domingo, 19 de noviembre de 2017

El gran Porfirio .- José Agustín Ortiz Pinchetti

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Cárdenas, López Obrador y Porfirio Muñoz Ledo

L
a UNAM organizó unas jornadas en homenaje a Porfirio Muñoz Ledo. El fenómeno de Porfirio fue analizado en algunas de sus facetas por una veintena de especialistas muy bien coordinados por Ricardo Valero. Por supuesto que Porfirio es digno de estudio, me gustó mucho que fuera la Universidad, donde tuvo un desarrollo político precoz, estimulado por quienes eran los grandes maestros de derecho al mediar el siglo XX.
Voy a destacar algunos aspectos de la extraordinaria vida de nuestro amigo: vitalidad: a los 84 años conserva una mente deslumbrante y una inquietud contagiosa, es uno de los raros especímenes que cruzaron todo el pantano de la transición mexicana a la democracia (aún incompleta) sin manchar su plumaje, conservando un raro equilibrio entre la vanidad y la valentía, cualidades que también desplegó con las damas y la coctelería: es el inventor del porfirione. Capacidad de desplazamiento: entro a la política por la puerta de la academia, en realidad, nunca ha dejado de ser un maestro, y no sólo en las aulas, sino en las sobremesas. Maestro en el arte de la política y en la reflexión sobre ella. Ha visitado todas las regiones del globo, ha estudiado o trabajado en México, Francia, EU, en infinitos y lejanos centros de poder y misteriosos palacios.
Erudición: para ofrecer un ejemplo bastaría decir que cuando hizo una presentación esquemática del Estado mexicano para Fox y colaboradores, todos quedaron tan impresionados que Fox decidió no invitar a Porfirio a ningún puesto en su gabinete, por miedo de que se los comiera vivos. Polifacético; ha encarnado todos los papeles en la política, fue priísta, tan destacado que llegó a ser presidente nacional del partido, precandidato presidencial dos veces, actor en la ruptura entre la corriente nacionalista y los conservadores, autor intelectual de la nueva propuesta, senador de oposición que rompió con la virtud intacta del Senado, ha sido fundador, presidente, candidato, dirigente máximo, aliado, diputado, comisionado, ministro, diplomático del más alto nivel, representante, asesor de PRI, PRD, PAN, PARM, PT y Morena. Él solo tendió una celada y puso en evidencia a todos los senadores del PRI.
Su vida podría representarse en un inmenso mural donde aparecería rodeado de todos los intelectuales, activistas, políticos y maestros de varias generaciones, digamos todo quien fue alguien, incluyendo a muchos pícaros, en el amplio espacio entre 1960 y 2017. Tiene una memoria prodigiosa y sus amigos le hemos pedido que complete su autobiografía. Según sé, va avanzando, serán varios tomos donde se refleje la historia del México contemporáneo.
Twitter: @ortizpinchetti

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