domingo, 18 de octubre de 2009

Tumban dedo a ‘mano’ de Fox en San Cristobal...Y se convierte en un saludo al poder.



Sin “V” de victoria . El monumento que se levantó en San Cristóbal tras la victoria de Fox en la Presidencia, ya no tiene un dedo. Dicen los vecinos que la dañaron a propósito.
Dom, 18/10/2009
León, Gto.

El monumento de la ‘V’ de la victoria del ex presidente Vicente Fox, en el rancho San Cristóbal, fue destruido y la mano quedó con una seña obscena.

Desde el domingo pasado, los habitantes del poblado amanecieron con la novedad del acto vandálico. Esta es la tercera vez que es dañada desde que fue colocada después del triunfo del 2 de julio de 2000, en que Fox se encumbró en la Presidencia de la República.

“Aquí hay jóvenes de esos cholos, muy maldosos, yo creo que ellos la destruyeron, es una maldad. Hay unos que andan muy tomados, muy borrachos, dicen que fueron ellos, ya le dijimos al delegado y no hace nada, falta más vigilancia, casi no viene la Policía”, denunció Gonzalo Torres Castro, uno de los vecinos de la comunidad.

La mano es de concreto y está hecha de un armazón metálico, está pintada en color chocolate.

“Cada rato la tumban, una vez dicen que vino un señor con un marro y la destruyó. Está muy mal que hagan eso, no se vale”, dijo María Dolores Martínez.

Desde hace ocho días que fue destruida el monumento del 2 de julio, nadie lo ha reparado. Otras veces, dicen que Fox mandaba a que lo arreglaran, pero hoy nadie lo ha hecho.
David Carrera

La nación y el estado de derecho agredidos




Arnaldo Córdova
Cuando el año pasado se discutieron las reformas que en materia de petróleo quiso imponer el gobierno panista, muchos indicaron que el asunto de la energía debía discutirse en su conjunto, pues, como puede verse ahora, en todas sus ramas (petróleo, gas, electricidad) había intentos claros y confesos de subvertir el orden constitucional en la materia. Ya se estaba haciendo con el gas y con la electricidad. Una riqueza nacional que la Carta Magna ordena que sea explotada, desarrollada y puesta al servicio de las necesidades generales, se estaba convirtiendo por obra del gobierno derechista en objeto del más desvergonzado y cínico saqueo por privados, autorizados y hasta asesorados por los mismos gobernantes.

El golpe del gobierno de Calderón a Luz y Fuerza del Centro y al Sindicato Mexicano de Electricistas viene a poner al descubierto toda la podredumbre y toda la corrupción que envuelven sus acciones en contra de la industria nacional y sus mismas empresas, que el Estado debería promover y proteger para que lleven a cabo los objetivos que les asigna la Constitución. En ese acto del gobierno panista se dan violaciones múltiples a la Carta Magna y a sus leyes y sólo se alegan razones de orden económico y administrativo que son ajenas a la legalidad en todos sus pasos.

Ya en lo que respecta a la conducción de la economía y de la administración pública, el decreto de Calderón, que es un adefesio jurídico desde cualquier punto que se le vea, viola los artículos 27 (ya venía siendo reiteradamente violado desde la época de Salinas), 73, 89 y 90 constitucionales. El golpe contra el sindicato ofrece también violaciones, en primer lugar, a los artículos 123 (protector de las relaciones de trabajo), 14 y 16 de la Carta Magna. Aparte de ello, varias leyes han sido, asimismo, violadas flagrantemente, entre ellas la del Servicio Público de Energía y la Federal del Trabajo.

Iré por partes, porque en una sola entrega sería imposible tratarlo todo. Veamos ahora los artículos constitucionales violados, por lo menos en parte.

Calderón funda su decreto, de hecho, en una sola disposición, la que se contiene en el artículo 16 de la Ley Federal de Entidades Paraestatales, que dicta que cuando un organismo descentralizado deje de cumplir sus fines u objeto o su funcionamiento sea inconveniente, la Secretaría de Hacienda propondrá al Ejecutivo la disolución, liquidación o extinción del mismo. Según su interpretación, él puede organizar y desorganizar cuantos organismos le vengan en gana. Así comienza diciéndolo en su decreto y está equivocado, porque esos organismos se crean por ley del Congreso y él sólo debe ver por su buen funcionamiento.

En el artículo anterior, el 15, se habla de leyes o decretos del Legislativo y del Ejecutivo. El segundo sólo puede expedir reglamentos, no leyes. Y en el artículo 90 constitucional se señala con toda claridad que la administración pública federal será centralizada y paraestatal conforme a la ley orgánica que expida el Congreso, el cual distribuirá los negocios del orden administrativo que estarán a cargo de las secretarías de Estado y definirá las bases para la creación de las entidades paraestatales y la intervención del Ejecutivo en su operación (y en su extinción). La fracción primera del 89, que determina las facultades del Ejecutivo, establece la de “promulgar y ejecutar las leyes que expida el Congreso de la Unión, proveyendo en la esfera administrativa (¡ojo!) a su exacta observancia”.
Hay que tener presente, además, lo que dicta la fracción X del artículo 73 que establece las facultades del Congreso: “Para legislar en toda la República sobre hidrocarburos, minería, sustancias químicas, explosivos, pirotecnia, industria cinematográfica, comercio, juegos con apuestas y sorteos, intermediación y servicios financieros, energía eléctrica y nuclear y para expedir las leyes del trabajo reglamentarias del artículo 123”. El presidente, y él debería saberlo, con los organismos descentralizados y, en particular, con los que se denominan paraestatales, no puede hacer lo que se le antoje sin antes iniciar una ley ante el Congreso que se lo permita. Le pareció que no valía la pena y pisoteó la Constitución y sus leyes.

En su decreto, cita varios artículos constitucionales y legales que viola flagrantemente. En cualquier caso resultaría paradójico, pero no en el suyo. Por supuesto, menciona el artículo cuarto transitorio de la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica (reformado en diciembre de 1989), en el cual se estipula que las compañías concesionadas antes a privados entrarán en disolución y liquidación y el Ejecutivo federal dispondrá la constitución de un organismo descentralizado con personalidad jurídica y patrimonio propios para prestar el servicio. Ese organismo era, desde el periodo de Salinas, Luz y Fuerza del Centro. Claro que fue creado por decreto presidencial, pero con apoyo en una ley. No es verdad que de esa manera, por decreto, un presidente pueda crear o desaparecer organismos.

Para hacerlo, en cualquier caso y visto lo dispuesto por los artículos constitucionales que hemos citado, Calderón debió haber solicitado del Congreso la reforma de ese artículo o de cualquier otro de la mencionada Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica que le permitiera disolver, liquidar o extinguir Luz y Fuerza del Centro. No sé de dónde sacó el senador Beltrones que el decreto está apegado a derecho. O no sabe derecho (cosa que es cierta, de cualquier forma) o nos está ocultando alguna trama inconfesable (algo a lo que también nos tiene muy acostumbrados).

Que los presidentes panistas hayan gobernado este país violando la Constitución y sus leyes no debería extrañarnos. Y menos aún la alcahuetería desvergonzada de los priístas. Estos no le perdonarán al SME haber sido el único sindicato independiente y de verdad combativo que sobrevivió, desde su fundación en 1914, al autoritarismo priísta. Al senador Labastida, que siendo secretario de Energía nunca supo qué hacer con LFC, le parece que la paraestatal era un lastre que debió haber sido liquidada desde mucho antes y, entre los priístas, es el que lleva la voz cantante y está en todo con los panistas. Ahora veremos con qué batea de babas nos salen esos priístas en sus componendas con el PAN.

Todos dan por decidido el asunto. Se equivocan por partida doble: la ciudadanía todavía tiene voz que hacer oír como el pasado jueves por la tarde y, además, hay violaciones a nuestro orden constitucional y jurídico tan burdas y desvergonzadas que no se pueden dejar pasar si queremos vivir en un estado de derecho.

1968-2009: ¿qué ha cambiado? ¿Qué subsiste?

El despertar




José Agustín Ortiz Pinchetti

Por qué no nos vemos en el espejo de 1968? Retrocedamos 41 años y comparemos el movimiento estudiantil-popular de entonces con el liderado por el SME en 2009. Empecemos por las semejanzas.

1) Los dos movimientos son respuestas a golpes del Ejecutivo autoritarios, ilegales, inconstitucionales, con cobertura legaloide.

2) Los medios electrónicos imponen una visión única, cierran los espacios a la crítica, calumnian o difaman a los disidentes, ocultan sus argumentos y defienden la provocación del gobierno como patriótica.

3) La oligarquía aplaude la medida. Es probable que en 2009, harta por la ineptitud y falta de liderazgo de Felipe Calderón, le haya exigido acciones contundentes”.

4) La Iglesia (cuya alta jerarquía pertenece a la oligarquía) adopta una posición tibia e hipócrita.



Diferencias:
1) La demanda del movimiento del 68 era liberal, exigía respeto a los derechos políticos. Hoy el reclamo de fondo es la justicia social. En 68 la clase obrera se replegó. Hoy está a la vanguardia. Muchos sindicatos independientes y varios oficialistas, organizaciones priístas estuvieron presentes en la manifestación del jueves 15. Los universitarios van a engrosar el movimiento, pero no llevarán la iniciativa.

2) En 68 el instrumento de protesta fueron las manifestaciones. Ahora el SME hará un amplio trabajo en la base, cuenta con 25 mil activistas que recorrerán el país. Encontrarán campo fértil para la protesta. La dura recesión económica contrasta con el crecimiento que vivíamos en el 68.

3) El cerco mediático de hoy tiene muchas fisuras. La población irá conociendo poco a poco la versión de los disidentes. Hoy sólo la mitad aprueba el golpe.

4) La izquierda carecía entonces de un eje, era un conjunto de grupos y grupúsculos universitarios; hoy se está reconstruyendo el Frente Amplio Progresista. La ideología predominante no es ya marxista leninista, sino una versión moderada y reformista.

5) El movimiento de AMLO va a colaborar en las tareas de difusión y consolidación de los trabajadores electricistas. Recibirá un oportuno estímulo. En el 68 la izquierda no podía soñar en ganar la Presidencia. Hoy tiene una fuerte expectativa para 2012.

6) El movimiento obrero cuenta con la simpatía del Gobierno del Distrito Federal, controlado entonces por el Ejecutivo. En aquel entonces se focalizó en la capital. Hoy empieza a extenderse a varios estados. Entonces quedó aislado. Hoy puede contar con la solidaridad internacional. En resumen: la sociedad mexicana es mucho más compleja, diversa, plural, bien informada e inconforme; en una palabra, moderna. El gobierno sigue aferrado a un autoritarismo arcaico.



jaorpin@yahoo.com.mx

Usar el Ejército multiplicó el narcotráfico, dice Vicente Fox

El ex presidente Vicente Fox dijo que el Ejército debe abandonar la lucha contra el narcotráfico y volver a ceder esa responsabilidad de forma paulatina a la policía.

“Creo que debe de empezarse a caminar en la dirección de regresar el Ejército a los cuarteles, de regresar la responsabilidad a las policías y los gobiernos locales”, declaró Fox en Viena.

El gobierno del presidente Felipe Calderón ha decidido hacer frente al narcotráfico con el Ejército, una estrategia que ha recibido críticas de defensores de los Derechos Humanos, pero que ha dado resultados con fuertes decomisos y detenciones de grandes capos.

Para Fox se deben de buscar alternativas a esa estrategia, porque a mitad del mandato de Calderón no se han obtenido los resultados esperados al poner a los uniformados a luchar contra el narcotráfico.

“Usar el Ejército, usar la fuerza contra la fuerza, no ha resuelto el problema. Al contrario, lo ha multiplicado”, sostuvo durante la clausura de la reunión anual de la Red Europea de Ideas, un centro de estudios vinculado al Partido Popular Europeo.

“Hay que pensar en todas las alternativas. El presidente Calderón eligió una, que es la que se está siguiendo, la presencia del Ejército. Pero ya son tres años, y creo que es indispensable venir con nuevas ideas y nuevas estrategias”, recalcó.

Entre esas alternativas citó “abrir el debate sobre el consumo de drogas” y su posible regulación, recordando que al derogar la Ley seca en Estados Unidos en la década de 1930 se erradicó la corrupción y el crimen organizado que acompañaba la venta ilegal del alcohol.




“La responsabilidad del consumo de drogas no es del gobierno, es de las personas. Por tanto, pedirle al gobierno que cancele el abasto de drogas a nuestros hijos es quizá imposible”, indicó Fox.

Sin embargo, subrayó que semejante debate se debe producir tanto en México como en Estados Unidos, ya que debido a las estrechas relaciones y la amplia frontera que comparten, cualquier decisión afectaría a ambos países.

El ex presidente también consideró que Estados Unidos debe mostrar un “compromiso serio” para frenar el flujo de armas estadunidenses a los narcos, luchar contra el lavado de dinero y frenar el consumo de droga en el país.

Viena. EFE

“Los reprimo para que me entiendan”

Carlos Monsiváis
18 de octubre de 2009


A su amor por la retórica hueca y por los viajes que le permiten saludar al planeta, el presidente Adolfo López Mateos (1958-1964) añade un rasgo idiosincrático: por motivos autobiográficos no tolera la disidencia: “A mi izquierda y a mi derecha está el abismo”. Formado en el vasconcelismo (movimiento que en 1929 se propone llevar a Vasconcelos a la Presidencia), al sobrevenir la derrota, la dispersión y el retorno humillado a las filas del gobierno, adopta el dogma que rige el resto de su vida: ante el régimen no hay opciones. El gobierno puede no tener la razón, pero si es suya la fuerza es suya la razón. Localiza en los disidentes el peor crimen: la impertinencia. Los criminales, la tesis se infiere por su actitud, lo son por instinto, no pueden evitarlo; los impertinentes desean usurpar a los funcionarios del señor presidente, el delito sin remisión.
A López Mateos no lo calman las pruebas de fuerza y quiere extirpar de raíz a los contestatarios. En 1958 se da a conocer Demetrio Vallejo (1910-1985), un dirigente seccional que encabeza los paros ferrocarrileros de Oaxaca en julio y agosto de 1958. Su temple de líder, su oratoria rudimentaria y sin ambajes lo elevan a la secretaría general del Sindicato Ferrocarrilero. Lo que este gremio ha ganado con la primera huelga le resulta insuficiente en lo tocante a salarios, condiciones de trabajo y respeto a la autonomía sindical. Ante la cerrazón de las autoridades inicia otra huelga que el gobierno no puede admitir. Los ferrocarrileros aguardan un ofrecimiento digno, pero el Ejecutivo se niega al diálogo. López Mateos, a la usanza priísta, convoca a Vallejo a Los Pinos para convencerlo o intimidarlo. Vallejo, según la leyenda, acepta pero avisa que llevará una grabadora, porque él no actúa a espaldas de sus compañeros.

López Mateos promueve la campaña previsible de linchamiento moral de los disidentes. Se les trata como enemigos de la patria, rojillos perniciosos, oprobio nacional. Otro episodio de la lucha de clases en el que a los trabajadores se les mide a través de los insultos y la negación de sus derechos. El sindicato se explica mal ante la opinión pública, pero aunque planteara su causa de modo óptimo ningún órgano de prensa publicaría sus alegatos. Casi sin excepción, los medios, “en nombre de la libertad”, agreden a los huelguistas (Luis Spota publica Las horas contadas, una novela en la que las fuerzas naturalmente oscuras conspiran contra México desde los escondrijos del Sindicato Ferrocarrilero). Hay movilizaciones de los maestros de la Sección IX, los electricistas, los telegrafistas y un sector de estudiantes de la UNAM, y esta batalla por los derechos sindicales y civiles alimenta la teoría de la conjura. El Zócalo se vuelve un espacio de la protesta sin cortesías políticas. El gobierno sólo admite la rendición incondicional y acusa de terquedad criminal a los huelguistas.

El 25 de febrero de 1959, López Mateos responde como patriota ante el extraño enemigo y el 25 de marzo decide que a él nadie le levanta la voz ni le declara una huelga. Se produce lo que se llama entonces el “vallejazo”: en una operación a cargo del Ejército, 10 mil ferrocarrileros y el comité del sindicato son apresados el mismo día. “Una banda de subversivos no puede detener el progreso del país”, vociferan las ocho columnas de los diarios (una cabeza del 3 de octubre de 1968: “Una minoría sectaria pretendió desviar el rumbo de la Revolución”). En el blietzkrieg varios resultan muertos, y a un joven dirigente de Monterrey, Román Guerra, se le asesina en la tortura. Al cadáver se le pintan las uñas de rojo. “Fue un vulgar crimen de homosexuales”, es la explicación policiaca.

Se reprime el sindicalismo independiente y a los líderes ferrocarrileros se les condena por ataque a las vías de comunicación, sabotaje y por el delito de disolución social (artículos 145 y 145 bis del Código Penal Federal), creado para combatir a los partidarios del nazifascismo durante la Segunda Guerra Mundial, y que sólo se aplica contra luchadores de izquierda hasta 1952. Los procesos judiciales son una farsa patética y los conduce el magistrado Eduardo Ferrer MacGregor, un icono de la degradación del Poder Judicial (él sentencia también a los presos del 68). A los despedidos (cientos de ellos) no se les indemniza.

A los ferrocarrileros se les dedica una sentencia monstruosa (de más de 30 años que terminan siendo 11 y medio), y que cumplen en las cárceles de Lecumberri y, después, de Santa Marta Acatitla. Elena Poniatowska, que escribió El tren pasa, novela basada en Vallejo, lo evoca: “Vallejo era un preso al que no le gustaba levantarse por las mañanas para rendirle honores a la bandera, lo que provocó que varias ocasiones fuera castigado en el apando (celda de castigo). En prisión, criticaba a sus compañeros por considerar que no se esforzaban en continuar la lucha. Decía que un luchador siempre lo es, aun en las condiciones más adversas”.

En las no muy abundantes manifestaciones de izquierda de 1959 a 1967, una consigna inevitable es: “¡Libertad a los presos políticos!”, la que retoma el Consejo Nacional de Huelga en 1968. Pero lo cierto es que el abandono, la indiferencia y el olvido son la respuesta a las justas exigencias del puñado de presos políticos. Éstos no ceden, mantienen su postura y nunca se declaran culpables de lo que no han hecho. De manera muy servil, el Poder Judicial, como lo refrenda en 1968, está a las órdenes del Poder Ejecutivo; senadores y diputados no registran la existencia de los presos; los “defensores del estado de derecho”, jamás preocupados por los grandes despojos a cargo de la clase en el poder, aluden de vez en cuando a los vallejistas para felicitar al gobierno por su mano firme. “Se necesitan esos tamaños”, se dice en las semanas siguientes al vallejazo. Y López Mateos es considerado el gobernante humanista que acuña su vanidoso apotegma: “En México no hay presos políticos, sólo delincuentes del orden común”.

En esos días no se puede escribir criticando la acción represiva, porque el gobierno aún cree en la magia de la letra impresa y le ofende ver consignada en las publicaciones a la disidencia. Recuerdo una escena de fines de marzo de 1959. José Emilio Pacheco y yo acudimos a un programa de la XEQ a comentar la poesía latinoamericana. Hablamos del poeta peruano César Vallejo al que nos referimos simplemente como Vallejo, o el gran Vallejo. La segunda vez que lo hacemos quitan el programa del aire. La censura unifica a todos los que llevan el mismo apellido.

López Mateos es un ejemplo de la manía del propietario de la Presidencia. “Mientras yo esté aquí, se hará lo que yo quiera”. Entonces, no se tiene muy presente el poder de los empresarios y de la derecha organizada. Luego vendrán las revelaciones evidentes: nadie es tan fuerte como para gobernar por su cuenta.





Escritor

Cae responsable de 19 robos y violaciones contra menores en Nativitas

De acuerdo con las investigaciones, desde 2005 este sujeto se dedicaba a interceptar a los menores para asaltarlos, y en algunos casos violarlos, sobre todo en las inmediaciones del bosque de Nativitas.

Notimex
Publicado: 17/10/2009 18:22

México, DF. Efectivos de la Policía Judicial detuvieron a un sujeto identificado como el presunto responsable de al menos 19 delitos cometidos contra menores, de éstos 17 robos y dos violaciones, perpetrados en calles de Xochimilco.

La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal informó que el detenido es Víctor Joel Padilla Montiel, alias "el Chore", de 27 años, quien ya fue reconocido por sus víctimas, entre las que están 13 mujeres y seis hombres, de entre 14 y 17 años.

De acuerdo con las investigaciones, desde 2005 este sujeto se dedicaba a interceptar a los menores para asaltarlos, y en algunos casos violarlos, sobre todo en las inmediaciones del bosque de Nativitas.

En uno de sus últimos ilícitos, Padilla Montiel le cerró el paso a una pareja de novios en el referido bosque, cerca del mercado de Las Flores, y tras amenazarlos con un arma blanca abusó sexualmente de la joven, y luego los despojó de sus pertenencias.

Derivado de esta denuncia, la Policía Judicial realizó distintas diligencias e implementó un operativo de vigilancia que permitió ubicar al presunto responsable justo cuando se disponía a atacar a dos jóvenes más.

La PGJDF informó que este sujeto está relacionado con 19 averiguaciones previas por los delitos mencionados, y se continúa con las investigaciones para establecer con qué otros casos estaría vinculado, así como el paradero de un posible cómplice.

SME: amparos colectivos y personales, a partir del lunes



Tras una asamblea informativa celebrada en la sede del sindicato, se acordó el plan de acción de la próxima semana. Los asesores, encabezados por Néstor de Buen y Raúl Carrancá, recomendaron iniciar los trámites, informó Fernando Amezcua, vocero del gremio.

Notimex
Publicado: 17/10/2009 15:37

México, DF. El movimiento de electricistas inconforme por la extinción de Luz y Fuerza del Centro confirmó que la próxima semana presentará los amparos individuales y el colectivo contra el decreto del 11 de octubre pasado.

Tras una asamblea informativa celebrada este sábado en la sede del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Fernando Amezcua, vocero del gremio, indicó que este fin de semana diseñarán el plan de acción que aplicarán a partir del próximo lunes.

El dirigente adelantó que el cuerpo de abogados del sindicato, encabezados por Néstor de Buen y Raúl Carrancá, recomendó iniciar los trámites de los amparos.

Planteó que si bien el diálogo con las autoridades no está roto, si no hay propuestas viables y concretas para resolver el conflicto su movimiento irá creciendo con el apoyo ciudadano.

En ese contexto, Amezcua Castillo señaló que el llamado a sus compañeros electricistas es a que no acepten las indemnizaciones y acudan a la sede sindical para que firmen sus solicitudes individuales de amparo.

También dijo que la instrucción precisa es que tampoco caigan en provocaciones y se mantengan atentos de la información que la dirección del SME ofrece de manera constante.

Ayudaremos a las 40 mil familias víctimas de la demencia :