domingo, 14 de diciembre de 2008

Hay un “plan encubierto” para rescatar a banqueros y grandes empresarios: AMLO

Falsario, Calderón deja en la indefensión al resto de mexicanos frente a la crisis económica
Ciro Pérez Silva (Enviado)

Huejuquilla, Jal., 13 de diciembre. Andrés Manuel López Obrador denunció la existencia de un “plan encubierto” respaldado por las cúpulas de PRI y PAN y el gobierno federal para apoyar con recursos públicos a banqueros y grandes empresarios, por lo que demandó al “gobierno usurpador” que informe a los mexicanos de este nuevo Fobaproa con que pretende rescatar a quienes lo impusieron en la Presidencia de la República, al tiempo que deja en la indefensión frente a la crisis al resto de la población.

“Calderón no sólo ha elevado el precio de las gasolinas hasta el punto de que hoy cuestan más en México que en Estados Unidos, a pesar de que allá el salario mínimo de un obrero es 10 veces mayor al de un trabajador mexicano, también incrementó las tarifas de la energía eléctrica y el costo de los fertilizantes, aplicando una política económica que afecta a las mayorías, y ahora, como buen falsario, como buen mentiroso, pretende, a espaldas del pueblo, rescatar otra vez a quienes lo impusieron en la Presidencia; esa es una arbitrariedad que no vamos a permitir”, enfatizó.

Desde uno de los municipios más pobres del estado de Jalisco, el tabasqueño exigió que se hagan públicas las condiciones de este nuevo Fobaproa que vuelven a avalar las cúpulas del PRI y del PAN, de la mano con el “gobierno usurpador”, con el que “el presidente pelele (Felipe Calderón)” sigue empeñado en rescatar únicamente a banqueros y grandes empresarios.

Al continuar hoy una gira de trabajo por esta entidad, López Obrador indicó que tiene información sobre la maniobra financiera que aplican el secretario de Hacienda, Agustín Carstens; el ex representante de los banqueros y nuevo director de Nacional Financiera, Héctor Rangel Domene, así como el gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz Martínez, la cual implica el uso de decenas de millones de dólares de la reserva nacional.

“Está en puerta”

“Está en puerta; ya están armando un Fobaproa dos, que se financiará con recursos de las reservas internacionales, que es dinero de todo el pueblo”, enfatizó el tabasqueño, quien reiteró la demanda de transparentar los mecanismos y condiciones con que se entregarán estos recursos públicos a banqueros y grandes empresarios. Estableció que, por lo menos, debe asegurar el compromiso de que las grandes compañías favorecidas mantengan la actual planta laboral y no despidan trabajadores.

“No vamos a permitir que de manera encubierta, sin información de ninguna especie, se lleve a cabo un plan para rescatar a banqueros y grandes empresarios, como siempre”, insistió López Obrador, quien, como ejemplo, mencionó el caso de la cementera Cemex, que dirige Lorenzo Zambrano, la cual tiene un patrimonio estimado en 10 mil millones de dólares, pero una deuda cercana a 20 mil millones de dólares.

“De manera inexplicable, Cementos Mexicanos está quebrada en sus finanzas; probablemente por malos manejos administrativos o por ineficiencias, a pesar de que se trata de un monopolio protegido por el gobierno usurpador, que le permite vender en México el bulto de cemento al doble del precio de Estados Unidos. Por esa razón, exigimos transparentar el programa de rescate, porque se trata de las reservas y del presupuesto nacional, que es dinero de todo el pueblo”.

Recordó que, producto de la crisis económica mundial, Estados Unidos emprendió el rescate de las armadoras automotrices, pero exigiendo una garantía de las mismas para asegurar el rem- bolso de dicho apoyo financiero, además de que dio a conocer claramente el método y monto de recursos con los que procedería al rescate de empresas en quiebra, como General Motors.

“Pero en México quieren llevar a cabo el rescate de manera encubierta, sin que se entere la gente, y los mexicanos necesitamos conocer el contenido del programa y en qué condiciones se salvará a los banqueros y empresarios en desgracia. La pregunta es: ¿por qué siempre se rescata a los de arriba? ¿Quién va a rescatar a los de abajo, a los pobres y a las clases medias?”

En el país –apuntó– “está en puerta un huracán” provocado por la recesión y, sin embargo, “el gobierno usurpador de Felipe Calderón ni siquiera informa al pueblo que la situación de pobreza se agravará y que habrá mayor sufrimiento, mucho menos presenta acciones encaminadas a proteger la endeble economía de millones de familias, pero sí prepara ya el rescate de sus empleadores, esos que lo impusieron en la Presidencia de la República”.

Nuevamente, enfatizó que el Movimiento en Defensa de la Economía Popular ejercerá presión sobre el “gobierno espurio” hasta que cambie el actual régimen económico neoliberal y aclare la forma en que pretende rescatar otra vez a los grandes empresarios.

“No hay nadie, con un poco de luz en la frente, que pueda decir que están bien las cosas en el país; está mal en lo económico, lo político y lo social. Estamos en un proceso de degradación”, dijo, y recordó que el próximo 25 de enero, en el Zócalo de la ciudad de México, se dará a conocer un programa con diversas medidas que contribuirán a paliar los efectos de la crisis económica, como la creación de comedores populares en zonas urbanas y rurales con mayores niveles de pobreza y marginación.

Además de visitar Huejuquilla El Alto, recorrió también los municipios de Mezquitic, Huejúcar, Santa María de Los Ángeles y Colotlán.

Tardío intento del PRD de sumarse a la coalición con Convergencia: PT

Cada martes de diciembre y enero se unirán al frente otras agrupaciones

Roberto Garduño

La Comisión Política del Partido del Trabajo (PT) denunció que la corriente Nueva Izquierda se negó “profunda y reiteradamente” a firmar el acuerdo para establecer la coalición del Frente Amplio Progresista y ahora, ante el descrédito de su dirigencia nacional, Hortensia Aragón, secretaria general del PRD, intenta negociar de última hora un acuerdo, “pero es demasiado tarde”.

Silvano Garay, integrante de la presidencia petista y comisionado para negociar la alianza con Convergencia, anunció también la adhesión –el martes próximo– de la Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata a dicho frente, como hizo el Movimiento Cívico Nacional, encabezado por Mario Saucedo, Emilio Ulloa y Humberto Zazueta.

Asimismo–dijo–, cada martes de diciembre y enero se anunciará un desprendimiento de fuerzas internas del PRD para incorporarse a la coalición.

–El PRD de Jesús Ortega reclama que se pretende desmoronar a la izquierda institucional –se le señala.

–La nuestra es una coalición de PT y Convergencia más dos partidos sin registro: el Popular Socialista (PPS) y el Revolucionario de los Trabajadores (PRT), más otras organizaciones sociales. El nombre de Frente Amplio Progresista (FAP) es una cuestión totalmente política y coyuntural que termina el 5 de julio.

–¿Qué va a ocurrir el 19 de diciembre?

–Esperamos que legalmente quede instalada la coalición PT-Convergencia, una vez que presentamos la solicitud el día 10 y de ahí son 9 días para que el Consejo General del IFE la apruebe.

–Los chuchos acusan a la coalición de pretender usar el membrete de FAP para allegarse el respaldo de la ciudadanía.

–No es ningún oportunismo; es una coalición plural en el frente amplio. Durante cada semana y cada sesión, el PT insistió en instalar una mesa para analizar la creación de una posible alianza PRD, Convergencia y PT, que no fuera excluyente, pero no se pudo concretar por los problemas que tuvo el sol azteca. No hay ni albazo ni madruguete.

–¿Pretenden obtener el respaldo político de Andrés Manuel López Obrador?

–Definitivamente. Creemos en el movimiento que encabeza el “presidente legítimo”.

–¿Para ustedes qué representa el PRD de los chuchos?

Conflicto con Nueva Izquierda

–Es lamentable que un partido fuerte traiga esos problemas. Nosotros no tenemos conflictos con el partido; los hubo con Nueva Izquierda, encabezada por Jesús Ortega, a partir de la reforma energética. El asunto es que no hubo voluntad de impulsar la coalición.

“Esto no rompe el FAP, el cual está registrado legalmente. Es más, yo te adelanto que sí habrá coalición entre PRD, PT y Convergencia, y donde haya acuerdo iremos los tres a las próximas elecciones, o PT y PRD, o PT y Convergencia”.

–Esta alianza de PT y Convergencia ¿cómo se va a llamar?

–Coalición Frente Amplio Progresista. Y no es lo mismo que el FAP, porque éste es un frente político legalmente establecido ante el IFE. El de nosotros es un derecho que estamos ejerciendo. Y si no se aprueba así, iremos a los tribunales.

–Si se habla de algún problema, ¿radica en las diferencias que tienen con Nueva Izquierda?

–No hay diferencias, sólo no hubo voluntad para hacer coalición. No hubo una mesa para impulsar el diálogo entre Nueva Izquierda y nosotros.

–La dirigencia de Guadalupe Acosta, con vínculos estrechos a los chuchos, ¿no quiso sentarse a negociar con ustedes?

–Así es. Hace unos días nos buscó Hortensia Aragón, pero ya iba muy avanzada la charla. Y todavía, antes del 19 de diciembre, esto se puede recomponer si hay voluntad de ambas partes. La nuestra no es una posición excluyente ni tenemos ganas de fregar al PRD. La coalición es una alternativa electoral que nadie ha explotado, y el acercamiento de Hortensia Aragón llegó tarde.

Para Emilio Ulloa, integrante de los cívicos, su permanencia en el partido del sol azteca no representa ninguna contradicción política al haberse incorporado a la coalición PT-Convergencia.

“Nosotros estamos con lo establecido, con la lucha que encabeza Andrés Manuel López Obrador. Ya nos hemos sumado a la defensa de la economía popular”.

Pierde Pemex más de $6 mil millones en inversiones fallidas

La exposición de pasivos de la paraestatal 51.7% fue a tasa fija y 48.3 a tasa flotante

■ Tienen coberturas para mitigar efectos por el tipo de cambio entre las UDI y el peso mexicano

Israel Rodríguez J.

Petróleos Mexicanos (Pemex) y sus organismos subsidiarios registraron pérdidas por poco más de 6 mil millones de pesos por la contratación de instrumentos financieros derivados para cubrir riesgos de mercado asociados a posiciones de deuda, servicio de cobertura a clientes nacionales que consumen gas natural, y precios de compra y venta de petrolíferos en operaciones de comercio internacional, indicó información oficial.

Los derivados financieros son productos usuales en los sistemas financieros y son utilizados tradicionalmente para cubrir los posibles riesgos que aparecen en cualquier operación financiera, estabilizando y por tanto concretando el costo financiero real de la operación.

Los derivados son aquellas operaciones que se refieren a instrumentos de gestión de riesgos tales como futuros, opciones, swaps, entre otras, cuyo precio se mueve o varía en función de parámetros como riesgo y plazo, pero también depende de la cotización que alcance en el mercado otro activo, al que se denomina subyacente.

No tienen como referente el tipo de cambio

Sin embargo, los últimos informes oficiales de la paraestatal precisan que la petrolera mexicana no tiene contratados instrumentos financieros derivados que tengan como subyacente el tipo de cambio entre el peso mexicano y el dólar estadunidense.

Lo anterior, dado que los ingresos de Pemex se realizan en dólares estadunidenses, o están indizados o relacionados a esta moneda; y sus ingresos están parcialmente indexados al dólar americano. Las monedas cubiertas son el euro, la libra esterlina y el yen japonés. Adicionalmente se tienen coberturas para mitigar el riesgo del tipo de cambio entre las unidades de inversión (UDI) y el peso mexicano.

La contratación de instrumentos derivados por parte de Pemex se circunscribe dentro de la política de mantener un balance de pasivos a tasa fija y flotante para mitigar el impacto de fluctuaciones en tasas de interés. Al 30 de septiembre de 2008 aproximadamente 51.7 por ciento de la exposición de la deuda de Pemex fue a tasa fija y el 48.3 por ciento restante a tasa flotante. Mientras que la exposición a dólares fue de 78 por ciento y el resto a pesos.

De acuerdo con los informes de Pemex proporcionados a las autoridades bursátiles de México y Estados Unidos, así como a los diversos inversionistas institucionales, el monto nominal de instrumentos financieros derivados asociados a la deuda asciende a unos 9 mil 626 millones de dólares, en swaps de cobertura contra variaciones en las tasas de interés y swaps de moneda.

Según los datos preparados por la dirección corporativa de finanzas, entre el tercer trimestre de 2007 y el mismo periodo de 2008, se registró una minusvalía en la valuación de mercado de instrumentos financieros derivados asociados a deuda por mil 82 millones de pesos, así como una pérdida adicional por 4 mil 989 millones de pesos por la baja en la valuación a mercado de los derivados para la cobertura del precio del gas natural.

Los derivados del precio del gas natural son ofrecidos por Pemex a sus clientes para disminuir la volatilidad en los flujos de efectivo por la venta de este hidrocarburos. De esta manera, Pemex elimina el riesgo de mercado generado por estas operaciones a través de la contratación de instrumentos similares en el mercado internacional.

Otra modalidad que adopta Pemex en la adquisición de instrumentos financieros derivados son los que están referenciados al precio de los petrolíferos que permiten mitigar el riesgo de mercado de los hidrocarburos comprados y vendidos en el comercio internacional para garantizar una cotización previamente determinada.

El despertar. José Agustín Ortiz Pinchetti

José Agustín Ortiz Pinchetti
jaorpin@yahoo.com.mx

■ La apuesta de AMLO

Podría hablar del cálculo estratégico de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), pero me gusta más la palabra apuesta, pues implica riesgo y competencia. AMLO arriesga su suerte a la certeza de que el pueblo de México despertará, se organizará y tomará el poder. Él quiere ser partícipe de esta toma de conciencia, organización y victoria, pero no confía mesiánicamente en sí mismo, sino en la capacidad de la gente de cambiar su circunstancia.

Sus competidores también toman en cuenta al pueblo, pero para ellos es una masa a la cual se puede halagar, engañar, corromper. PAN y PRI usan los mismos mecanismos. El clientelismo, la demagogia y, sobe todo, la manipulación de los medios. AMLO no puede ni quiere usar los viejos instrumentos de la política mexicana. PRI y PAN saquean impunes a los dineros públicos y tienen el apoyo de la oligarquía, los monopolios y las televisoras. Así que el obstáculo que tendrá que afrontar el pueblo con AMLO o con otros líderes es formidable. Es la vieja estructura de castas que viene desde la Conquista y que se resiste al cambio.

AMLO constata cada día las transformaciones en la conciencia popular. Una creciente vocación por organizarse y movilizarse. La mayoría de los científicos sociales menosprecian su trabajo en los municipios. Ha visitado mil 900 y superará los 2 mil antes de la primavera de 2009; 16 mítines por semana de contacto con la gente a la que presenta su propuesta. Oye, mide y cala la intensidad de las reacciones. Ningún político ha hecho esto.

Después de La democracia en México, de Pablo González Casanova (1965), se han producido finos trabajos sobre los fenómenos del cambio en la cultura política. Pero la clase política se ha corrompido, funciona como una casta separada de la población. Centrada en sus intereses y privilegios. El pueblo corresponde despreciando a los políticos.

He observado cómo Andrés Manuel se conecta con la gente en los mítines. Un fenómeno muy interesante: la gente le muestra profundo afecto y confianza y AMLO les corresponde. No sólo simpatiza con ellos, los quiere, sino confía en su capacidad. Entonces establece un arco de empatía y brota el entusiasmo, impulso básico para la acción política. AMLO es un líder dotado de iniciativa, pero él apuesta a que la conciencia popular está a punto de un salto cualitativo. Apuesta a que la mayoría de la población va a concientizarse acicateada por las graves incitaciones de esta época y a su propia maduración de las últimas décadas. Apuesta que se va a abrir paso a través de una vía legal, pacífica y electoral. Este pueblo renovado es la esperanza histórica para México y AMLO es la esperanza para ellos.

Y los delincuentes tan campantes en la SSPF : "Ciudadanía llegó al límite, alertan"

La muerte de Silvia Vargas, hija del ex titular de la Comisión Nacional del Deporte, Nelson Vargas, a manos de sus secuestradores fue el detonante para que representantes de la sociedad civil exigieran acciones más drásticas contra la inseguridad


Liliana Alcántara
El Universal
Domingo 14 de diciembre de 2008
liliana.alcantara@eluniversal.com.mx

La muerte de Silvia Vargas, hija del ex titular de la Comisión Nacional del Deporte, Nelson Vargas, a manos de sus secuestradores fue el detonante para que representantes de la sociedad civil exigieran acciones más drásticas contra la inseguridad.

Así fue como organizaciones que encabezan el movimiento Iluminemos México aceptaron la tarea de evaluar el trabajo de los jueces y fiscalizar sus sentencias mediante un Observatorio Ciudadano y coincideron en que ésa es la última oportunidad para combatir la corrupción y colusión del crimen organizado con el Estado.

La propuesta de crear el Observatorio Ciudadano fue hecha el viernes por el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo Ortiz Mayagoitia, quien reconoció que en el sector de la justicia “hay problemas de distinta magnitud” que requieren del apoyo de la sociedad para afrontarlos.

María Elena Moreira, presidenta de México Unido contra la Delincuencia, afirmó que “los ciudadanos han llegado al tope y están indignados por la violencia, la corrupción y la impunidad que prevalece en el país, por lo que se supervisará con mayor contundencia el desempeño de jueces que estén a cargo de sentencias relacionadas con secuestradores, homicidas y violadores sexuales.

José Antonio Ortega, presidente del Consejo ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, comparó a México con una selva donde opera “la ley del más fuerte”, y destacó que en lo que va de la administración del presidente Felipe Calderón, 105 mexicanos han sido asesinados por sus secuestradores.

Notas de la semana. Carlos Monsiváis

Del anonimato en la cúpula (burocrática)





¿Qué es incluir y qué es excluir? Esta pregunta podría dirigírsele al grupo que, con el apoyo de dos partidos que no son el suyo, se ha apoderado del Partido de la Revolución Democrática.

No pretendo entrar en contienda con los dirigentes del PRI que tanto han apoyado a este grupo, ni con la Secretaría de Gobernación del Mío Cid desaparecido, que tanto los ayudó, ni con el Tribunal Electoral que le dio el triunfo a Jesús Ortega, a pesar del “22% de votación irregular”, como dijo un tribunicio de los votos sin siquiera sonrojarse. Sólo me interesa ahora ver cómo personajes muy menores han querido incluirse no por vía del liderazgo sino del secuestro de una organización.

Empezaron muy abajo, en grupúsculos de lo que pudo haber sido “izquierda”, porque donde no había casi nadie pudieron colarse. Ortega, un ejemplo a su modo prototípico, comenzó de secretario particular de Rafael Aguilar Talamantes, el dirigente del PST, que hoy en el olvido lo buscó con su trayectoria de aportaciones sucesivas a su propio bienestar. ¿Qué era Ortega entonces? Un burócrata que se aprendía frases y quería probar entonaciones de la tribuna. Las frases se le gastaban y se le volvían “gabardinas de Cantinflas”, y las entonaciones no se escuchaban, posible causa de su alejamiento del entusiasmo de los públicos, las masas y, si mucho me apuran, de los reporteros que deben vencer su tedio para oírlo decir lo mismo a tal grado que ya suena distinto. Lo mismo 10 mil veces parece lo contrario o no se asemeja a nada.
Sus compañeros de grupo, facción, secta burocrática o como quieran decirle, no obstante sus orígenes diversos, se unifican en torno a la permanencia en las asambleas y las reuniones y la incapacidad de conmover, hacer pensar y despertar entusiasmos. Vengan de donde vengan, siempre se dirigen al anonimato en la cúpula, una definición precisa de los alcances de su carisma, palabra que hasta el momento nadie, absolutamente nadie, ha usado en su provecho.
Es curioso: los elogios a este grupo, las raras ocasiones en que suceden, se producen por oposición: no son como el delirante Andrés Manuel López Obrador, y sólo causan daño en lo que podría ser su propiedad. Intriga cómo los carentes de virtudes a los ojos de todos son el liderazgo que se permite condenar a los que han hecho visible el movimiento del que medran. ¿O alguien sabe de comentaristas, políticos o simples transeúntes que ensalcen la fuerza carismática de un grupo distinguido por el nombre de dos de sus integrantes?

* * *

Al incluido desde siempre no se le nota el deseo de figurar sino el desprecio por los que quieren figurar por su propio esfuerzo. A los que quieren incluirse para recibir, digamos, el saludo presidencial y el abrazo político de secretarios de Estado (aunque sea del Estado actual) y jefes de otros partidos, no les importa tanto acumular méritos sino conseguir con la perseverancia del caso el control de lo desatendido. (Cuauhtémoc Cárdenas y López Obrador descuidaron, por así decirlo, el PRD por creerlo seguro.)

Y ahora al grupo de Ortega y Zambrano ya sólo le falta lo para ellos central, ese aspecto victorioso que viene de las fotografías de grupo desde niños, que se afina en los Halloweens y los Garden Parties, que convierte a los DJ’s en los mezcladores de la ideología del triunfo, que en los viajes a donde sea únicamente se siente a gusto cuando el contexto no deprime y, oh, diosa Fortuna, cuando uno y una saben que la selección de las especies se inicia en las reuniones donde la misma clase se felicita por la ausencia de intrusos. Se unifican la apariencia y el vestuario (todos los chinos y todos los burgueses son iguales); cambian los sitios de veraneo, se simplifica el habla, se redondea la sonrisa, una sonrisa como lejanía en la cúspide, el sello de garantía de los que no necesitaron de trámites para verse incluidos.

¿Y cómo le van a hacer los simuladores del PRD para incluirse en donde tan no se les toma en cuenta que no hay noticia previa de su existencia? Oh, dioses del Altiplano, todo lo que hacen, su destrucción sistemática de un partido, para acabar cenando con ellos mismos.

La SSP degrada a militares y contrata a delincuentes

Alentados por el presidente Felipe Calderón, cientos de oficiales dejaron el Ejército para reforzar a la Secretaría de Seguridad Pública en la lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, la dependencia encabezada por Genaro García Luna no cumplió las promesas de mejoría laboral y salarial, los puso a las órdenes de mandos con antecedentes penales e incluso tolera que se les imponga un trato degradante. Pero de nada les sirve denunciar sus casos, ya que García Luna no le responde ni siquiera al secretario de la Defensa Nacional.Nombre: Manuel Jesús García Santos. Puesto: Inspector jefe de la Policía Federal Preventiva (PFP). Resultado: "Criminal".
Nombre: Julio César Monge Peraza. Puesto: Subinspector de la misma corporación que tiene a su cargo las Fuerzas Federales de Apoyo. Resultado: "Criminal".
Gerardo Barriga Almonte, oficial; Omar Lander Ángeles, suboficial; Raúl Leal Polito, sargento, y Jesús Daniel Yánez Yáñez, cabo, todos miembros de la PFP, tienen un registro idéntico: "Criminal".
Uno por uno, policía por policía, decenas de miembros de la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP), que encabeza Genaro García Luna, aparecen en oficios que acreditan que quienes deben combatir a los criminales tienen, paradójicamente, antecedentes penales por conductas delincuenciales, conforme a la revisión que la misma dependencia hizo de ellos en el Sistema Nacional de Seguridad Pública.Según documentos de la SSP clasificados como "confidenciales", y que fueron obtenidos por Proceso, la evaluación practicada por la Dirección General de Control de Confianza de la PFP es un trámite inútil, porque mandos y efectivos -entre ellos los mencionados- se encuentran en activo, lo que pone en entredicho la Operación Limpieza difundida por el gobierno de Felipe Calderón.Firmados por Gabriela Peláez Acero, directora general de Control de Confianza, son decenas y decenas los oficios -cientos, se dice dentro de la corporación- que prueban que elementos policiacos tienen registros "criminales" en la Procuraduría General de la República (PGR), en las procuradurías de Justicia de los estados y en la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).La inocuidad de los controles, el disimulo de los antecedentes penales de elementos policiacos y los "compadrazgos" en la asignación de grados y ascensos han generado corrupción al interior de la SSP, particularmente en las Fuerzas Federales de Apoyo, que se ha denunciado formalmente ante la Secretaría de la Función Pública (SFP) y en la Presidencia de la República."Todo el aparato que hoy funciona (es) para favorecer el ejercicio de la corrupción y la mezquindad", asevera el mayor Julio Alberto Noé Franco en una carta que envió a García Luna el 22 de septiembre pasado, y en la que describe a detalle las anomalías y corruptelas que padece la PFP.La carta del militar forma parte de un grueso expediente sobre las denuncias que se han traducido en encubrimiento a los señalados y en represalias contra los quejosos porque el titular del Órgano Interno de Control (OIC) de la SSP, Edgardo Flores Campbell, es amigo íntimo de García Luna y fue coordinador de giras y logística de actos de la campaña presidencial de Felipe Calderón, quien al inicio de su gestión lo nombró secretario general del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).
Otra "falacia" de Calderón
El fenómeno de policías con antecedentes penales en activo en la secretaría que encabeza García Luna es parte de un problema mayor, relacionado con otra promesa incumplida de Calderón: la mejoría laboral que, al inicio de su gestión, ofreció a todos los miembros de las Fuerzas Armadas que voluntariamente se integraran a la policía federal.Hace dos años, el 13 de diciembre de 2006, Calderón instruyó a las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y de Marina (Semar) a transferir 10 mil elementos a la SSP -7 mil 500 de la primera y 2 mil 500 de la segunda- con el fin de reforzar la "guerra" que declaró al crimen organizado y que en dos años ha provocado más de 8 mil muertes. Conforme a la instrucción presidencial, a un teniente coronel del Ejército le correspondía en la PFP el grado de inspector general; un mayor sería inspector jefe; un capitán primero, inspector; capitán segundo, subinspector; un teniente sería oficial; subteniente, suboficial, y los cabos y sargentos también ascenderían un grado con el cambio.Pero la promesa de Calderón de mejorar sueldos y jerarquía a los militares resultó "una falacia", como la calificó el mayor José de Jesús Anguiano Rodríguez en la carta de renuncia que le envió a García Luna el 22 de julio de 2007, cinco meses después de que no obtuvo en la PFP el grado que le correspondía.Según el convenio de transferencia Sedena-SSP, por haberse retirado del Ejército como mayor, le correspondía el grado de inspector jefe, pero no sólo le dieron un grado menor (sólo inspector y comandante de compañía), sino que días después, "por órdenes superiores", fue relevado de la comandancia por un capitán segundo, al que por grado no le correspondía tal jerarquía.Anguiano Rodríguez, Diplomado de Estado Mayor y con estudios de maestría en administración pública, denunció ante García Luna éstas y otras anomalías, entre ellas el incumplimiento de las expectativas económicas por las que se retiró del Ejército."Cabe resaltar que en esta situación resulta directamente afectada mi familia por abandonar el servicio activo por una falacia en que se convirtió la propuesta de trabajo laboral (sic) ofrecida por esta Secretaría de Seguridad Pública, debido al movimiento del cargo dentro de la planilla orgánica, que resultó ilegal", definió.Aunque no pudo reingresar al Ejército porque éste no fue responsable del incumplimiento, el militar logró que el secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván -"como muestra de apoyo a mi persona y a mi familia", dijo Anguiano- le enviara una carta a García Luna el 10 de mayo para pedirle explicaciones sobre el incumplimiento del convenio, pero el jefe policiaco ni siquiera respondió.Así, Anguiano Rodríguez presentó su renuncia dirigida a García Luna, a quien le advirtió que "no es la institución sino las personas encargadas de su cumplimiento las que harán que la orden del señor presidente no se concrete y solamente quede en buenas intenciones por la falta de voluntad política y social, falta de calidad humana en los niveles de mando".
Puros cuates
El del mayor Jesús Anguiano Rodríguez es uno de los numerosos casos de oficiales que solicitaron su retiro del Ejército para aspirar en la PFP a mejores condiciones laborales y económicas, mientras que otros individuos son los beneficiados, la mayoría de ellos también militares, aunque éstos no se acogieron al programa de transferencia ofrecido por Calderón para fortalecer a la PFP.Por ejemplo, al mayor ingeniero industrial Julio Alberto Noé Franco le correspondía ser inspector jefe y sólo obtuvo el grado de subinspector; el capitán primero Manuel Trejo Hernández debería ser inspector general y sólo obtuvo grado de subinspector, y el capitán segundo Juan Enrique Patiño Ortega debería ser subinspector y es sólo oficial.El teniente coronel Procopio Eduardo Cárdenas Noble debería ser inspector general y es inspector jefe; el teniente Rafael Ibarra Celestino es suboficial y debería ser oficial; el cabo Juan Enríquez Chávez debería ser sargento y tiene el mismo grado que en el Ejército. Otros: el teniente Fernando Gómez Guzmán es suboficial y le corresponde ser oficial, mientras que el capitán segundo Juan González Márquez debería ser subinspector y es sólo oficial.El caso del mayor Noé Franco es ilustrativo. De acuerdo con su expediente -que ha enviado a todas las instancias de la SSP, de la Secretaría de la Función Pública, la Presidencia de la República y la Cámara de Diputados-, al retirarse del Ejército le correspondía el grado de inspector jefe y comandante de agrupamiento, con un salario de 47 mil 973 pesos.Cuando Franco hacía los trámites para ingresar a la PFP, a partir del 1 de abril de 2007, le dijeron que podía inclusive ser inspector general por sus estudios de posgrado y cursos en países como Estados Unidos y China, con un ingreso de 68 mil pesos mensuales. Sin embargo, ya dentro de la corporación, sólo le fue otorgado el grado de subinspector de nivel jefe de departamento, con un sueldo de 19 mil 432 pesos, menos de la mitad de lo ofrecido -incluso menos de lo que percibía en el Ejército- y con un grado que corresponde a un capitán segundo.El general Rodolfo Cruz López, coordinador general de las Fuerzas Federales de Apoyo, le pidió a Franco que fuera paciente para que lo incorporaran pronto a uno de los agrupamientos que estaban en formación, pero nada ocurrió. No sólo no obtuvo el grado que le corresponde, sino que fue asignado a una subdirección de operaciones con un solo ayudante y una computadora en mal estado. Por el incumplimiento y el "acoso laboral", el mayor Noé Franco -quien fue director de las fábricas de vestuario y calzado de la Sedena- procedió a demandar a la SSP el 10 de agosto de 2007, ante el Tribunal Federal Fiscal y Administrativo.A partir del 1 de marzo pasado el militar fue adscrito al Servicio de Protección Federal -cuerpo policiaco creado este martes 9 por decreto presidencial-, pero no se le ha entregado vestuario ni equipo, acceso a comedor, pago de "operatividad" -viáticos-, identificación como miembro de la PFP ni licencia para portar armas.Tras casi un año sin solución a su problema, Noé Franco recurrió a Felipe Calderón mediante una carta que le envió el 17 de enero de este año. La respuesta fue un oficio firmado por Bernardo Altamirano, jefe de la Red Federal de Servicio a la Ciudadanía, y remitido a García Luna para "que se brinde la atención que el caso amerite". Pero nada pasó con esa carta y con otros oficios que Altamirano envió a García Luna y al secretario técnico del Secretariado de Seguridad Pública, Daniel Castro.Tampoco ocurrió nada con las denuncias que el militar retirado formuló ante el OIC de la SSP, a cargo de Flores Campbell, en las que detalla la discrecionalidad con la que se conducen los mandos y las arbitrariedades que cometen.Por ello, en una carta enviada a García Luna el 22 de septiembre de este año, el ingeniero militar le dice que en la SSP "todo el aparato que hoy funciona (es) para favorecer el ejercicio de la corrupción y la mezquindad", como lo demuestra la falta de cumplimiento de la "oferta laboral"."El que roba, miente o engaña, tras las rejas; pero ahora el que roba, miente y engaña está en nuestras filas. Hay tantos ejemplos que nos dejan claro que algunos de los compinches, soplones y protectores de delincuentes traen uniforme, y es el de la Policía Federal."En su comunicación, Noé Franco insiste: "No hubo una buena selección de personal en las Fuerzas Federales. Es por ellos que hay muchos con antecedentes penales que están en nuestras filas, que van desde inspector jefe hasta cabo".Pero además, conforme a un grueso expediente del que el reportero tiene copia, en la PFP se asignan grados y ascensos de manera discrecional en función de las relaciones personales y en perjuicio de los militares que ingresaron a la corporación por la vía de la "oferta laboral" de Calderón de diciembre de 2006:Miguel Ángel Rosas Pérez, quien era mayor del Ejército, es inspector general, cuando le corresponde ser inspector jefe; el teniente Gerardo Barriga Almonte, quien debería ser sólo oficial, es subinspector; el marinero Enrique Sánchez Pozos es inspector, pero debería ser sólo sargento segundo; el teniente Miguel Ángel Rosas Ortega debería ser oficial y es inspector.Más: el sargento segundo Héctor Sánchez Soto debería ser sargento primero y es suboficial; el capitán segundo Praxedis Gerardo Torres González debería ser subinspector y es inspector, y el teniente Pedro Benito Manzano Vega es inspector, cuando debería ser sólo oficial.Y un caso peculiar: el capitán primero Carlos Gómez Fontanel tiene el grado que corresponde a la "oferta laboral", inspector, pero presuntamente es desertor.
Trato degradante
La discrecionalidad es nítida en el caso del teniente Alejandro Zapata Meza, comandante de agrupamiento, pues la mayoría de sus propuestas de ascensos brincan dos y hasta cuatro grados.Dos ejemplos: un cabo brincó a oficial, cuando debería ser previamente sargento primero, sargento segundo y suboficial. Y Zapata Meza propuso que un suboficial ascienda a inspector, cuando los grados siguientes son oficial y subinspector. En cuanto a los grados por nivel de estudio, hay también numerosos ejemplos de la discrecionalidad en la PFP.Mientras que Luis Nolasco Hernández, licenciado con estudios de posgrado y que estudia un doctorado, es cabo de la PFP, Jesús Matus Badillo, con apenas la secundaria, es inspector. Es el mismo caso de Alejandro Romero Carrasco, quien tiene estudios de licenciatura y es cabo, en tanto que Leonardo Roberto Vargas Cruz, con sólo secundaria, es inspector.Los inspectores generales Fernando Faustino Mejía Ocampo, Alfonso Covarrubias López, Ricardo Álvarez Andrade y Gabriel Hernández Velasco tienen estudios sólo de bachillerato, nivel académico de Fernando Fierro Bello y Alejandro García González, con grado de inspector jefe cada uno.En la SSP también se da el extremo de que personal con menor grado tenga a sus órdenes a sus superiores jerárquicos: en el caso del subinspector Noé Franco, mayor en el Ejército, estaba subordinado al teniente Felipe Valdés González, quien es director de logística, encargado del mantenimiento vehicular, gasolina, armamento, vestuario y equipo de protección.Más aún, como lo denuncia por escrito Noé Franco, Valdés González ha dado un trato degradante a uno de sus superiores jerárquicos, aunque bajo sus órdenes por disposición del inspector general Federico Rivas Valdés: al inspector jefe Arturo Álvarez Muñiz, comandante del Segundo Agrupamiento de Reacción y Alerta Inmediata, le asignó hacerse cargo del aseo de los sanitarios y supervisar la limpieza de los baños portátiles."Cabe hacer mención que por atención y consideración al cargo y grado del inspector jefe, éste no debería estar realizando esas funciones y bajo el mando del oficial", reprocha Noé Franco.Y en la carta que le envía a García Luna, el mayor le pregunta: "¿Quién nos mintió o nos engañó con la oferta laboral? ¿Acaso fue el propio presidente de la República, ya que fue su orden? ¿Fue la falta de supervisión de un secretario, al cual su equipo no le informa la realidad, esperando que el personal preparado mejor renuncie porque estorba a sus planes? ¿O sólo es un capricho o desobediencia al propio presidente de la República?".