miércoles, 22 de octubre de 2008

¿De qué se ríen Carlos Navarrete y Graco Ramírez?

= ¿Pactaron en secreto con Beltrones, Calderón y Mouriño?
= ¿Están de acuerdo en que México se divida en bloques?
=López Obrador precisó que este es un tema "inaceptable"
=Desde hoy, los defensores de Pemex, en alerta máxima
=Las brigadas estarán, desde las 11:00, en el Hemiciclo

Hace unas horas, cuando todavía era lunes, se reanudaron las negociaciones entre los senadores del PAN, el PRI y el PRD. Hay un tema sensible, el de dividir en varios bloques el Golfo de México, en el que todavía no hay acuerdo. Andrés Manuel López Obrador ha señalado en tres ocasiones (la semana pasada en el Hemiciclo a Juárez, el domingo y ayer en el Monumento a la Revolución), seis puntos inaceptables para el Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo:

1. Que se creen empresas filiales de Pemex, pues con ello se afirmaría la política de Salinas que partió en cuatro a la paraestatal.

2. Que haya contratos riesgo, de acuerdo con los cuales las empresas que trabajen para Pemex cobrarían recompensas, en efectivo o en petróleo, de acuerdo con lo que extraigan del subsuelo.

3. Que Pemex asigne contratos sin licitación pública, ya que esto claramente agravaría la corrupción dentro de la empresa, y favorecería a Mouriño, a los hijos de Marta Sahagún, a Salinas, a Claudio X. González y a todas las ratas que participaron en el fraude electoral de 2006 para lograr precisamente ventajas de este tipo.

4. Que se compren fianzas o seguros para proteger al director de Pemex y a los miembros del Consejo de Administración de posibles delitos que cometan contra la empresa.

5. Que Pemex se someta a tribunales internacionales, pues con ello se perdería soberanía nacional, y

6. Que se asignen a compañías nacionales o extranjeras bloques dentro del territorio o los mares de México para que exploren y exploten pozos petroleros. Ello equivaldría a repartirles el país.

Hasta las primeras horas del lunes, al cabo de negociaciones que se prolongaron más allá de la media noche del domingo, el PRIAN y los senadores del Frente Amplio Progresista lograron acuerdos en 5 de los 6 puntos arriba descritos. Para asombro y sospecha de numerosos militantes del movimiento defensor del petróleo, Carlos Navarrete y Graco Ramírez no han dejado de jactarse de que "ya se conjuró el peligro de la privatización". Esto es falso. ¿Acaso aceptaron la idea prianista de dividir el país y los mares en bloques y están tratando de engañar a la gente? ¿Ya pactaron en secreto con Beltrones, Labastida, Madero, Calderón y Mouriño?

La redacción final de las leyes que reformarán a la industria petrolera nacional, después del Senado, irán a la Cámara de Diputados, donde comenzará otra negociación. En ella participará Emilio Gamboa Patrón, que es la otra cara de Beltrones, pues los dos son los principales representantes de Salinas. Por lo tanto, lo que salga del Senado no puede dar el menor pie a que los diputados (y allí estará también Ruth Zavaleta y otros chuchos de la misma calaña) logren mediante "ligeras modificaciones" la privatización que hasta ahora el movimiento de López Obrador ha impedido.

Por todo lo anterior, "las brigadas de adelitas, juanes y mixtos habrán de mantenerse, a partir de hoy, en estado de máxima alerta. Y los defensores del petróleo en el interior del país, prepararse para viajar a la ciudad de México en cualquier momento", dijo anoche a este blog una fuente del Gobierno Legítimo.

Jaime Avilés
Publicado por Jaime Avilés en 21:58

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