CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Luego de observar cerrado el camino al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), bloqueado por la policía capitalina, los maestros de la CNTE decidieron volver al plantón que tienen desplegado en la plaza de la Ciudadela.
Los secretarios generales del magisterio disidente anunciaron que decidirán mañana los siguientes pasos que adoptarán para cambiar la reforma educativa e instalar una mesa de diálogo con las autoridades.
Antes de retirarse, dejaron en claro que el gobierno es quien se opone al diálogo. También repudiaron varios puntos de la reforma educativa y reafirmaron su disposición a participar en su modificación.
“La movilización de la CNTE fue todo un éxito”, reportó un vocero a sus compañeros, al llamarles a “seguir en la lucha hasta tirar esta reforma educativa”.
Frente a frente, maestros y granaderos permanecieron, durante más de una hora, inmóviles en la esquina de las calles Ayuntamiento y Cuauhtémoc.
De las bocinas del autobús de la CNTE se escucharon repudios contra el operativo policiaco y la actitud cerrada de Aurelio Nuño Mayer, el secretario de Educación federal al que los maestros apodaron “el sargento”.
En la avenida Cuauhtémoc se concentraron centenas de granaderos, detrás de los cuales fueron estacionados cuatro camiones de la policía capitalina, de tal forma que el camino quedó totalmente cerrado.
El jefe del gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, también fue el blanco de críticas, pues según la CNTE es “un simple operador del gobierno de Peña Nieto”.
“No era su guerra y la adoptó”, sostuvo un vocero, en referencia al despliegue de granaderos capitalinos. Del contingente se elevaron cantos contra la policía y gritos que exigieron el paso libre rumbo al aeropuerto, tal como estaba previsto en la agenda de la CNTE.
Los líderes también denunciaron a los gobiernos federal y capitalino por “secuestrar la vida pública de ese país”.
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