se resuelve sobre especulaciones abstractas sobre la posibilidad o imposibilidad, sobre la utilidad o el riesgo de la huelga de masas, sino través del estudio de los factores y de la situación social que provoca la huelga de masas en la fase actual de la lucha de clases".

La huelga general es la expresión más alta de la unidad de acción real, que es la unidad lograda desde abajo, en las bases, con millones de trabajadores y oprimidos movilizados, no una simple suma de siglas. A su vez, presupone, un alto nivel de organización de cada una de las organizaciones tomadas en lo individual, de claridad por lo menos en el objetivo central, de firme decisión política de dar la lucha y carácter ofensivo de ésta. La huelga general unifica todas las luchas, su desarrollo les da otra dimensión, la política, y otro carácter, el ofensivo.

La existencia de un programa conjunto mínimo y un plan de acción general permiten poder golpear juntos el mismo día a la misma hora con mayor contundencia, aunque en otras cuestiones cada organización camine por separado. La huelga puede estallar por múltiples causas. Puede estallar con más o menos grado de espontaneidad, pero para asegurar su triunfo necesita de organización, disciplina y un frente único, con un objetivo común.

Detrás de la huelga general se esconde la hidra de la revolución. A ésta siempre le teme la clase dominante. Y como la hidra, está constituida por múltiples cabezas, es viva y múltiple en su desarrollo, se combina y se entrecruza la huelga económica con la política. La huelga general puede revestir un carácter económico, político o mezclar ambas cuestiones, evolucionar de las demandas económicas hacia las políticas o en sentido contrario. No existe una muralla china que separe lo económico de lo político.

Huelga general nacional




La huelga general es el punto de máxima extensión y coordinación de la huelga de masas. No es una acción aislada, es la condensación, el producto destilado de décadas o sexenios de la lucha de clases. No hay una huelga de masas única y abstracta, sino muchas huelgas parciales y/o locales. En ese sentido, el plantón es una forma que adoptó la huelga de masas. La huelga general es una. De ahí, en parte, su carácter y su título de general. Y como puede ser también local o parcial, de ahí que hablemos de una huelga general nacional. ¿Por qué decimos que este tipo de huelga de masas es general y nacional, a la vez? Es general porque pretende sumar a la lucha, al paro y la acción a todos los sectores y ramas de la producción, organizados sindical y políticamente o no, al movimiento estudiantil y al movimiento urbano popular, campesino….Y es nacional porque supera los limites estrechos de la atomización y dispersión de las fuerzas, de las huelgas locales, estatales o los movimientos regionales por reivindicaciones muy puntuales, como la lucha contra la privatización del agua en Coahuila, o contra el cierre de la minera San Xavier, en San Luis Potosí, por ejemplo. Es una huelga general nacional porque abarca a todos los sectores de la producción y de la población oprimida en todo el país, e incluso en los Estados Unidos, por solidaridad directa de los paisanos.

La huelga general en las actuales circunstancias significaría el corolario de los últimos 4 años de lucha y resistencia del movimiento, el salto de la defensiva a la ofensiva. La consulta ha representado, en este sentido, la antesala de ese salto cualitativo en la acción y la organización de las masas enojadas.
Las condiciones insufribles de los precios de los bienes básicos y los energéticos, de los salarios bajísimos, de la subida de impuestos, del aumento de la inflación general, de la falta de respeto al voto con fraudes, de la represión más generalizada, de la violencia descontrolada son las razones que fundamentan una huelga general tanto contra la política social del gobierno usurpador como contra su política económica hambreadora.

No se trata de una suma de huelgas generales parciales, con el argumento no demostrado de la falta de condiciones para una acción de mayor envergadura, sino de una sola huelga general nacional, con efectos históricos en el proceso de avance de la toma de conciencia de las masas.

Doble poder




Toda huelga general plantea la cuestión del doble poder, pone sobre la mesa la cuestión de ¿quién manda? La pregunta que flota en el ambiente es: ¿quién tiene el poder real, ellos que son una minoría de ricos y oligarcas o nosotros que somos la mayoría explotada? ¿El estado burgués o las masas oprimidas organizadas? Pero no toda huelga general presupone la toma del poder, aunque sí cree poder alterno, sólo se da cuando la huelga general toma la característica de una huelga general insurreccional victoriosa. La huelga general exitosa siempre plantea la cuestión del doble poder de forma inmediata. Incluso una huelga general fracasada, de la que siempre se aprende, a veces más que de las victorias, la anticipa a futuro. Para la burguesía siempre esta latente el peligro de que el siguiente movimiento pueda ser exitoso, y siempre, cuando las condiciones terminan madurando, lo es.

El proceso de la huelga general hace aflorar a la superficie un inmenso trabajo preparatorio previo. No la provoca la decisión de un grupo por muy fuerte que sea, ni es una decisión tomada unos cuantos días antes de que estalle o se desarrolle, sino un trabajo intensivo y extendido en el tiempo, años e incluso décadas. Las masas toman conciencia de su propia fuerza, pasan de ser clase en si a clase para si, se ponen en movimiento, pasan a la acción, arrastran a los dubitativos y apáticos de la clase trabajadora y de la clase media, que en épocas de “paz" permanece inerte. Y muestra todo el poder organizativo y toda la capacidad creativa y la inventiva de las masas en acción.

La organización de una huelga general, en sí, organiza y crea el poder popular desde abajo. Una huelga general da confianza a las masas en sus propias fuerzas, eleva el nivel de organización, de coordinación, lleva a la praxis la cuestión de la unidad, plantea el carácter clasista o interclasista de esa unidad ( la cuestión de Frente Único Obrero o Frente Popular interclases) Representa un paso más allá de la teoría, los libros, foros y debates hacia la acción decidida y a su vez, extiende la organización, y donde no hay organización permanente y democrática de masas, la crea por empuje de las masas desde abajo (más comités de lucha, más círculos ciudadanos) Y los crea con una amplia diversidad, multiplica los foros y convierte su carácter deliberativo-formativo en centros de discusión para la acción.

La huelga general expresa y presupone un cierto nivel de organización de los trabajadores y un fondo de resistencia o caja de lucha importante. La burguesía siempre intentará desgastar el movimiento y la huelga dejando que pase el tiempo y quincenas sin pagar los salarios caídos a los trabajadores. No se trata solo de la huelga de unas horas, o un día sino de un proceso que puede requerir de una huelga de 24 horas, nuevas movilizaciones, una huelga posterior a las pocas semanas de 48 horas, y si no se logra el objetivo, profundizarla con una huelga de 72 horas, después de ésta ya sólo queda la huelga general indefinida, que es una huelga política, insurreccional. Es el punto máximo que alcanza la organización del movimiento y la cuestión del doble poder. No puede permanecer sin romperse el equilibrio a favor de una de las clases. Es un combate directo entre las clases, la guerra de clases en su desenlace más inmediato.

La huelga general pone en peligro a un gobierno o a un sistema social dependiendo de la amplitud del movimiento, de sus objetivos y de la existencia de una dirección firme y decidida. Hasta nuestros días, como Trotsky subrayaba, la crisis histórica de la humanidad se reduce a la crisis de la dirección del proletariado.

La huelga general no puede ser vista como una panacea, como el remedio inmediato y milagroso propio de merolicos que un día maravilloso, cuando todos los obreros se pongan de acuerdo en manifestarse y tomar acción acabará con la tiranía e instaurará el socialismo y junto a él la democracia obrera. No se puede conseguir todo de forma automática, aunque se trate de una huelga general. Las huelgas son uno de los métodos de lucha de la clase trabajadora pero no es el único.

La huelga general, en si misma, no presupone la revolución. Una huelga general de 24 horas, no va a derribar por este solo hecho al gobierno usurpador de Calderón. Lo que va a lograr es un fortalecimiento del nivel de organización y un aumento de la confianza de las masas en su propia fuerza. La combinación y multiplicación de formas de lucha realizadas con decisión firme y audacia si posibilitaría derribar al gobierno espurio.

En nuestro país, la rutina de los debates ya finalizados, el ronroneo parlamentario, no adormeció la acción directa de las masas. La consulta ha representado una nueva ofensiva y una nueva victoria con más del 80% de votos por el NO a la privatización de PEMEX y el petróleo, con más de un millón y medio de votantes sumados los resultados del DF y de los estados del país donde se ha realizado, lo que constituye un éxito claro.

La conciencia de las masas


La huelga general no sustituye la tarea de ganar la conciencia de las masas, el trabajo de masas y entre las masas. Sin ese trabajo previo una huelga general no puede darse de forma exitosa, y una vez dada, sin ese trabajo posterior a un nivel superior, el carácter, la calidad de esa huelga no permitiría su extensión. A su vez, la huelga general juega un papel en el afianzamiento y desarrollo de las tradiciones de lucha obrera: trabajo colectivo, decisiones conjuntas, planeación, coordinación, puntualidad, síntesis y claridad en las metas.

La huelga general no siempre es una decisión programada y planeada al milímetro. Muchas veces el “azar", o en relación dialéctica la forma en que se reviste la necesidad, como una lucha local, parcial, electoral incluso, extiende la chispa y provoca el estallido de una o varias huelgas generales. Una revolución social no es un acto de un día. Una huelga general, tampoco. Es un proceso de transformación cualitativa de la conciencia y cuantitativa de la organización, donde se produce una mayor acumulación de fuerzas.

El carácter de la huelga general no solo es defensivo (defensa de Luz y Fuerza del Centro, del Sindicato Mexicano de Electricistas, PEMEX, del petróleo y la soberanía, ante las contrarreformas del ISSSTE, contra la represión, como rezaba la vieja consigna de “ante la represión, movilización" puesta al día en el eslogan “ante la represión, huelga general") sino incorpora un movimiento ofensivo con un claro elemento político ¡Derribo de Calderón y su títere gobierno espurio! que tiene un carácter de ofensiva aunque todavía no se trate de una huelga general insurreccional. No es caída ni renuncia, que supondría un acto voluntario de su parte. No somos ingenuos. Es necesario que sea derribado pues fue puesto ahí por el imperialismo como el administrador de su finca mexicana. El imperialismo que puso a Calderón en su puesto de gestor por medio del fraude, la “guerra electoral", como a Karzai en Afganistán, o en Irak a su hombre de paja, no permitiría su renuncia de motu propio.

¿Cómo podemos participar en un paro nacional?




Otra pregunta asalta la mente ante el carácter novedoso de una huelga general. ¿Cómo podemos participa en un paro nacional? Desde el principio se han utilizado como sinónimos ambos términos, huelga general o paro nacional, como indistintamente son conocidos por el movimiento.

El movimiento obrero organizado participa a través de sus organismos, convocando asambleas en sus centros de trabajo para votar la huelga, que no sea una decisión del Comité Ejecutivo o de alguna cúpula sino una decisión de abajo, democrática. Conformando brigadas de acción, para extender la huelga a centros de trabajo donde hubiera más dificultades por represión patronal u otro motivo y para ir a colonias populares, a otras fábricas o centros de trabajo a hacer propaganda, volanteando en la puerta, a la salida de los turnos, en el transporte público, metro, plazas, tianguis…. colocando mantas informativas, proyectando cine debates sobre películas que reflejen huelgas internacionales o nacionales históricas, interviniendo como oradores donde sean invitados. Y una vez se produjera la huelga general volver a efectuar las asambleas para hacer un balance de la misma, tanto aciertos y errores, fortalezas y debilidades, preparando los siguientes pasos del plan de acción decretado
democráticamente por el movimiento.

Lo mismo sucedería con los estudiantes organizados en sus Comités de Lucha. Pero quien no pueda participar en el paro en un centro de trabajo o estudio, tiene su ámbito territorial, la colonia, la delegación y la ciudad. Formando colonia a colonia Comités de Lucha Popular, como las organizaciones crean sus Comités de Movilizaciones, para formar brigadas que volanteen en el barrio, investiguen y ubiquen los lugares estratégicos para parar, cortar, tomar, o formar cercos (carreteras, calles y avenidas importantes, estaciones de metro, oficinas gubernamentales, en el norte del país aduanas y pasos fronterizos, refinerías, y oficinas de PEMEX, puertos… ) además de producir propaganda en forma de volantes, carteles, botones, calcomanías, CD’s….y hagan simulacros de tomas para llegado el día de la Huelga General sepan qué hacer, con quién formar su brigada y adónde dirigirse para llevar adelante una acción precisa. Además de realizar asambleas por colonia y delegación y aprobar por votación democrática la huelga general y el plan de acción que se proponga. También dando información a la prensa, boletines para romper el cerco informativo. Elaborar y pegar murales, vocear en las colonias con carros con megafonos. Todas las colonias convertidas en altavoces de la huelga.

En Ecuador, el movimiento democrático empezó organizándose por calles, sacando a la calle sus bancos y cortando las carreteras, de ahí se realizaron acciones más amplias en los barrios, cortes de avenidas principales, cercos a instituciones bancarias y dependencias oficiales, hasta rodear el parlamento y tomar Quito. Eso significó el derribo de varios gobiernos antipopulares.

La huelga general ya no puede ser en las actuales circunstancias una simple huelga económica de carácter nacional. El despertar de la conciencia de clase, de estar oprimidos, de millones se manifiesta de inmediato cuando millones descubren el carácter insoportable de su existencia social y económica. El movimiento siempre requerirá de un alto grado de educación política, de conciencia de clase y de organización para acometer la tarea de derribar un sistema social caduco y podrido, descompuesto, como es el capitalismo pero el factor central en la ecuación sigue siendo la decisión de luchar con coraje de las masas y las acciones audaces y firmen que se emprendan. La buena voluntad, sin acción, no sirve.

El aparente caos y desorganización, del que nos quejamos amargamente tan a menudo, esconde, si lo vemos con más cuidado y detenimiento, un incesante proceso de organización que no se ha detenido.

Muchas veces los avances en organización, los saltos importantes, se desarrollan a raíz de una huelga de masas y no de la huelga general como producto totalmente terminado de organizaciones amplias, estables y sólidas.
Los trabajadores se sienten impotentes cuando están desorganizados, desunidos y sólo pueden oponer resistencia si están unidos y se declaran en huelga o amenazan con la huelga. Las huelgas, y en mayor medida la huelga general, significa el comienzo de la lucha contra la estructura capitalista de la sociedad, una de cuyas mayores expresiones es la ley del máximo beneficio, o sea, máximo saqueo, como la pretendida privatización de PEMEX.

El triunfo de la huelga general




¿Cuándo triunfa una huelga general? Cuando el terreno está abonado, cuando las circunstancias impulsan irresistiblemente a la lucha. La burguesía ha estirado demasiado la liga: hambre, pobreza, crisis alimentaria, desempleo, pérdida de poder adquisitivo, represión, violencia generalizada, privatizaciones, guerras en varias partes del mundo…..

Un peligro al que se enfrentaría una huelga general es que estuviera alimentada solo por un sentimiento de transformación social instintivo pero careciera de una teoría y una táctica de lucha revolucionaria.

Para lograr este fin es necesaria la acción conjunta de sindicatos democráticos y partidos de la clase trabajadora. ¿Debe darse la “independencia" entre partido y sindicatos en el contexto de preparar la huelga general? Es claro que los sindicatos deben tener una política independiente pero del gobierno, de la burguesía y sus partidos PRI y PAN pero una total dependencia del movimiento obrero y popular, que debe poder exigir la revocabilidad de sus representantes que no cumplen con el mandato y la línea política dada por las bases. La consulta sobre el tema de la contrarreforma petrolera también es un mandato para todos ellos. Al calor de los acontecimientos la Historia ha demostrado muchas veces como se forjan tendencias revolucionarias al interior de los partidos de izquierda y de los sindicatos democráticos. México no será la excepción a esta regla histórica. Por tanto no se puede afirmar a día de hoy que el PRD o un sindicato determinado esté muerto de antemano para la causa obrera. Una situación pre revolucionaria o revolucionaria transforma todo el ambiente y todas las organizaciones, sacudidas por cambios bruscos y repentinos que ponen sus jefes en un dilema: adaptarse al movimiento de masas crecientemente radicalizado o morir políticamente y ser rebasados. No es otro el dilema que la historia pone sobre la mesa.

La huelga general victoriosa también contendría un germen de crisis, debilitaría y aislaría el ala de derechas del PRD. El control del aparato del PRD por el sector de derechas, los chuchistas de Nueva Izquierda, no es más que precisamente eso, el control del aparato, no de las bases, y mucho menos significa el control de su iniciativa y acciones transformadoras.

También una huelga general triunfante seria un nuevo revulsivo que acrecentaría las crisis de las direcciones charras del movimiento. Por mucho que la CROC y la CROM han vuelto al redil del Congreso del Trabajo (CT), que es un cadáver pestilente. Si han vuelto es por su debilidad. El CT es un cementerio de elefantes, un cascarón vacio. El sindicalismo independiente y democrático no cuenta detrás de si tan solo con sus propias y todavía limitadas fuerzas por el hecho de agrupar a sólo un 20% del total del sindicalismo, para lanzar un paro nacional, sino con el apoyo de millones de no organizados y otras capas oprimidas, estudiantes que en 90 % no son admitidos, amas de casa flageladas por la carestía de la vida y la escalada de precios, desempleados, etc.

La victoria en la defensa del petróleo no representaría sólo, como afirma el Dr. Jalife Rahme, “la segunda independencia de México" sino la segunda revolución económica del país, tras la instaurada por la Revolución de 1910, e impulsada en 1938 con la expropiación petrolera del General Lázaro Cárdenas.

¿Y después qué?




Una primera huelga general plantea también la pregunta de ¿y después qué? Si una huelga general no se continua hasta lograr una victoria, además de que sólo serviría para quitarle vapor a la olla como a veces pretenden intencionalmente los asustados dirigentes reformistas y burocráticos (una forma “hábil" de desmovilizar movilizando previamente) podrían caer capas del movimiento en un estado de decaimiento, una forma de pasividad, lo que allanaría el camino a la reacción para el contraataque y la represión, sembrando la confusión en las filas del movimiento democrático.

La huelga general es posible porque es necesaria. Y lo es tanto por razones objetivas como subjetivas. La primera razón es que nunca antes en la historia de México se ha levantado un movimiento masivo de millones antes del enfrentamiento abierto entre las clases. Ni en 1910 ni en 1968 sucedió esto. Un movimiento que ya ha estirado el músculo con las dos marchas políticas más grandes de la historia del país, encabezadas por AMLO, una con 1, 5 millones y la otra con 3 millones marchando. Es un proceso que se da en la misma secuencia de hechos desde el desafuero, el plantón, el fraude electoral de 2006 y el movimiento nacional contra la privatización del petróleo. La lucha del movimiento es constante desde 2005. Son ya tres años ininterrumpidos de luchas, marchas, mítines, creación de organizaciones permanentes o semipermanentes como los círculos de estudios y las redes ciudadanas, la CND, en suma, una enorme y magnifica escuela de formación política, de táctica y de estrategia de izquierda.

También es la primera vez en la historia que un movimiento transformador de masas nace o inicia en el DF, y de forma tan amplia, cuya base se demostró fértil, sentada en 1997 con la victoria histórica por primera vez de la izquierda en la jefatura del gobierno del DF. Es un movimiento que desde el DF se ha extendido a todo el país.

Unidad Popular




Como hasta ahora ha sucedido, los dirigentes del movimiento democrático deben seguir siendo sensibles a las iniciativas de las masas, que se orientan decididamente a la unidad popular. El siguiente paso es la huelga nacional de 24 horas. La huelga general transformaría las luchas y abriría nuevas perspectivas al movimiento.

El Dialogo Nacional, que agrupa a más de 200 organizaciones en la más amplia unidad de acción hasta ahora lograda por el movimiento democrático, ha proclamado y convocado a un primer ensayo de Huelga General para el día 1 de septiembre cuando inicia el nuevo periodo ordinario en la Cámara de Diputados. Debe servir para dar paso a un nivel superior: un Frente Único Obrero o Alianza Obrera Nacional. El compañero presidente legítimo Andrés Manuel López Obrador, el gobierno legítimo de México y el PRD, comenzando por su ala izquierda liderada por Alejandro Encinas, deben sumarse a la convocatoria de las organizaciones sindicales, políticas y populares agrupadas en el Dialogo Nacional, y llamar también a la Huelga General.

El movimiento democrático sólo puede confiar en si mismo, en su propia fuerza y en su unión, no en “convencer"? al PRI o al PAN, cuyos intereses de clase son muy claros y antagónicos a los nuestros, o a empresarios “nacionales", cuya única diferencia con los extranjeros es que buscan quedarse ellos para si con los beneficios de saquear el petróleo que ellos consideran como IP “patriótica"? que es “suyo". Aunque en los tiempos de la globalización cualquier transnacional burla la legislación, crea una “nueva empresa" 100% mexicana poniéndole la etiqueta “Exxon de México S.A. de C.V." y asunto resuelto para sus intereses y no violarían ninguna ley burguesa. Así que la propuesta privatizadora del PRI es trampa y simulación a partes iguales.

Lo que la Unidad Popular significó para Allende, donde ganando la calle se ganó luego la elección presidencial, debe significar un Frente Único de organizaciones obreras y populares para poner fin a la pesadilla de los gobiernos PRI-PAN en el poder. Y eso significaría la victoria de AMLO y que por primera vez en la historia la izquierda gobernaría a nivel federal. Seria un golpe frontal al imperialismo, que perdería otro punto de control en su “patio trasero". Se pintaría en las paredes y se cantaría en las calles: “A la huelga, a la huelga, a la huelga general"?.

Unión Militar Democrática

El proceso de transformación de la sociedad y una huelga general necesitan de los militares, de los soldados. De ganarlos para la causa de la democracia revolucionaria, del socialismo. ¡Ha sonado la hora de que los militares democráticos proclamen a la luz de la opinión pública nacional e internacional una Unión Militar Democrática, que aireen y extiendan sus manifiestos! Entre otras cuestiones, lo central es que impediría la represión generalizada, el uso del ejército contra los manifestantes o las brigadas de acción en una huelga general.

El gobierno espurio del presidente payaso, Calderón, no sentiría seguro el suelo bajo sus pies. La falsa imagen propagandística de un ejército monolítico al servicio de los ricos se vendría abajo. Un hombre lo vio con claridad y anticipación abriendo una brecha. Cierto es que este hombre valiente se llama General José Francisco Gallardo.

Represión y militarización


La huelga general se enfrenta siempre al peligro de la represión por parte del aparato de estado, sus fuerzas de seguridad, sus grupos paramilitares y guardias blancas. Tanto en una consulta como en una huelga general, a mayor número de votantes o de participantes activos, menor margen de maniobra para la represión, o en otras palabras, más costo político supondría si lo hicieran.

La militarización de zonas completas del país con la excusa de la “guerra al narco" y el Plan Mérida y la represión subsecuente pretende evitar el establecimiento de nuevas aéreas de doble poder popular, como los municipios autónomos o las Juntas de Buen Gobierno que son anticipaciones de ese proceso, y prepararse para reprimir al movimiento social. Porque una huelga general supone organismos de coordinación de la huelga y de unidad de acción más amplios ( embriones de Comités Revolucionarios), más fuertes, más organizados e incluso comités de fabrica, comités de lucha en las escuelas y colonias, o sea, destacamentos organizados del movimiento obrero y popular listos en épocas de paz para brigadear y movilizarse y en “épocas de guerra"? para asumir la legitima autodefensa y hacer valer al pie de la letra el texto del articulo 39 constitucional. Es curioso que en mucha partes del mundo los movimientos opositores luchan contra la Constitución vigente, para derogarla y elaborar una nueva, y en México se lucha por su defensa. La razón es que no en vano la Constitución de México es hija de una Revolución social, y contiene preceptos muy avanzados todavía a día de hoy.

Postulados de la huelga de masas




La historia de la huelga de masas permite extraer algunos postulados básicos: 1) las masas necesitan acciones y huelgas de lucha y no meramente demostrativas, que sean ofensivas y no simplemente defensivas; 2) No hay una separación entre la huelga de masas política y económica. Están ligadas, no separadas. Y no se puede establecer de forma mecánica y gradualista que la huelga política sea el estadio más alto de la huelga económica; 3) Una huelga general en la medida en que forma parte de un proceso y no es una acción aislada, se acabará transformando al poco tiempo en una multitud de huelgas políticas y económicas por todo el país. Cuando la lucha política se extiende, se clarifica y se intensifica, la lucha reivindicativa no solo no desaparece sino que se extiende, organiza e intensifica en paralelo. Hay una interacción entre ambas.4) La huelga de masas es inseparable de la transformación social. Solamente en un periodo que contenga elementos revolucionarios, cada lucha parcial adquiere la dimensión de una explosión general.5) Muchas veces la huelga general crea o desarrolla la organización. No es la huelga general la que produce una revolución social. A la inversa, un ambiente revolucionario se expresa a través de la huelga general.


Las consignas de la huelga general

¿Cuáles serían algunas consignas de una huelga general, extraídas de la síntesis de los movimientos sociales más recientes?:

1.- ¡Abajo el gobierno espurio de Calderón!
2.- ¡No a la privatización de PEMEX ni energéticos! ¡No a la liquidación de Luz y Fuerza del Centro! ¡En defensa del Sindicato Mexicano de Electricistas!¡Fuera el Ejército y la policia de las instalaciones de LyFC!
3.- ¡Ni un solo despido!
4.- ¡Derogación de las contrarreformas a la Ley del ISSSTE!!
5.- ¡Libertad presos políticos!
6.- ¡Contra la carestía de la vida, escala móvil precios-salarios!
7.- ¡Por la IV República, socialista y democrática, Asamblea Constituyente!¡Todo el poder al pueblo!

Federales golpearon y tienen incomunicados a 11 electricistas: Esparza



Reiteró que los agentes provocaron la gresca en salida a Querétaro al dañar autos con golpes de toletes.

La Jornada en línea
Publicado: 12/11/2009 10:49

México, DF. El líder del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza dijo este jueves que las 11 personas detenidas el miércoles en la carretera México-Querétaro fueron incomunicadas y algunas de ellas severamente golpeadas.

En conferencia de prensa, Esparza reiteró que fue la Policía Federal la que originó el enfrentamiento en ese punto pues al pasar el contingente, agentes policiacos comenzaron a golpear con sus toletes los automóviles donde viajaban los electricistas, dejando 20 unidades dañadas.

Sin embargo, consideró que las protestas llevadas a cabo ayer en diferentes entidades del país fueron un éxito y destacó que salvo el caso de Querétaro o Cuernavaca, donde la Policía Federal dispersó las manifestaciones con gases lacrimógenos, todos los actos se realizaron de manera pacífica.

Reiteró, asimismo, que existen condiciones para llevar a cabo la huelga nacional.
Jurisprudencia-Helguera


Apagón involuntario-Rocha


Paro nacional-Ahumada


Perfectamente ubicados-Hernández



Astillero


Tanteos riesgosos
Protesta en ascenso
Felipismo displicente
Peineta michoacana
Julio Hernández López





Cada cual avanzó parcialmente: la protesta exploró terrenos de riesgo y tensó al aparato institucional, mientras el calderonismo consiguió motivos para la represión mediática y judicial y siguió cerrando puertas jurídicas y políticas. Ni una parte creció y se desbordó ni la otra fue arrollada o arrinconada. Pero el conflicto continúa vigente, ahora extendido a las calles y arropado por segmentos solidarios. Para los electricistas y sus acompañantes, la victoria consistió en seguir luchando, de pie y con perspectivas de avance, a través de una movilización importante, pero no apabullante, que pasó de lo gremial a lo social –al exigir un nuevo pacto nacional– y que permite intentar la organización de una huelga masiva. Para el felipismo el triunfo consistió en que la protesta se mantuvo en los linderos permisibles, sin desbordamientos, salvo un confuso incidente de carretera en el que aparecieron las armas de fuego y los disparos, con lo que la administración federal se ha hecho de material para averiguaciones previas y amagos de órdenes de aprehensión contra líderes y personajes que no estuvieron físicamente en el incidente. Aparte del encarcelamiento de los presuntos responsables de ataques a policías que, según los primeros reportes, parecen intencionalmente magnificados, Los Pinos debió autorizar también el uso de gases lacrimógenos contra manifestantes en vías federales.
No podía ser de otra manera para los electricistas laboral y socialmente golpeados. Si lo de ayer hubiera quedado en el expediente clásico (marcha, consignas, amagos, discursos y adiós), el movimiento se iría desinflando. En cambio, se optó por la presión directa y por la realización de actos que tocaron o rebasaron los límites más o menos acostumbrados. Con esas decisiones arriesgadas se ha puesto de manifiesto el grado de irritación que los pésimos actos calderonistas han provocado en un segmento de la sociedad: ha de tomarse en cuenta que, en general, la intensidad de las protestas sociales es proporcional a la debilidad institucional para resolver los problemas planteados. Cuando funcionan las instituciones y la representación política, las protestas suelen ser, en lo general, menores, cuidadosas, y si la protesta social se desborda es porque los encargados de atenderla y solucionarla han fallado.
Calderón, por su parte, se esmeró en parecer despreocupado y seguro. Para mostrar sus querencias, premió al director de la Comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub, y elogió las habilidades de él y su equipo para sostener el servicio en las zonas sustraídas al Sindicato Mexicano de Electricistas en un sabadazo militar. Se permitió la libertad de mencionar que hubo “algunos esfuerzos por interrumpir el servicio”, pero no dio más pistas de lo que en caso de haber sucedido debería llevarle a la apertura de un proceso judicial en forma, para no parecer una treta oratoria más de insidia contra el sindicalismo resistente. Felipe, en la cascarita política, encabezó la inauguración de un nuevo estadio futbolero en Torreón, Coahuila, donde compartió escenario con Ricky Martin y Pelé. Felipe tan tranquilo en el reino de la desigualdad extrema que ha llevado a Carlos Slim a ser considerado el sexto hombre más poderoso del mundo, según la revista Forbes.
Astillas
Ya salió el peine. Bueno, más bien, la peineta. Resulta que la señora Mar(gari)ta podría ser candidata panista a gobernadora de Michoacán, según lo anunció otra integrante de La Familia (Real), Luisa María de Guadalupe Calderón Hinojosa, a quien sus conocidos llaman Cocoa, al enlistar nombres de mujeres que podrían aspirar a ese cargo, entre los que mencionó, además, a Esperanza Morelos, Margarita Chávez, Noelia Linares y Jesús María Dóddoli. La señora Mar(gari)ta no se impulsará mediante alguna Fundación RoVamos México, pues ya lo ha hecho y lo seguirá haciendo a través de la Fundición Guerra contra el Narcotráfico, que en aquella entidad ha desarrollado acciones tan focalizadas y específicas que muchas veces hicieron preguntar cuáles eran las razones no confesas de ese interés de la administración felipilla en destrozar al perredismo estatal y al aparato de gobierno a cargo del blanduzco Leonel Godoy de larga cola por pisar judicialmente. También parecía poco explicable el intenso activismo realizado por la Primera Hermana Michoacana, la citada Cocoa que en septiembre de 2008 fue nombrada secretaria de elecciones del comité estatal panista, con lo que tomó el control virtual de ese órgano, acompañada siempre de forma aparatosa y emblemática por miembros del Estado Mayor Presidencial. Cocoa ha sido diputada local y federal y senadora. Los demás miembros de su Familia también han ocupado puestos y cargos a nombre del panismo, mientras que los Zavala Gómez del Campo combinan los beneficios partidistas en el escenario público con los negocios computacionales y electorales, como en el caso del muy sonado hermano Hildebrando. El más reciente asomo de familiares Gómez del Campo en un asunto de negocios al amparo de la política se dio en Hermosillo, en el caso de las concesiones de guarderías que luego serían escenario de muertes infantiles por las que hasta ahora no se ha castigado a nadie que pertenezca a las elites familiares. Habrá de verse jurídicamente si la señora Mar(gari)ta puede acreditar su domicilio para fines electorales en Michoacán, pues ella no es nativa de esa entidad. La propia Cocoa ha dicho que, conforme se dieran las circunstancias, ella misma, la hermana del ocupante de Los Pinos, podría pelear la candidatura. Todo en Familia... No se confirmó el ingreso a escena del almirante Wilfrido Robledo, uno de los principales responsables de la represión en San Salvador Atenco, quien quedaría al frente de la Policía Federal Ministerial que depende de la PGR. Ayer se confirmó a la actual encargada, Nicandra Castro... Y mientras por dinero presupuestal parece peligrar el amasiato SEP-SNTE, ¡hasta mañana, en esta columna (gramatical y conceptualmente) atropellada!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx

El fusible de la huelga nacional…



A Puerta Cerrada

Marcela Gómez Zalce



• La emoción de la PANdilla
• El acierto de Arturo Chávez

Se combate con gran desventaja, mi estimado, cuando se lucha contra los que no tiene nada que perder. Importante la movilización del SME, que el día de ayer mostró una cara más resuelta, más volátil y de un cierre de filas contra el atropello del (des)gobierno de Felipe Calderón, que desde Gobernación, primero conGómez Mont y después con Gerónimo Gutiérrez, vociferaron, amagaron y convocaron a la legalidad, al estado de derecho (con minúsculas) y a la mesura sindical, cuando los culpables del actual desmadre han sido estos disfuncionales de Felipe & his fudgeheads que, precisamente con su ceguera, sordera, intolerancia, soberbia, ignorancia, impunidad y cerrazón han orillado a este aguerrido sindicato a defender lo que ilegalmente les arrebató el siniestro poder de una firma presidencial y que en la inservible mesa de negociación de Bucareli ha fracasado.
La capital se vuelve el epicentro mundial por la incompetencia o perversidad federal en (no) encontrar salidas al peligroso conflicto que apenas calienta motores y que en despachos sindicales de los Estados Unidos, Canadá y Europa se sigue con interés, mientras el secretario del Trabajo (sucio), Javier Lozano, y demás PANdilla de lacras subestiman arrogantes el poder de ese músculo internacional que denuncia y condena las inéditas acciones arbitrarias para aplastar a sindicatos que no se han subordinado y sometido a los caprichos e intereses del partido en el poder (del no poder).
El ejemplo de los mineros y Napoleón Gómez Urrutia devela la saña y la violación a la cacareada ley del frágil (des)gobierno de Felipe, que para despejar dudas ayer, en el marco de las movilizaciones, entregó un premio a la CFE desafiando la emocionante adversidad social.
Y para ponerle la tóxica cereza del grotesco spin mediático, “manifestantes” del SME atropellaban a policías federales mientras otros les “disparaban”, todo esto, of course, cortesía de la desfigurada (advisor) dependencia de Genaro García Luna para criminalizar al sindicato, que además se les provocó y dispersó con gases lacrimógenos.
La manifestación logró unificar no sólo el agravio social por las políticas económicas del (des)gobierno deFelipe Calderón sino también Martín Esparza hizo un llamado a concretar un nuevo pacto social y establecer un amplio movimiento pacífico para recuperar el poder desde el pueblo a fin de defender sus derechos y restablecer el orden constitucional. Planteando a todas las organizaciones a concretar una huelga nacional,yes?
El nudo marino radica en que la lucha por la extinción del decreto que le dio flit a la LFC continuará mientras Los Pinos apuesta al desgaste de un movimiento que alcanza ya otras dimensiones, sumando a otras entidades que bien podría ser el hilo que se rompa por lo más delgado detonando un conflicto latente… que trasciende fronteras y…
Que tiene y mantiene preocupados a sectores de la cúpula empresarial y de consorcios trasnacionales que advierten de una delicada ingobernabilidad.
Y mientras los manifestantes gritaban consignas contra Felipe, mi estimado, el líder blanquiazul, César Nava, se aventaba a la alberca (sin agua) sugiriendo al gobierno capitalino utilizar la represión mostrando la atractiva veta autoritaria que bien podría pasar del ámbito de la seguridad... al terreno de la contienda social sin sopesar que las continuas y fluidas pláticas y negociaciones entre el SME y las huestes de Marcelo Ebrard lograron evitar el colapso de una capital cuyos ciudadanos, hay que decirlo, tomaron las precauciones necesarias para evitar mayores contratiempos.
La vorágine de la descomposición no tiene retorno. La cruda… realidad alcanza rápidamente el callejón sin salida. Sin rutas para el diálogo, cerrando opciones jurídicas y subestimando la fuerza y el agravio social, el barco de gran calado y su emocionado capitán seguirán enfrentando una temeraria adversidad… de pronóstico muy, pero muy reservado.
Por la mirilla
Uno. Innegable la atinada y muy acertada decisión del procurador Chávez Chávez de incorporar en su equipo a Wilfrido Robledo para poner orden en el sugestivo desorden, y de paso envía una señal por demás interesante, no sólo para lograr los balances y contrapesos en el ámbito del gabinete de (in)seguridad federal, sino por lo que Robledo representa en el interior de nuestras fuerzas armadas. La ingenua pregunta es: ¿entenderá el mensaje el travieso destinatario?
Como dicen los de enfrente. Es pregunta.
gomezalce@aol.com

Un engaño, la contratación en CFE, dicen despedidos que piden empleo

Sólo quieren trabajadores jóvenes y quitarnos nuestro finiquito
Víctor Ballinas

Periódico La Jornada
Jueves 12 de noviembre de 2009, p. 8
La oficina de liquidación para trabajadores de Luz y Fuerza del Centro (LFC) ubicada en la colonia Doctores ayer permaneció casi desierta. La bitácora del personal de vigilancia, donde se registran las personas que acuden a solicitar informes sobre el monto de su finiquito, o a cobrarlo, a las 14 horas tenía inscritos sólo ocho nombres.

A las calles de Doctor Lavista y Doctor Ruiz, donde se ubica una oficina de LFC que funciona como punto de liquidación, ayer acudió Édgar Aguilar, trabajador eventual.

Con una carpeta bajo el brazo, se acercó al vigilante de la empresa GSI que cuidaba la entrada y preguntó: “¿Aquí me pueden dar informes de mi liquidación?” El policía le pidió identificación oficial, credencial de LFC y el último talón de cobro.

Aguilar buscó entre sus papeles, sacó su credencial de Luz y Fuerza y explicó: “yo era trabajador eventual pero desde hace un año estoy fuera de la empresa. Se acabó mi contrato y no me liquidaron. Desde hace un año me traen vuelta y vuelta. Trabajé cuatro años en el área de construcción civil, en remodelaciones”.

Un empleado tomó la credencial de Aguilar y buscó su nombre en las listas. Regresó a los pocos minutos y le dijo: “No existe registro de usted; tiene que ir al centro de reclamaciones ubicado en Coyoacán, cerca de la Cineteca”.

Édgar Aguilar guardó sus papeles y sólo dijo: “Voy a ir para allá, a ver si puedo cobrar algo de lo que me deben”.

En el centro de reclamaciones del Sistema de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) ubicado en la avenida México-Coyoacán había largas filas.

Cuatro trabajadores conversaban cuando llegó otro y comentó: “Fui a Banamex y me dijeron que no estaba mi cheque”.

Sus compañeros le mostraron un recibo: “Es que no es ahí, es en Bancomer, mira”.

“Ahorita vuelvo”, les respondió, y salió de prisa rumbo al banco, porque el cierre estaba próximo: eran las 15:50 horas.

“Ya nos pagaron la semana 41, aún nos deben la 42, pero ya es algo. Venimos a reclamar el pago de horas extra, pero nos dicen que hablemos en enero de 2010, creo que se van de vacaciones”, señalaron los electricistas.

Ernesto, con 20 años de antigüedad, salió cabizbajo de la oficina del SAE. “Fui al banco a cobrar mi pago y me dijeron que mi nombre no está en las listas. Aquí me dicen que espere a ver si sale otra lista. Ya no tenemos dinero”.
Miguel narra: “Trabajé 29 años, 6 meses y un día, pero sólo me reconocen 28 años y 4 meses; quiero suponer que es un error y vengo a reclamar porque me quiero jubilar. Cuando el gobierno desapareció la empresa había compañeros que les faltaba un día y a otros cinco para jubilarse”.

Karina reclama la pensión que le corresponde y “sustitución y tiempo extra que le adeudan desde hace dos años. “Trabajé seis años. Mi salario era de 189 pesos al día, más prestaciones. Mis compañeros me dijeron que ya puedo ir a cobrar al banco la semana 41, sólo que ahorita ya está cerrado: iré mañana.

“También vine a reclamar mi pensión. Mi ex esposo ya cobró su liquidación y yo fui a cobrar la parte que me corresponde, pero me dijeron que no había nada de eso. Tengo dos hijos y en la empresa me pagaban la pensión para mis hijos.”

Germán ya cobró su liquidación; su reclamo es que “no me pagaron aguinaldo, vacaciones ni horas extra. Aquí entra uno como si fuera a una oficialía de partes. Sólo reciben los papeles. Me dijeron regrese el 15 de enero.

“Tenía casi 19 años de trabajo en Luz y Fuerza del Centro. Mi salario era de 10 mil 800 pesos; laboraba en subestaciones, en líneas, en mantenimiento. En la radio y la televisión están diciendo muchas cosas que no son ciertas.

“Aún no están contratando en la Comsión Federal de Electricidad (CFE). Presenté mi solicitud y me dijeron: ‘la contratación es para quienes tienen menos de 15 años de antigüedad y menos de 40 de edad; de preferencia que sean trabajadores operativos’ –los que están en líneas y subestaciones.

“Nada de trabajo. En la CFE nos pasan a unos cubículos donde nos dicen que mejor pongamos un negocio, que ellos nos asesoran. Nos quieren quitar nuestro dinero. Te dan una solicitud y te preguntan: ‘¿Cuánto quieres invertir: 50 por ciento, ciento por ciento o sólo 30 por ciento?’ Es un engaño. Han hecho una campaña contra nosotros”.

Abucheo a Felipe Calderón en Torreón

Edson Arantes do Nascimento dio la patada inaugural en el estadio Territorio Santos ModeloFoto Reuters
Claudia Herrera Beltrán
Enviada
Periódico La Jornada
Jueves 12 de noviembre de 2009, p. a43
Torreón, Coah., 11 de noviembre. En la inauguración del estadio Territorio Santos Modelo se escucharon abucheos y rechiflas cuando el presidente Felipe Calderón fue presentado y en el momento que dirigió su breve mensaje.

El inmueble, con capacidad para 30 mil aficionados, se encontraba a toda su capacidad cuando André Marín, quien actuó como presentador de la ceremonia, anunció la presencia del mandatario federal.

Enseguida aparecieron en dos macropantallas las imágenes de los ocupantes del palco principal: el presidente, el gobernador de Coahuila, el priísta Humberto Moreira; el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, y el presidente del equipo Santos Laguna, Alejandro Irragorri.

En ese momento se dio la primera rechifla lo mismo que algunas mentadas de madre. Después, Marín extendió su invitación: “Señor Presidente, muy buenas noches, le pedimos unas palabras en esta inauguración”.

El abucheo siguió mientras el Presidente declaró la apertura del estadio. “Que sea para la alegría y la unidad de los laguneros y para los éxitos del Santos Laguna y de su gran afición. Enhorabuena y mucho éxito”, dijo imperturbable.

Concluido el mensaje, hubo aplausos y en las macropantallas se vio al mandatario charlando con sus acompañantes mientras Edson Arantes do Nascimento daba la patada inicial y expresaba su deseo de que algún día el Santos de Brasil tengan un estadio como este, en el que se invirtieron 100 millones de dólares.
Previo a la inauguración oficial, cuando apareció en pantalla la imagen del alcalde de Torreón, el panista José Ángel Pérez, también se produjo un abucheo.

El presidente develó una placa junto con Pelé, su esposa, Margarita Zavala, y su hijo Juan Pablo, para después disfrutar de un vistoso espectáculo de juegos artificiales. El jefe del Ejecutivo siguió las acciones del partido entre Santos Laguna y Santos de Brasil y se retiró al concluir el primer tiempo, con lo que terminó su visita en esta entidad.

Vuoso anota el primer gol

Finalmente, el local Santos Laguna derrotó 2-1 al Santos de Brasil.

Al minuto seis, Vicente Matías Vuoso puso en ventaja al cuadro local 1-0, anotando el primer tanto en el nuevo estadio, pero a los 88, Yea igualó para los brasileños y se pensaba entonces que el amistoso terminaría con un caballeroso empate.

Sin embargo, el árbitro Marco Antonio Rodríguez dispuso cinco minutos de compensación y fue entonces cuando a los 93 Carlos Ochoa marcó el tanto de la victoria para los anfitriones.

Multitudinaria marcha aglutina el descontento contra la extinción de Luz y Fuerza del Centro



Multitudinaria marcha aglutina el descontento contra la extinción de Luz y Fuerza del Centro

Existen condiciones para llegar a una huelga nacional: SME
Hubo airadas manifestaciones en contra de Felipe Calderón, Javier Lozano y Alfredo Elías Ayub

Patricia Muñoz, Fabiola Martínez y Alma Muñoz


Periódico La Jornada
Jueves 12 de noviembre de 2009, p. 3
El movimiento social que se ha levantado en contra del decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro (LFC) tiene las condiciones para llegar a la huelga nacional con el apoyo del pueblo, advirtió el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), durante una manifestación multitudinaria que aglutinó el descontento y la “ira” de organizaciones sindicales, sociales y campesinas contra el gobierno de Felipe Calderón y su secretario del Trabajo, Javier Lozano.


En una jornada de protestas que logró interrumpir actividades en dependencias públicas y privadas, como parte del primer paro cívico nacional convocado por el SME, decenas de miles concentrados en el Zócalo votaron a mano alzada por que Lozano sea quien “cobre su liquidación y se largue”. Antes, se le promovería juicio político. También exigieron que el director de la Comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub, también “se largue”.

Marcharon del Ángel de la Independencia al Zócalo, acompañados por numerosos contingentes sindicales, sociales y políticos procedentes de distintos puntos de la ciudad. Los más entusiastas y molestos contra la política gubernamental fueron los estudiantes de distintas universidades.


Martín Esparza, líder del SME, marcó la ruta de la siguiente fase de la resistencia pacífica: “El poder emana del pueblo y si ese poder está afectado, es momento de levantar este movimiento social pacífico”.

Hace un mes, dijo, fueron tomadas por asalto las instalaciones de LFC, “por la noche, como bandidos, como cobardes, y lanzan un decreto. Pensaban que nos iban a aniquilar, pero aquí está la conciencia de más de 100 años que tiene el movimiento del SME”, recordó.


La jornada de ayer se prolongó más de 12 horas, a partir de las 7 de la mañana. Comenzó con un mitin frente a las instalaciones de Luz y Fuerza; después, los sindicalistas protestaron en distintas dependencias y realizaron brigadeos, como preludio de la marcha central. Los trabajadores llegaron a las 14 horas a las inmediaciones del Ángel de la Independencia, donde paulatinamente se agregaban contingentes. Integrantes de los sindicatos de la UNAM, de telefonistas, del ISSSTE, de Tranviarios, el Sutin, así como colectivos de estudiantes de la máxima casa de estudios, de la UAM, del IPN, Chapingo y brigadas del movimiento nacional en defensa de la economía popular, como Flor y Canto. También de la Central Campesina Cardenista, la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas, UPREZ y otras más.


Acompañaron al SME militantes del PT y Convergencia, así como del PRD, especialmente del Distrito Federal. La vanguardia de la marcha llegó al Zócalo alrededor de las 17 horas, mientras la retaguardia avanzaba apenas por la glorieta de Colón. Los últimos contingentes entraron a esa plaza cerca de las 7 de la noche, cuando ya se entonaba el Himno Nacional. El Gobierno del Distrito Federal estimó que participaron 60 mil personas; el SME calculó más de 200 mil.



Los manifestantes avanzaron a paso rápido. En menos de una hora recorrieron el trayecto. A la cabeza de la columna iba Martín Esparza, flanqueado por diputados como Alejandro Encinas, Jaime Cárdenas y Gerardo Fernández Noroña; también Manuel Bartlett, Jesús Martín del Campo, Ricardo Ruiz y Bertha Luján, entre otros. Al paso de los contingentes se comentaba en tono festivo que la APPO logró “cerrar” todas las oficinas de la CFE en Oaxaca, pero también se mostraba preocupación por los cinco electricistas de Tlalnepantla detenidos en la carretera a Querétaro, a quienes, dijeron, “sacaremos con honores”.

La marcha se pintó de rojinegro y en mantas, pancartas y consignas se reflejó el coraje de los trabajadores por su despido. La constante fue un tono duro en contra de la figura presidencial, a quien ridiculizaron con botargas, máscaras y caricaturas. La “rabia”, como los mismos electricistas lo expresaron, fue también contra los secretarios de Gobernación, Fernando Gómez Mont; de Hacienda, Agustín Carstens; de Energía, Georgina Kessel, y especialmente el del Trabajo, Javier Lozano, para quien pidieron juicio político.


En el templete, frente a las oficinas del gobierno capitalino, destacaron dos mensajes de solidaridad: el de los obispos Samuel Ruiz (emérito) y Raúl Vera, quienes señalaron: “Una Iglesia que no está del lado del pueblo que sufre, no es una iglesia cristiana”, y el de los sindicalistas, que en voz de los dirigentes de la Unión Nacional de los Trabajadores advirtió la necesidad de utilizar las herramientas de lucha de los asalariados. La multitud coreó “¡huelga nacional!” También refrendaron su apoyo al SME intelectuales, campesinos y organizaciones estudiantiles.

Los trabajadores dejaron en claro aquí que las fallas en el suministro de energía eléctrica obedecen a la impericia de la CFE y de las empresas privadas que han sido contratadas y no al sabotaje. Aunque convocaron a los ciudadanos a bajar el switch de sus casas de 19:30 a 21:30 horas, el SME no reportó datos sobre este acto simbólico.

Alentaron a no aceptar “la zanahoria” de la liquidación, porque van por la recuperación de su empleo; aseguraron que quienes han recibido su indemnización es por las falsas promesas de esquiroles del SME. Por ello, advirtieron que no irán a un diálogo con el gobierno federal, porque la condición impuesta es “liquídense y luego vemos”.





Esparza destacó que es tiempo de impulsar este movimiento: “Estamos a punto del bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución Mexicana, y habremos de derrotar, como antes, a las trasnacionales, a la dictadura, la tiranía y las violaciones a la Constitución. Es tiempo de que el pueblo se organice”.

Los rumores del hartazgo



ALEJANDRO SALDíVAR
MEXICO, D. F., 11 de noviembre (apro).- Aunque los líderes del movimiento del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) apuestan por la resolución legal del conflicto, algunos trabajadores ya plantean la idea de que la única solución es un levantamiento armado.

En una esquina donde se aglomeran hambrientos los manifestantes, se escuchan los rumores: que van a explotar la presa en Necaxa, Puebla; que están juntando las armas; que los del finiquito son aviadores; que si Esparza le financiaba su campaña a Obrador; que van a seguir protestando. Todos discuten, mientras la salsa verde escurre en un plato.

—¿Se levantarían en armas?— se le pregunta a una cajera jubilada de 65 años.

— Si no aceptan nuestras denuncias vamos a tomarlas para hacer una revolución.

—¿Por qué?

— Los desempleados de la compañía vamos hasta las últimas consecuencias, es una ofensa que me den una liquidación para cobrarla hasta 2010, tengo hijos, nietos, he luchado por un salario digno.

—¿Han tenido reuniones?

—A la media noche, pero no lo ponga, qué van a decir de nosotros.

Los letreros de "Secretaría del desempleo y liquidación social" ya estaban en las rejas de la Secretaría del Trabajo (STPS) cuando un contingente del CCH Sur irrumpió en Periférico, frente a TV Azteca.

—¿Se levantarían en armas?— se le pregunta a una estudiante del CCH.

—El país no esta en condiciones de un levantamiento, pero estaría a favor de la huelga.

"Mejor morir de pie que vivir de rodillas", dice una cartulina que carga uno de sus compañeros.

Según, Pepino Cuevas, uno de los oradores que clausuró "simbólicamente" la STPS, "se seguiran clausurando dependencias federales de una forma más radical" y apuntala: "esta lucha no es de mentiritas, ellos (el gobierno) son los responsables y vamos a tomar sus oficinas".

Un hombre con un cartel como sombrero de papel invita a sus compañeros: "Doy mi liquidación por partirle la madre a Felipe Calderón"; junto a él una manta reza: "Muerto el perro se acaba la rabia".

Entre los insultos de algunos policías federales a bordo de camiones turísticos, los oradores en Periférico están seguros que el movimiento sigue "vivo", que 95 años después de la fundación del sindicato, "no pueden levantar el acta de defunción".

Rumbo al Centro, los trabajadores mantienen su paso firme sobre una lámina de concreto que refleja el atardecer.

—¿Se levantarían en armas?—se le pregunta a Francisco Retana, consejero del SME.

—Es posible, es una situación de vida intolerable y no tiene solución por los cauces institucionales.

—¿Esta seguro?

—Más bien vamos por la "insurrección popular" y prefiero organizar huelgas y este paro va a llegar a la huelga general.

Según la Suprema Corte de Justicia, la extinción es un hecho irremediable; pero no importa, un par de cerdos de cartón con dinero en el hocico, caminan sobre los hombros de dos muchachos que entran a la Plaza.

En avenida 5 de mayo un saxofón canta: "el pueblo unido, jamás será vencido". En la plaza de la Constitución los sindicalistas vacían su consigna en el templete: "luchemos por la huelga general".

PGR inicia averiguación contra 11 trabajadores del SME

RICARDO RAVELO
MEXICO, D. F., 11 de noviembre (apro).- La Procuraduría General de la República (PGR) inició una averiguación previa por el presunto delito de tentativa de homicidio contra 11 trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) que "arrollaron" con un automóvil a cuatro elementos de la Policía Federal en la carretera México-Querétaro, a la altura de la caseta de Tepotzotlán, estado de México.

La averiguación PGR/MEX/TLA-1/1120/2009 quedó radicada en la delegación de la PGR en Tlalnepantla, mientras que los inculpados fueron puestos a disposición del Ministerio Público Federal.

Ellos son: Ismael Espinoza Ramírez, Pablo Gastón Ortiz Paredes, Juan José Vega Dorantes, Víctor Maya Zúñiga, Florencio Martínez Hernández, Carlos Alberto Díaz Chávez, Floriberto Venegas Robles, Juan y José Luis Santos Crisóstomo, Fausto Hernández Riomero, y Felipe Anastacio Valdez Monroy.

El incidente ocurrió en la mañana, horas antes de la marcha al Zócalo en la carretera México Querétaro, luego de que los paristas bloquearon la carretera. Según los trabajadores del SME, a su paso por la caseta de Tepotzotlán, los Policías Federales agredieron las unidades en que se transportaban e incluso refieren que rompieron los medallones de algunas vehículos.

Y según la versión de las autoridades, el conflicto inició cuando los tripulantes de un auto compacto "arrollaron" intencionalmente a los policías federales que se encontraban apostados cerca de la caseta.

Lo único cierto hasta ahora es que ambas partes chocaron y después de varias horas de forcejeo lograron despejar los carriles de esa vía no sin resultar agredidos por la multitud de manifestantes.

Inicialmente, la Secretaría de Seguridad Pública federal informó que cuatro agentes habían sido golpeados por los trabajadores del SME –dos de los cuales presentaban heridas de consideración--, y que por ese motivo habían sido detenidos 10 personas.

El bloqueo de la carretera era parte de las medidas que los miembros del SME programaron para este día, pero terminó en una fuerte confrontación con agentes que, equipados con instrumentos antimotines, trataron de abrir el tránsito en la autopista mediante la fuerza.

De acuerdo con versiones de los propios trabajadores y datos recavados en la Secretaría de Seguridad Pública federal, los policías utilizaron sus escudos y lanzaron gas para dispersar a los manifestantes, quienes envalentonados se resistían a liberar la autopista.

En el momento en que los extrabajadores de Luz y Fuerza del Centro arremetieron contra los agentes, éstos formaron varias vallas y repelieron la agresión. Los miembros del SME dispusieron de cuatro vehículos y trataron de romper las vallas.

Como consecuencia de ello, cuatro policías fueron arrollados, aunque la SSP descarta que hayan sufrido lesiones graves, pues sólo fueron empujados por los vehículos.

Las primeras versiones que se difundieron sobre el choque entre policías y trabajadores electricistas establecían que tan fuerte había sido la arremetida de los policías que se realizaron varios disparos. La SSP había dicho al respecto que ninguno de los disparos logró herir a los policías.

Al filo de las 7:00 de la noche, otra era la posición de la SSP. A través del vocero Juan Carlos Buenrrostro Chaparro, la dependencia negó que durante el forcejeo hayan salido a relucir armas de fuego y disparos.

Y añade: "Los policías no iban armados, sólo llevaban sus escudos, equipo antimotines y disparadores de gases lacrimógenos, lo que se utilizó a fin de dispersar a la multitud para que se despejaran la autopista, pues ya llevaba varias horas bloqueada".

También aclaró que no fueron seis los agentes atropellados, sino sólo cuatro y que no se reportan lesiones graves, sólo ligeros golpes, pues uno de los cuatro vehículos que los electricistas utilizaron para romper la valla policiaca –y que era manejado por un trabajador –fue acelerado bruscamente y alcanzó a golpear a algunos policías.

--¿Entonces no hay lesionados de ninguna de las dos partes?

--Reitero que los agentes sólo tienen ligeros golpes, pero no hay nada de gravedad.

Debido a las agresiones que sufrieron los policías granaderos que acudieron a desalojar los carriles de la autopista, 11 personas del grupo de manifestantes –presuntamente trabajadores electricistas –fueron detenidos y puestos a disposición del Ministerio Público Federal del Estado de México, donde en las próximas horas se definirá su situación jurídica.



Gobernación inculpa a los trabajadores

En entrevista radiofónica, el subsecretario de Gobernación, Jerónimo Gutiérrez, dijo que no existe ninguna razón que justifique actos de violencia o bloqueos que están afectando a los ciudadanos del DF y de otros estados del país.

Al referirse a los incidentes ocurridos en la México-Querétaro, donde presuntos integrantes del Sindicato de Electricistas atropellaron a cuatro agentes federales, y la detención de 11manifestantes que presuntamente realizaron disparos contra los policías, el funcionario dijo que tendrán que responder por los delitos cometidos.

En entrevista radiofónica con Denise Merker, el subsecretario lanzó un llamado a los trabajadores para que se conduzcan en el marco de la legalidad.

Destacó que el gobierno ha sido respetuoso de los derechos de los trabajadores de LyFC.

Fuera de ese incidente, la megamarcha del SME transcurrió son sobresaltos.