jueves, 17 de septiembre de 2009

Estamos listos para transformar el país: partidarios de AMLO

Jaime Avilés




En cuanto Andrés Manuel López Obrador inició la lectura de su breve y mesurado discurso en la Alameda, sincrónicamente, allá, al final de la calle Madero, el cielo del Zócalo se incendió con un espectáculo de fuegos artificiales, pese a que eran apenas las 22:30 horas. La tradición recuerda que los cohetes luminosos arden cada 15 de septiembre en la plaza mayor después de la ceremonia del Grito, pasadas las 23 horas. Alguien, a lo lejos, tal vez quería robar la atención del público a las palabras del “presidente legítimo”. Pero no lo logró.



Aglomerada bajo las conchas de tortuga de incontables paraguas, hombro con hombro desde el hemiciclo a Juárez hasta el Eje Central, soportando la lluvia invariable que caía desde las siete de la noche, la gente escuchó el mensaje del máximo dirigente opositor, esperando instrucciones para actuar en la nueva coyuntura política, y gritando a coro, “¡ya estamos listos, señor presidente!”, cada vez que el tabasqueño señalaba que el movimiento popular necesita –porque “además es su deber”– seguir en la lucha por la transformación del país.



Sin embargo, López Obrador no soltó prenda acerca de qué acciones de resistencia civil pacífica propondrá, el próximo lunes a las cinco de la tarde, frente al Palacio Legislativo de San Lázaro, cuando haga pública su propuesta alternativa de Ley de Ingresos y de Presupuesto de Egresos para el simbólico 2010. En su exposición de motivos, para convocar al mitin, se limitó a resumir:



“Las medidas dadas a conocer la semana pasada para supuestamente enfrentar la crisis de las finanzas públicas no son más que otra vuelta de tuerca para seguir exprimiendo al pueblo. Esta oligarquía, representada por [Carlos] Salinas de Gortari, que es el que gobierna de facto en México (porque a [Felipe] Calderón lo tienen sólo de monigote), pretende aumentar todos los impuestos, inclusive crear impuestos nuevos y seguir subiendo el precio del gas, la gasolina, el diesel y la energía eléctrica”.



Las serpentinas de fuego blanco, rojo y amarillo continuaban tejiendo grecas efímeras sobre el Zócalo, cuando López Obrador añadió: “Desde aquí les invito a que el próximo lunes nos congreguemos en San Lázaro a las cinco de la tarde, para tratar este tema en profundidad (y) tomar decisiones”. Y de nuevo, el gentío empapado volvió a corear. “¡Ya estamos listos, señor presidente!”, una y otra vez.



En la primera línea del templete, a espaldas del ex jefe del Gobierno del Distrito Federal, estaban dos ancianitas que apenas alcanzaban un metro de estatura: Anastasia, de 97 años, vestida de china poblana, y peinada con unas plateadas coletas de adolescente, y Dolores, de 89, con un traje típico más sencillo pero no menos humilde. Ambas habían llegado desde muy temprano con el único propósito de escoltar a Andrés Manuel durante la ceremonia. Los organizadores del acto comentaban “el trabajo que costó ayudarlas a subir al templete”.



Estrellas doradas, chispas luminosas, jeroglíficos de lumbre continuaban subiendo al cielo del Zócalo, mientras ahora López Obrador decía: “cada vez es más claro que los males que atormentan a la nación no podrán remediarse si no llevamos a cabo una transformación de la vida pública, como la que lograron los movimientos de Independencia y de Reforma (...) y la Revolución Mexicana”.



De algún modo, el contraste entre el grave discurso que atendía la muchedumbre en la Alameda y la frivolidad de los fuegos artificiales que estallaban a destiempo en el Zócalo era una elocuente alegoría de la confrontación política que divide al país. Pero tanto en la Plaza de la Constitución como en el antiguo parque construido durante el virreinato lo que abundaba era gente pobre, que a diferencia de años previos ahora no podía darse el lujo de comprar cornetas, pestañas, sombreros, bigotes, huevos de harina o de confeti, o rehiletes y banderitas tricolores.

“¿Usted viene con su familia para apoyar a Calderón?”, preguntó un reportero italiano a una sexagenaria, a la que rodeaban sus hijos y algunos nietos. La mujer, debajo de su paraguas que goteaba por todas las puntas, contestó, mirando al periodista con un dejo de lástima: “¿A Calderón? No, nosotros estamos aquí para olvidarnos un ratito de los problemas, para disfrutar la fiesta”.



Otras, por supuesto, eran las razones que habían conjuntado a los pobres y a los militantes de la clase media en la Alameda, donde tampoco eran visibles los disfraces y juguetes septembrinos de otros años. Nadie parecía haber comprado nada, excepto capas de plástico. En su discurso, Claudia Sheinbaum, secretaria del patrimonio nacional del “gobierno legítimo”, había explicado por qué:



“El pueblo de México sufre un gobierno usurpador que apuesta a la violencia para supuestamente resolver el problema del narcotráfico, mientras reduce los recursos para cultura, educación y salud pública. Un gobierno de facto que minimiza cada día la crisis económica; que subejerce recursos públicos destinados a infraestructura y atención a la pobreza, que dilapida los ingresos petroleros para el gasto corriente de altos funcionarios y el rescate de algunas empresas mientras sigue endeudando al país. Un gobierno de facto que en estos tres años ha producido más pobres y más violencia, menos empleo, menos educación, menos salud, menos bienestar”.



Finalizada la intervención de Sheinbaum, la maestra de ceremonias, Jesusa Rodríguez, presentó a Alejandra Robles, de Puerto Escondido, Oaxaca, una morenita muy joven y en apariencia muy tímida, pero con un vozarrón que cimbró a la Alameda en cuanto empezó a cantar al estilo ranchero los versos de “Como se pueda”, la nueva creación de la propia Jesusa y Liliana Felipe, basada en las históricas palabras que Benito Juárez pronunció mientras combatía contra los invasores franceses y que Andrés Manuel ha convertido en estribillo y remate de muchos de sus discursos: “Vamos a rescatar a México como se pueda, con lo que se pueda y hasta donde se pueda”.



Fue toda una sorpresa aquella voz, a la que no se mostraron indiferentes Porfirio Muñoz Ledo y su esposa; Dante Delgado y Alberto Anaya, líderes de Convergencia y del PT; Octavio Romero Oropeza, Laura Itzel Castillo, Asa Cristina Laurel y Luis Linares Zapata, secretarios del “gobierno legítimo”; Martí Batres, titular de Desarrollo Social en el gabinete de Marcelo Ebrard y muchas personas más, entre las cuales esta crónica no vio a Alejandro Encinas ni a nadie de la dirección del PRD, así como tampoco a doña Rosario Ibarra de Piedra, que en estos momentos libra en el Senado una batalla para conducir, como le corresponde, la sucesión en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, que quieren manipular ilegalmente las bancadas del PRI y del PAN.



La ceremonia culminó cuando, a las 22:45, Clara Brugada, líder del movimiento en Iztapalapa, dio el “grito de los libres”, invocando a Hidalgo, Allende, Aldama, la Corregidora, Morelos y Guerrero, antes de exaltar la lucha de las mujeres en el mundo y desear que “muera el mal gobierno”, para en seguida proclamar tres veces “¡viva México!” y tocar la campana colgada sobre el templete, mientras miles de gargantas coreaban, furiosas: “¡Clara sí, Juanito no; Clara sí, Juanito no!”, anunciando quizá la inminente rebelión que le aguarda a quien pretende usurpar la jefatura de la populosa delegación donde, como dijo una sabia reportera, “crucifican”.

Falla de Origen. Hernández.

Implacables los Moneros de La Jornada .

Basurero tóxico en Hidalgo-Fisgón                                     Otro desfile-Helguera


El pueblo congregado en el Zócalo secundó la arenga patriótica a unos 50 metros de distancia

Claudia Herrera y Mónica Mateos

Noche de Grito de Independencia. Cuestión de distancias, de paciencia. El Presidente arengó, adelantándose a 2010: “¡Viva el bicentenario de Independencia!”, “Viva el centenario de la Revolución”.

Y la respuesta de los cientos de personas congregadas en el Zócalo se escuchó más lejos que de costumbre, ya no a 20 o 30 metros del balcón. Ahora la gente fue puesta a unos 50 metros, detrás de anillos de vallas y de un juego tecnológico que ofrecería regocijo con luz y sonido, virtual y ostentosos en tiempos de ahorro.

Entre los dos escenarios que siempre se dan para celebrar el Grito –adentro y afuera de Palacio Nacional– también había otro tipo de distancia. Afuera la lluvia scaía pertinaz e impertinente. Por eso, 15 minutos antes de las 11 de la noche, hora fijada para la celebración del ritual, la gente silbaba y hasta abucheaba, como para que todo fuera más rápido. La paciencia también se empapa.

Adentro, los funcionarios que prometen y piden austeridad para el año del shock fiscal escuchaban la lluvia en las salas ambientadas al estilo bar lounge y degustaban selectos entremeses mexicanos y coctelería.

El presidente Felipe Calderón, acompañado por su esposa Margarita Zavala y sus tres hijos, estuvo 15 minutos en el balcón. Igual los integrantes de su gabinete, quienes debajo de los toldos de las ventanas que los protegían de las inclemencias se veían pequeños y difusos. Cuestión de distancias.

Entre los últimos en asomar por ahí estuvo el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, autor intelectual de la propuesta de alza de impuestos y de creación de nuevos gravámenes. El hombre pareció otear cauteloso el auditorio antes de mostrarse de lleno. Sobre el Zócalo se cernía una densa capa de humo pirotécnico, y a unos pasos de él (de Carstens) estaba el Presidente. Vio entonces que no había nada que temer e hizo una breve aparición.

El público había aguantado cuatro horas de aguacero y a un Adal Ramones que hasta el último momento se empeñó en resaltar la “unidad y no la división”. Impaciente, su auditorio respondió con un largo “no” cuando el comediante de Televisa les preguntó si querían otro monólogo.

La tolerancia de la gente fue puesta a prueba desde el momento que debieron pasar varios retenes para acudir al festejo en el Zócalo. A un año de las explosiones ocurridas en Morelia, entre el público se bromeaba con el tema y no faltó quien atribuyera el exceso de seguridad al nerviosismo del gobierno. “El miedo lo tienen ellos, nosotros no”, exclamó una mujer acompañada por su hijo de cuatro años, quien iba vestido de mariachi y no logró aproximarse más allá de la mitad de la plaza.
El que tuvo un lugar privilegiado en la verbena popular fue un grupo de jóvenes con impermeables azules y que al concluir la arenga presidencial trató de opacar la rechifla proveniente del fondo con gritos de “¡Fe-li-pe, Fe-li-pe!” y con algunas estrofas de la canción “México”, de Timbiriche.
Detrás de los muros de palacio había otras barreras que dividían a los que recibieron invitación y boleto personalizado. En la entrada a la Casa del Museo de Juárez estaba el bar y frente a la efigie del hombre que representa la austeridad se servían margaritas de tamarindo, güisqui o tequila. Ahí, el banquero Héctor Rangel Domene, ahora director de Nafin y antaño invitado de rigor a los salones de arriba, le tocó hacer horas de antesala, como otros funcionarios de nivel medio, antes que el Estado Mayor Presidencial les autorizara el acceso al patio central. Esto ocurrió después del Grito y cuando el gabinete ya había bajado de los balcones.

Protegido por un redondel en torno a la fuente de Pegaso, Calderón saludó a sus invitados, entre los que se mezclaban artistas, diputados y senadores panistas, y la plana mayor de la alta burocracia, que se apretujaba enfrente como para ser vista cuando se ciernen recortes de nómina.

Ya ubicado en su asiento, a un lado de su esposa Margarita Zavala, había una barrera más para acercarse al mandatario. Rodeado de vallas de tela departió con deportistas como la nadadora Galia Moss, el futbolista Efraín Juárez y el cantautor Alex Sintex. A unas mesas de distancia se hallaba el círculo selecto de Los Pinos y del gabinete, en el que cupo el cardenal Norberto Rivera, que platicaba entusiasmado con el empresario Olegario Vázquez Raña.


Cuando el Presidente dejó el Zócalo, las barreras de metal seguían ahí, ahora para el desfile. Cuestión de distancias. Cuestión de paciencia.

Astillero


El (verdadero) desfile militar
Camino libre a ChaCha
PGR vs madres en Ciudad Juárez
Julio Hernández López




El PRI ganó las pasadas elecciones mediante un río de dinero que superó la cartera y las maniobras igualmente fraudulentas del PAN-gobierno federal. Una parte importante de esos recursos económicos provinieron de las arcas de gobernadores que están haciendo equipo con Arturo Enrique Peña Montiel para llevarlo a Los Pinos, pero aún es desconocido el origen del grueso de los billetes con los que se movió esa impresionante estructura electoral defraudadora. Con el nuevo poder adquirido, el PRI parece estar en condiciones de presionar para que se “replanteen” los términos de la lucha contra el narcotráfico. Ayer, en Ciudad Juárez, el punto más rojo del mapa nacional de la materia, con un cuadro delictivo aun peor que cuando grandes contingentes del Ejército llegaron a la entidad, comenzó el verdadero desfile militar mediante un proceso de sustitución de soldados por cadetes municipales recién egresados de lo que pomposamente son llamadas “academias”. Luego de recibir “adiestramiento militar”, mil 182 policías noveles se harán cargo de tareas de seguridad pública que hasta ahora realizaban las fuerzas castrenses, mientras en la ciudad se ha producido otro asesinato múltiple (diez muertos) en un centro, sin registro oficial, de rehabilitación de adictos y, en las afueras de la delegación de la PGR, asesinaban a un agente federal y su acompañante.
De continuar esa paulatina reducción de la presencia militar en las plazas fuertes del narcotráfico se dará pie a preguntar si está en marcha un nuevo pacto entre cárteles y el nuevo poder priísta, que ahora condiciona y determina las acciones del damnificado de Los Pinos, y si acaso el muchísimo dinero que corrió por las tuberías electorales para dar un triunfo exagerado al PRI fue una inversión de grandes empresarios subterráneos para restituir viejas formas de tolerancia y entendimiento para que el negocio siga funcionando sin tanta sangre ni ruido.
Un ejemplo de los ¿nuevos? tiempos ha llegado del norte. Un juez federal de Estados Unidos dejó a Zhenli Ye Gon en capacidad de disponer libremente de fondos que le habían sido retenidos en función de un juicio en su contra que ahora va quedando en simple papeleo allá, aunque en espera de que se resuelva un turbio pedido de extradición que colocaría al empresario de origen oriental en tribunales mexicanos. El magistrado Emmet Sullivan desechó la posibilidad de que Los Pinos pudiera quedarse con los bienes y dinero ahora restituidos a Ye Gon pues, dijo, no compartió pruebas de lo que se acusaba a Zhenli: “México desairó a Estados Unidos”. Sospechosos desaires, al estilo de los expedientes de la PGR que llevan sembrados los errores procesales que luego los abogados de los narcotraficantes “encontrarán” y explotarán con éxito.
Paraísos judiciales que contrastan con lo sufrido por Jacinta Francisco Marcial, que ayer salió de la cárcel luego de tres años de estar acusada de secuestrar a agentes federales. La PGR rápidamente vistió las sucias prendas del oportunismo para tratar de demostrar su bondad y sentido de justicia al abstenerse de presentar pruebas acusatorias contra la otomí. Tal vez el “perdón” trate de suavizar socialmente el camino hacia el nombramiento de un comisionado del bufete del Jefe Diego (un abogado de apellidos Chávez Chávez) para que se encargue de la PGR, pues los panistas, un priísta y los mercenarios del Verde Ecologista han acordado sumar en el Senado los votos necesarios para su designación.
Por cierto, en Ciudad Juárez la delegación del PGR ha abierto averiguación previa contra familiares de mujeres asesinadas y activistas sociales que en días pasados pintaron cruces negras sobre fondo rosa en paredes de esa dependencia, como rechazo a la pretensión de nombrar al antedicho ChaCha como procurador federal. Ángel Torres Valadez, vocero de la citada delegación, a cargo de Héctor García Rodríguez, reconoció que los “daños” ocasionados por las pintas “no fueron significativos”, pero se decidió abrir un proceso judicial para “dejar un precedente y ya no se vuelvan a presentar esos disturbios”.
Y, ¿los Gritos? Bueno, todo fue felicidad en el interior de Palacio Nacional, y tanto la noche del 15, como la mañana del 16, el lic. Calderón estuvo perfectamente resguardado por el instrumental militar siempre sabido y, en la noche de fiesta, por miles de agentes y soldados vestidos de civil que así, con aire de público común y corriente, constituyeron una primera muralla de prevención en el Zócalo. López Obrador, por su parte, hizo un discurso reiterativo en el Hemiciclo a Juárez, con una presencia popular importante y un llamado a una voluntarista “campaña nacional de concien- tización” que contrarreste los engaños hechos por la mayoría de los medios de comunicación. Gómez Mont estuvo en Dolores Hidalgo y, hasta eso, no lanzó vivas al Jefe Diego ni al tráfico de influencias que les ha dado lana, y al siguiente día, al pie del Ángel de la Independencia continuó en la demagogia simplona. El precandidato Peña Montiel, por su parte, lució a la Gaviota Televisa en los actos patrios, mientras el veracruzano Fidel Herrera se hizo acompañar de Laura Bozzo, la peruana conductora de telebasura que ahora será “apoyada” por ese gobierno para que haga 12 programas de crímenes, infidelidades y escándalos sucios y “promueva” los logros del DIF de esa entidad.
En Monterrey, mientras tanto, crece la oposición a un “Plan de Desarrollo Urbano Metropolitano” que, entre otras cosas, contempla la construcción de un túnel en la Sierra Cerro de la Silla y en el Cerro de las Mitras. Las protestas también frenaron provisionalmente que el cabildo de la capital neoleonesa diera en comodato a Publimax y Televisión Azteca Noreste un parque público de más de 3 mil metros cuadrados para que ampliaran su estudio de grabación y lo usaran como espacio privado.
Y, mientras siguen las detonaciones menores, que parecen indicativas de tentaciones desestabilizadoras desde sótanos de poder, ¡hasta mañana, con Amalia peleando contra la palabra atentado!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx

¿Luz verde a Chávez Chávez…?


A Puerta Cerrada

Marcela Gómez Zalce





• Gritos y silencios
• El expediente Jacinta…
La ley, mi estimado, enreda al débil pero es rota por el fuerte. Con todo y el espectacular evento de luces, fuegos artificiales, pantallas de agua y de frívolos scripts televisivos sobre la alegría y el regocijado ánimo que envuelven a nuestras fiestas patrias, pareció que México se quedó sin grito en varias plazas del país y que la ciudad se quedó en casa entre la pertinaz lluvia y el monumental cerco de miedo, perdón, de seguridad que rodeó, como ya es costumbre, a Palacio Nacional en eventos donde asiste Felipe Calderón, quien se aventó la arenga celebrando de una vez el Bicentenario y el Centenario.
Y ya con el grito borrado de los pendientes presidenciales, my friend, se terminan los plazos para la luz verde a la propuesta de Los Pinos para ocupar el despacho de la PGR con Arturo Chávez Chávez, y que ha encontrado una serie de minas en el camino que ya traspasaron fronteras en el rubro de este sexenio que será, aunque no lo parezca, los derechos humanos.
Arturo trae una sugestiva sombra desde Chihuahua relacionada a su actuación como autoridad para esclarecer los feminicidios en Ciudad Juárez, y diversas organizaciones manifestaron ya su rechazo por la propuesta presidencial que desató (a los demonios) una amplia madriza que ya dejó heridas imborrables, descrédito y fragilidad institucional en quien aspira a ser el abogado de la nación (¿otro con minúsculas?) ante una ausencia del gymboree (ídem) en Los Pinos para arropar, manejar, operar y/o controlar la crisis mediática que desató el nombre del sucesor de Medina Mora… a quien le llovieron porras, reconocimientos y gratitudes por parte de Felipe, el día que finalmente (Genaro) le dio flit.
Y esto eleva una de las perplejidades de este (des)gobierno que cuando quiere proteger a alguno de sus disfuncionales en el gabinete hace uso y abuso del autismo, la autoridad y la impunidad, así que ¿por qué dejaron medio solito a Arturo…? O mejor aún, ¿por qué Gómez Mont le dio algunas palmaditas en la espalda comunicándole que con la pena compadre, pero esta batalla es toda tuya...? Sobre todo cuando se sabía de sobra el tamaño de los esqueletos en su clóset y no se meditó una estrategia preventiva, pues. Porque más allá del arreglón con el PRI y Beltrones para que dando y dando… subprocuraduría entregando, a Chávez Chávez lo dejaron abandonado a su suerte, y ahora que el agua está hasta el cuello por las malas señales deltiming de Los Pinos, mi estimado, es cuando comenzaron a operarse los caminos para su llegada a la PGR.
En los mismos donde perversamente corre la versión de que ya hay humo blanco con las lacritas tricolores para que se cuente con los votos estrictamente necesarios en Xicoténcatl para que pase como en la escuelita, de panzazo Arturito. Es decir, que el PRI apostará con su doble juego: abstenerse de votar con un grupo interesante de senadores y aprobar con los votos justos acompañado del sonsonete de los acuerdos, la responsabilidad, la justicia y bla, bla, bla… ¿me sigue?
Porque la curiosita filtración de que a Chávez le faltan siete votos —porque el partido farsante que habló de la pena de muerte ya sumó sus seis fichitas— que lo separan de la PGR devela jiribilla que este arroz ya se coció.
Lástima que, de ser cierta la luz verde, el nuevo procurador ganando, llegue perdiendo. Porque aterriza con el fracaso de haber sucumbido en la batalla doméstica. La misma que frente al grupúsculo en el poder (del no poder) debería darle fortaleza, credibilidad, entereza y respeto para enfrentar al enemigo que duerme (everywhere)… en casa. La misma que le daría un amplio margen de maniobra para salir oliendo a rosas en un mar de estiércol.
Pero no.
Felipe Calderón y su (des)gobierno tendrán al procurador que merecen. Al hombre sin consensos, figura cuestionada, acotada, sumisa, vulnerable y frágil que no cuenta con la aprobación de partidos de oposición, de diversos sectores, incluyendo importantes organismos internacionales. Y si le suma el constante y perenne hábito de la PANdilla de politizar la justicia y judicializar la política, my friend, se está sembrando otro núcleo más de una crisis para la tormenta perfecta…
Por la mirilla
Y como botón de que la PGR es utilizada para armar expedientes a la medida de los oscuros intereses, en este caso de los otrora célebres mAFIosos, ahí tiene el abominable caso de Jacinta, la indígena otomí acusada de plagiar a seis elementos y por lo cual pasó tres años en la cárcel.
Retomando al clásico: No tienen madre.
gomezalce@aol.com

Mil millones de hambrientos, pero lo peor ya pasó, dicen

México SA


Carlos Fernández-Vega
Muy atareados andan los voceros oficiales y oficiosos –no sólo aquí, sino en la mayor parte del orbe– en su intento por convencer a propios y extraños de que lo peor de la crisis ya pasó”, y que de aquí a unas cuantas semanas los habitantes de este sacrificado planeta volverán a sonreír como –según ellos– lo hacía la humanidad antes del “catarrito” generalizado. Sin embargo, salvo ellos, pocos podrán sentirse felices tras los resultados de tan contundente “resfrío”, que se suman a los de zarandeadas anteriores.

“Retomar la senda del crecimiento”, como asegura la versión oficial, equivale a dejar las cosas tal cual estaban antes del estallido de la crisis, en espera de la siguiente; es reproducir las condiciones que llevaron al “catarrito” masivo. De hecho ni siquiera los reportes del siempre optimista Banco Mundial (Informe sobre el desarrollo mundial 2010; desarrollo y cambio climático) permiten esbozar siquiera una leve sonrisa ahora que “lo peor ya pasó”, pues el organismo advierte que “por primera vez en la historia, este año se ha superado el umbral de los mil millones de personas hambrientas. Cuando son todavía tantos los que viven en la pobreza y sufren hambre, el crecimiento y la mitigación de la pobreza continúan siendo la prioridad dominante para los países en desarrollo”.

¿Debe el planeta retomar las políticas que condujeron al estallido de la crisis como si nada hubiera sucedido? El propio Banco Mundial, uno de los entusiastas promotores de tales políticas, nos obsequia un rápido recorrido que, sin desearlo, da respuesta a la “duda”: una cuarta parte de la población de los países en desarrollo continúa viviendo con menos de 1.25 dólares al día; mil millones de personas carecen de agua potable, mil 600 millones de electricidad y 3 mil millones de servicios de saneamiento adecuados. La cuarta parte de todos los niños de países en desarrollo están malnutridos. “Hacer frente a estas necesidades debe seguir siendo la prioridad tanto para los países en desarrollo como para las entidades que prestan ayuda para el desarrollo, en vista de que el progreso se volverá más arduo y no más fácil”, aunque lo atribuye a los efectos del cambio climático.

A la devastación social provocada por las políticas neoliberales (no reconocida abiertamente por el Banco Mundial) hay que sumar los efectos del cambio climático, que “amenazan al mundo entero, pero los países en desarrollo son los más vulnerables. Según las estimaciones, soportarán aproximadamente entre 75 y 80 por ciento del costo de los daños provocados por la variación del clima. Incluso un calentamiento de 2 grados centígrados por encima de las temperaturas pre industriales –probablemente lo mínimo que padecerá el planeta– podría generar en África y Asia meridional una reducción permanente del producto interno bruto de entre 4 y 5 por ciento. La mayor parte de los países en desarrollo carecen de la capacidad financiera y técnica suficiente para manejar el creciente riesgo climático. Asimismo, dependen en forma más directa de recursos naturales sensibles al clima para generar sus ingresos y su bienestar. Además, la mayoría se ubica en regiones tropicales y subtropicales ya sujetas a un clima sumamente variable”.
Ahora que “lo peor ya pasó”, el Banco Mundial subraya que “es improbable que el crecimiento económico por sí solo sea lo suficientemente rápido o equitativo para contrarrestar las amenazas derivadas del cambio climático, en particular si continúa el elevado nivel de intensidad del carbono y se acelera el calentamiento mundial. En consecuencia, la política climática no puede presentarse como una opción entre crecimiento y cambio climático. De hecho, las políticas climáticas inteligentes son las que propician el desarrollo, reducen la vulnerabilidad y permiten financiar la transición hacia caminos con niveles más bajos de emisión de carbono. El crecimiento es condición necesaria, pero no suficiente, para lograr mayor capacidad de resistencia. El crecimiento económico es necesario para reducir la pobreza y es la base para lograr mayor capacidad de resistencia al cambio climático en los países pobres. Pero, por sí solo, no es la respuesta al cambio climático. No es probable que el crecimiento sea lo bastante rápido para ayudar a los países más pobres, y puede aumentar la vulnerabilidad a los riesgos climáticos. El crecimiento tampoco suele ser lo bastante equitativo para ofrecer protección a los más pobres y más vulnerables”.

Los países más ricos tienen más recursos para hacer frente a los impactos del clima, y las poblaciones con mejor nivel de instrucción y de salud tienen, por naturaleza, mayor capacidad de resistencia, apunta el organismo, “pero el proceso de crecimiento puede exacerbar la vulnerabilidad al cambio climático, como ocurre, por ejemplo, en el caso de la extracción cada vez mayor de agua para la agricultura, la industria y el consumo… No es probable que el crecimiento sea lo bastante rápido como para que los países de ingreso bajo puedan permitirse el tipo de protección con que cuentan los países ricos”.

En América Latina y el Caribe la crisis arrasó y, por si fuera poco, los ecosistemas más importantes están amenazados. “En primer lugar, se prevé la desaparición de los glaciares tropicales de los Andes, lo que modificaría el calendario y la intensidad del agua a disposición de varios países y provocaría estrés hídrico por falta de agua al menos a 77 millones de personas ya en el año 2020, así como una amenaza para la energía hidroeléctrica, fuente de más de la mitad de la electricidad en muchos países de América del Sur. En segundo lugar, el calentamiento y la acidificación de los océanos darán lugar a episodios frecuentes de blanqueamiento y posible extinción progresiva de los arrecifes de coral en el Caribe, que cuentan con los criaderos de aproximadamente 65 por ciento de todas las especies ictícolas de la cuenca, ofrecen protección natural frente a las mareas de tormenta y son un activo fundamental para el turismo. En tercer lugar, los daños en los humedales del Golfo de México harán que esta costa sea más vulnerable a los huracanes más intensos y más frecuentes. En cuarto lugar, el impacto más desastroso podría ser la extinción dramática del bosque amazónico y la transformación de grandes extensiones en sabana, con graves consecuencias para el clima de la región, y quizá de todo el mundo”.

Las rebanadas del pastel

¡Felicidades!, porque “lo peor ya pasó”.

cfvmexico_sa@hotmail.com • mexicosa@infinitum.com.mx

Tiempos perdidos

Adolfo Sánchez Rebolledo
Los discursos de los secretarios de Hacienda (de éste, al menos) son temibles, sobre todo en tiempos de crisis como los actuales. Siempre se las arreglan para fomentar la sensación de que lo peor está por venir”. En vez de dar seguridad, confianza en que si se hace un esfuerzo equilibrado y sobre todo justo saldremos adelante, prefieren el golpe seco de las malas noticias para concluir con una ronda retórica de saludos a la bandera y las consabidas promesas de que habrá, si Dios lo quiere, un futuro brillante al cabo de la tormenta. ¡Que distintos sonaban esas proclamas en épocas de bonanza petrolera cuando los jefes de las finanzas públicas distribuían el pastel como si éste fuera eterno y sin guardar para los tiempos duros algunos ahorros! Junto con las grandes reservas del subsuelo, gracias a la ineficiencia y el despilfarro irresponsable, los ingresos declinaron bajo la chata consigna de gastar mucho con vistas a conservar y reproducir sin cambios mayores el poder en la república feudalizada, aunque se profundizaran los abismos sociales entre los mexicanos. No hubo planes a largo plazo. Tampoco se realizaron las inversiones requeridas, aunque algunos vivos se fortalecieron durante la danza sexenal de la oligarquía. El crecimiento, esa utopía de las nuevas generaciones, se quedó en eso, mientras la desigualdad hizo lo suyo, cercenando esperanzas y posibilidades de progreso. A querer o no, los boquetes en salud, las deficiencias educativas, la corrupción, la inseguridad, nos hacen un país más frágil y, por ello, menos soberano. Visto en perspectiva, la ilusión de la modernidad ha sido de algún modo un mal sueño: en vez de concretarse en una idea capaz de organizar el presente para ganar el futuro se impuso la imitación servil, la calca ciega de las recetas importadas y en un lugar de impulsar una visión de Estado se favoreció el egoísmo particular de los intereses privados.

El estallido de la crisis afectó en muy poco la línea del gobierno, como si aquí no pasara nada. En vez de pensar seriamente en la reforma fiscal que el país requiere, el gobierno, por boca del secretario de Hacienda, ofrece parches, como ese esperpento al que indignamente se denomina “impuesto contra la pobreza”, cuando no es más que una exacción generalizada que no se atreve a decir su nombre, pero a la cual se le concede el poder mágico de hacer que cada peso recaudado se convierta en 10 para los “que menos tienen”, según reza el eufemismo con que los altos burócratas acaban de invisibilizar por completo a los pobres de la tierra.

No hay, por desgracia, una estrategia contra la crisis, pues el paquete fiscal no es más que una forma de saciar la sed de recursos que el gobierno requiere para seguir como hasta ahora. De nuevo, el inmediatismo se impone como sustento de la improvisación nacional: gastar y recortar, ha eso se reduce la sabiduría económica oficial. Pero hay algo más, pues si las cifras anunciadas revelan la ausencia de imaginación, su timidez bien portada ante ya no se sabe quién, también denotan la falta de respeto que les merecen sus efectos. ¿Cómo un gobierno preocupado por el bien común puede anunciar en frío el despido de 10 mil personas de la burocracia sin vislumbrar algunas opciones menos lesivas? Eso, al señor Carstens no le interesa ya que detrás de cada puesto de trabajo sólo ve números, no personas, pues cree que “no podemos –cito literalmente– pretender vivir en una ficción en la que se le exija al gobierno reducir su tamaño sin que haya pérdida de empleos”. Vaya paradoja: el autodenominado gobierno del empleo carece de otras opciones que no sean las de despedir a la gente, macheteando secretarías enteras sin antes someterlas a un ajuste racional. Y así en otras materias. En el fondo, dicho sea con las palabras del economista Ciro Murayama, el gobierno no sabe “distinguir entre empresas y empresarios, entre productores en apuros o entre personas adineradas. (En el paquete presupuestario) pudo bien preverse un aumento en las tasas más altas que se cobran a las personas físicas –los ricos pues– y a las empresas, dejando a éstas sin presiones adicionales ahora que, de por sí, les va mal”. Pero esas sutilezas no encajan con la visión tecnocrática y deshumanizada sostenida por los expertos de Hacienda, como tampoco puede sorprender la pretensión machista de reducir las partidas cruzadas por una perspectiva de género, como hizo notar una diputada.
Si alguien creyó que el decálogo presidencial del 2 de septiembre significaba una rectificación del rumbo, hoy, a la vista del paquete fiscal, sabe que fuera de la privatización y la reforma laboral mutiladora de los derechos colectivos, los gobiernos panistas asumen como si fueran nuevas y originales las propuestas que otros van desechando a la basura, como pasa con la prohibición de aumentar el déficit por encima del ridículo medio punto que el gobierno ha convertido en dogma. Así, mientras en el mundo capitalista desarrollado se ensayan medidas heterodoxas para hacer funcionar la economía y minimizar los efectos socialmente catastróficos del desempleo, en México, la autoridad hacendaria se empeña en ganar la medalla de buena conducta en la aplicación del catecismo económico, tan tardía y dificultosamente aprendido.

Consorcios no cubrirán al fisco $465 mil millones


Eliminar regímenes especiales daría miles de millones al gobierno: Carstens
“No otorgamos beneficios fiscales”, asegura

Enrique Méndez y Roberto Garduño

El secretario de Hacienda, Agustín Carstens, aceptó que la Cámara de Diputados modifique los regímenes fiscales especiales como alternativa en la recaudación de impuestos. Reconoció que estos beneficios le permitirán a las grandes empresas no pagar este año 465 mil millones de pesos, equivalentes a 3.87 por ciento del PIB.

“No tenemos ningún problema pero, obviamente, las decisiones no son fáciles, exigen determinaciones difíciles. Definitivamente no estamos protegiendo intereses ni otorgando privilegios fiscales, así que es un tema que valdría mucho la pena analizar y dilucidar”, dijo ante la presión que, en su comparecencia el martes, ejercieron diputados de PRI, PRD, PT y Convergencia.

Novel en el formato que lo obligó a responder bajo protesta de decir verdad, Carstens juró tres veces: primero, de espaldas al pleno y frente al presidente de la mesa directiva, ante los gritos de los diputados; entre risas, se dio la vuelta y levantó la mano izquierda. “¡Con esa no!”, le gritaron, y finalmente lo hizo con la derecha.

Una vez hecho el compromiso, durante casi seis horas y aún con el rechazo de todas las bancadas –excepto el PAN– a nuevos gravámenes, Carstens defendió el paquete económico presentado por él la semana anterior, que incluye el cobro de 2 por ciento de IVA en alimentos, medicinas y en el consumo de todos los bienes y servicios, así como el 4 por ciento adicional en telecomunicaciones. Y declaró que no se le puede pedir al gobierno ajustar su gasto sin que se despida a burócratas.

“No queremos cobrar impuestos a los pobres, sino usar la capacidad del Estado para redistribuir los recursos a favor de ellos. Tiene un objetivo genuino”, aseguró. Sin embargo, admitió que la intención del paquete es cubrir el hoyo fiscal por la caída en ingresos por venta de petróleo y terminar con “la volatilidad” en los recursos que se destinan al gasto social.

En ese punto de su discurso, diputados del PRD desplegaron una manta en la que se leía: “No al 2 por ciento de IVA en alimentos y medicinas”. Ante los reclamos y críticas de la oposición, Carstens aseguró que la cascada de impuestos será regresiva en el ingreso. “Por cada peso que llegue a pagar una persona recibirá a cambio ¡cerca de diez pesos por el otro lado! Difícilmente se puede encontrar un ejercicio más redistributivo”. Incluso afirmó que el gobierno federal tiene encuestas donde “una inmensa mayoría de mexicanos está dispuesta a pagar una contribución adicional que se destine a combatir la pobreza”.

Para remarcar que los ingresos por el impuesto adicional de 2 por ciento se utilizarán en el combate a la pobreza, ofreció que esos recursos estarían “sujetos a un estricto control y al más acucioso escrutinio público. Todo lo que sea preciso para dejar en claro que no tienen otra finalidad. Estaríamos más que felices que la Cámara garantice que esta contribución se destine con los menores costos de transacción” a ese fin.

Desde su perspectiva, con el nuevo tributo se le daría “peso, sustancia y se aislaría la vulnerabilidad y volatilidad de los ingresos públicos al combate a la pobreza”.

Respecto del sector telecomunicaciones, dijo que si bien aún necesita impulso para su crecimiento, “tiene capacidad de aguantar una carga tributaria (la cuota de 4 por ciento) y no será un inhibidor a su crecimiento, dada la demanda inelástica que tiene y dada la tasa baja que se propone”.

Argumentó que la imposición de nuevas cargas tributarias constituye una decisión difícil, pero que no hay otra alternativa para cubrir la caída en la recaudación por ingresos petroleros. “Hemos vivido adictos al petróleo y evadiendo decisiones importantes sobre cómo darle recursos al Estado para llegar a cabo sus funciones”, sostuvo.

“Cuando hay recursos, hay recursos; cuando no los hay, no los hay. El momento de tomar acciones para reponer la falta de ingresos por la vía petrolera ya llegó. Estamos en una verdadera situación de crisis en la que se evita recurrir al espejismo de que pueden obtenerse beneficios sin hacer esfuerzos.”

El gobierno, dijo, hará el suyo al recortar el gasto en las dependencias federales y despedir 10 mil empleados. “Es algo que lamento mucho, pero no podemos pretender vivir en una ficción en la que se le exija al gobierno reducir su tamaño sin que haya pérdida de empleos”, señaló.
Van a aniquilar a la clase media, replica el PRI

Roberto Garduño y Enrique Méndez

En la tribuna de la Cámara de Diputados la mayoría opositora rechazó la aplicación de la tasa del 2 por ciento al consumo de la población, porque aceptarlo implicaría un mayor deterioro del tejido social en México.

Ante el aluvión de críticas al proyecto de paquete económico del Ejecutivo, Agustín Carstens, secretario de Hacienda, escuchaba dubitativo y daba por aceptada la propuesta del PRI de crear una comisión especial encargada de analizar –y en su caso echar abajo– los regímenes especiales. Éstos implican gastos fiscales por casi 500 mil millones de pesos, en beneficio de las grandes empresas.

Sebastián Lerdo de Tejada, del tricolor, acusó al gobierno panista de proponerse aniquilar a las clases medias y castigar aún más a las populares. “Pero no nos propone un ajuste real a la alta burocracia que creció de manera desproporcionada”, dijo.

Entre las iniquidades, Lerdo de Tejada –cercano a Beatriz Paredes– reprochó a la administración federal la propuesta del 2 por ciento al consumo. Mordaz, y en medio de las rechiflas de la bancada panista, punzó contra Felipe Calderón al recordarle a Carstens que al panismo en el gobierno se le agota el tiempo. “Dice usted que enfrentan la crisis de otra manera porque nuestro país es diferente. Tiene razón; los gobiernos de otras latitudes piensan en su gente, el de Calderón, además de chiflar, piensa en los mercados y en las agencias calificadoras. Es obvio, el cambio tendrá que llegar. ¡Falta poco! El Congreso hará su parte y ordenaremos las prioridades de ingreso y gasto. La elección del 5 de julio fue clara: la gente confía más en nosotros que en el Presidente y su partido”.

Pedro Jiménez (Convergencia) cerró el paso al impuesto del 2 por ciento. “Coincidimos con todos aquellos que lo ven como un IVA con antifaz. Nuestra apreciación es que se trata de un gravamen al consumo, técnicamente regresivo, porque afecta a la población de más bajos ingresos que, recordemos, la cifra es superior a los 50 millones de mexicanos que, enfrentando algún tipo de pobreza, se verían agraviados y sangrados con esta medida”.

Hasta uno de los aliados del gobierno panista, el partido Nueva Alianza –ideado por Elba Esther Gordillo–, a través de Reyes Tamez, dijo: “Lo más preocupante es que las decisiones que se están tomando para enfrentar la crisis no están funcionando. Nuestra economía muestra una incapacidad estructural para crear empleos bien remunerados, generando una desastrosa combinación de desempleo y bajas remuneraciones. Es preocupante que aun en el contexto de la crisis, el principal objetivo del Ejecutivo sea el de consolidar los ingresos por la vía de incrementar los impuestos”.

A su vez, Juan José Guerra Abud (PVEM) criticó la iniciativa de ley de ingresos, porque “es una propuesta neta y exclusivamente recaudatoria que aprieta aún más a los causantes cautivos al subirles el impuesto sobre la renta; que pretende un incremento al IVA y su aplicación del 2 por ciento a alimentos y medicinas, y que ingenuamente se ha disfrazado como una medida de combate a la pobreza pero que, estamos convencidos, la incrementará”.

Alberto Cano Vélez (PRI) expresó: “Que nadie se llame a engaño. La llamada ‘contribución para el combate a la pobreza’ es un impuesto al consumo. Funciona como IVA, grava como IVA y lastima como IVA. Llámenle como les guste, eso es IVA. ¡Ese IVA es un albazo impositivo!”

En defensa de la postura gubernamental, la diputada Ruth Esperanza Lugo (PAN) llamó a la cohesión nacional porque ésta podrá derivar, arguyó, en el equilibrio y la solidez en el país. “Acción Nacional les convoca a que trabajemos juntos por el país, porque no hay más ni mejor razón para conjuntar esfuerzos y abrir el diálogo que trabajar por México”.

Para Guadalupe Acosta Naranjo (PRD), el problema de fondo es el tamaño de la evasión fiscal y los enormes montos de recursos que la administración federal deja de recaudar. “Si somos capaces de tener el conocimiento de esta información podremos analizar cuál es la ruta que debe seguir este Congreso: aumentar el 2 por ciento en IVA a alimentos y medicinas o mejorar la recaudación fiscal que el Estado mexicano no ha realizado adecuadamente”.

Rechazó 100 millones...pero no 101...

Por esto no queremos a los chuchos :

Autoridad justifica matanza en Juárez

No hay muertos malos o buenos”, aclara visitador de Derechos Humanos

El Universal
Jueves 17 de septiembre de 2009
estados@eluniversal.com.mx

CIUDAD JUÁREZ, Chih.— El gobernador de Chihuahua y el alcalde de Ciudad Juárez marcaron distancia y justificaron el asesinato colectivo de 10 personas en un centro de rehabilitación para adictos a las drogas, al reducir el hecho a un incidente más en la guerra entre bandas rivales de narcotraficantes.

El mandatario estatal, José Reyes Baeza Terrazas, aseguró sobre la masacre en el centro Anexo de Vida que “no es una casualidad, hay una motivación: todo se da en la guerra entre diferentes criminales. Hay personas adictas en los centros que pertenecen a uno u otro grupo”.

En forma coincidente, el alcalde José Reyes Ferriz dijo que el multiasesinato de adictos y otras 10 ejecuciones registradas en las últimas horas son atribuibles a los enfrentamientos que sostienen grupos rivales de narcotraficantes que se disputan el control de la plaza.

Sin embargo, para Gustavo de la Rosa Hickerson, visitador en Ciudad Juárez de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, la postura que asumen los gobiernos estatal y municipal respecto a la masacre es cuestionable, “porque no se trata de decir que los muertos tienen la culpa por estarse vinculando al crimen organizado”.

Tajante, subrayó que el papel de la autoridad no es discriminar entre buenos muertos y malos muertos ya que hacerlo revela un “profundo desprecio” por quienes han caído en la drogadicción.

Recordó que en su oportunidad Arturo Chávez Chávez, cuando estuvo en la Procuraduría estatal, dijo que “los culpables de perder la vida son las víctimas”.

En tanto, la procuradora estatal de Justicia, Patricia González Rodríguez, y el subprocurador en la zona norte, Alejandro Pariente Núñez, informaron que en el centro murieron 10 personas, una de ellas mujer, y dos individuos más resultaron heridos.

La funcionaria detalló que no todas las víctimas tienen relación con grupos criminales, aunque se ha encontrado que sí tenían antecedentes penales.

Por su parte, Óscar Villalobos Chávez, secretario de Fomento Social, dijo que se intensificó la revisión de los centros de rehabilitación para adictos, porque no todos cumplen con la norma para operar. De los 62 lugares que hay en la ciudad, se han verificado 32 y cerrado nueve por no garantizar protocolos mínimos de seguridad y una atención profesional.

¿ Quién cogobierna a México ?

La deuda del PAN con la cultura

CARLOS LARA
El Partido Acción Nacional llega a sus 70 años de vida con la propuesta legislativa más pobre de su historia en materia de cultura: En tan sólo cinco líneas expresa una deshilvanada iniciativa sin diagnóstico ni análisis.
Y es que la deuda que el partido fundado por Manuel Gómez Morín y otros intelectuales tiene con la cultura se debe en parte al desánimo de sus militantes por desarrollar esta actividad, por el desinterés de la propia institución por fomentarla y, como tercer factor, al abandono del partido de sus mejores talentos a lo largo de su historia, por motivos de carácter ideológico.
Las mentes más brillantes terminaron realizando una labor intelectual destacada –generalmente en el campo de las letras– fuera del PAN. Fue el caso de la generación incómoda expulsada en los años sesenta, integrada por Hugo Gutiérrez Vega, Manuel Rodríguez Lapuente, los hermanos Ignacio y Carlos Arriola y Alejandro Avilés.
Otros optaron por renunciar, como el artífice de la reproyección de principios de doctrina de 1965, Efraín González Morfín; el historiador del PAN y padre del actual presidente de México, Luis Calderón Vega; y quien redimensionara e internacionalizara al partido –además de dotarlo de sus actuales fundaciones de estudio y análisis–, Carlos Castillo Peraza. Y recientemente, el destacado parlamentario y sociólogo José Francisco Paoli Bolio, quien el pasado 20 de agosto envió su renuncia al Comité Ejecutivo Nacional del PAN.
La propuesta legislativa del PAN (2009-2012) en materia de cultura, titulada “Promovemos la cultura y el arte”, plantea en tan sólo cinco líneas favorecer, apoyar e incentivar a los creadores artísticos a través de una “Ley de Fomento al Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural para que mediante mecanismos fiscales y mecenazgos se apoye con recursos públicos y privados a los artistas, creadores e investigadores”.
Una propuesta así debería incluirse en una ley general de cultura, o bien en la actual Ley del ISR. Más aún: Olvida el PAN que ya en otras legislaturas ha propuesto el tema del mecenazgo por separado (véase la plataforma legislativa 1994-1997), en la que propuso un proyecto de ley de mecenazgo y fundaciones, a fin de que la sociedad civil impulse la creación cultural a través de bonificaciones fiscales. Un proyecto que finalmente fue dese­chado antes de ser presentado al pleno del Congreso. Su propuesta de “Ley de Fomento al Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural con mecanismos fiscales y mecenazgo” no precisa su característica de ley federal; no dice qué pasaría con la actual Ley sobre Monumentos, y evade el tema relativo a los “mecanismos fiscales” (hay que recordar que el IETU, promovido y aprobado por el mismo partido, desaparece los regímenes especiales y exenciones fiscales). Si este impuesto se queda como único, el apoyo a la creación que se pretende será imposible.
Todo lo anterior resulta lamentable, teniendo en cuenta que el PAN lleva 30 años presentado plataformas legislativas. La intención de Castillo Peraza en 1979, al elaborar la primera de ellas, era precisamente mostrar un diagnóstico, un análisis y una propuesta al electorado.
La gestión cultural de Gómez Morín
Existe la creencia de que el PAN no estableció desde su fundación iniciativas de carácter cultural, pero Gómez Morín fundó y colaboró estrechamente en proyectos que siguen teniendo vigencia. Una de las gestiones culturales más importantes y menos conocida es el impulso de las primeras giras de la Orquesta Sinfónica de México (OSM) de Carlos Chávez.
Lo hizo como parte de su anhelada descentralización cultural en 1937, esto es, antes incluso que la organización del PAN (1939). La red de promotores que conformó en el país para impulsar la OSM se integró con destacados miembros fundadores de la naciente estructura del PAN. En Guadalajara, por ejemplo, se apoyó en los abogados Efraín y Víctor González Luna; en Monterrey, en José G. Martínez y Bernardo Elosúa Frías; en Querétaro, con Luis Álvarez y Carlos Septién García; en Michoacán, con Miguel Estrada Iturbide y Miguel Bernal Jiménez; en San Luis Potosí, con Isaac Guzmán Valdivia; en Tampico, con Samuel Melo Ostos, y en Torreón, con Salvador de Lara y Domingo Valdez Villarreal.
Resulta lamentable que ni los propios panistas ahora sepan que antes de fundar el partido, Gómez Morín había echado a andar la primera organización musical del país. Un desconocimiento sobre la labor cultural del PAN comparable a otro en la actualidad: muchos panistas desconocen que el recientemente legislado derecho de acceso a la cultura en México fue planteado ya por Adolfo Christlieb Ibarrola en los años setenta y retomado por Castillo Peraza –cuyo noveno aniversario de muerte se cumplió el pasado miércoles 9– en la primera plataforma legislativa del PAN en 1979.
La “generación Mexicanto”
Existe una generación denominada por Castillo Peraza la generación tardía, la que no llegó en su tiempo, al mando de Manuel Clou­thier y con Francisco Barrio y Vicente Fox.
Esa generación cubrió en cierta forma el enorme hueco que dejó la generación incómoda. Esta generación fue duramente atacada bajo el mote de “neopanistas” por sus ideas pragmáticas, aunque pese a todo siguió adelante hasta conquistar el poder.
La salida del PAN de la generación incómoda abrió una profunda grieta que vinieron a revestir grupos ajenos a la doctrina del partido. La salida de esta brillante cantera hizo al PAN presa fácil de diversos grupos empresariales con intereses ajenos a su doctrina, pues se fueron quienes pudieron apuntalar un proyecto cultural dentro del partido. Esto tiene un antecedente memorable: el de José Vasconcelos, el único hombre que ha sido capaz de desarrollar una política cultural en el país. De esto da cuenta Emmanuel Carballo en Protagonistas de la literatura mexicana (1994); al preguntar a Vasconcelos sobre su distanciamiento con el PAN, éste respondió: “los fifís de la política nunca me quisieron, es más, me echaron de la oposición”.
La cultura está tan mal concebida en el PAN, que en una de las entregas del periodista Álvaro Delgado a este semanario, el entonces presidente del PAN, Manuel Espino, manifestó que existe un “consejo nacional de intelectuales”, refiriéndose a lo que en realidad es el Consejo de Cultura, integrado en su mayoría por personajes del espectáculo y de la farándula, como Maribel Fernández La Pelangocha, Isabel Martínez La Tarabilla, Pompín Iglesias, Evita Muñoz Chachita, Irma Lozano y el mago Ednovi.
Llama la atención el caso del compositor David Filio –compañero de bohemia del actual presidente de la nación–, pues ha sido el inspirador de la que podríamos llamar la generación Mexicanto, puesto que la música de este virtuoso dueto amenizaba los encuentros de la Secretaría Juvenil del partido, cuando Felipe Calderón era su jefe juvenil nacional. Pertenecerían a ella el actual presidente del partido, César Nava; su antecesor, Germán Martínez; el subsecretario de Energía, Jordi Herrera; la exdiputada federal Karla Rochín; el exsecretario general José Espina; los exdiputados Cristian Castaño y Tarsicio Rodríguez; y por supuesto, Margarita Zavala.

Pero el presente y el futuro de la cultura en el PAN deben construirse más allá de una generación inspirada en Mexicanto y en el elenco de su Consejo de Cultura. Se deberían recuperar de la memoria histórica los mejores referentes.
Nadie puede desarrollar lo que no ha concebido. En esa condición llega el PAN a sus 70 años en materia de cultura. De continuar así después de este aniversario reflexivo, esta vez, como dijera Castillo Peraza, “recordar no será volver a vivir, sino comenzar a morir de nuevo”. l

* Militante del PAN y asesor cultural en la Cámara de Diputados.

Calderón ignora rechazo a su plan económico y disfruta en familia el desfile militar

DANIEL LIZáRRAGA
MÉXICO, D.F., 16 de septiembre (apro).- El presidente Felipe Calderón y su gabinete disfrutaron este día, junto con sus familias, el desfile militar conmemorativo del 199 aniversario del inicio de la Independencia de México, y dejaron a un lado la defensa de la propuesta económica presentada en San Lázaro, donde los diputados opositores rechazaron ayer el aumento a los impuestos al consumo.

En la residencia oficial de Los Pinos y en el palacio de Bucareli, sede de la Secretaría de Gobernación, sus ocupantes se despertaron esta mañana con la novedad de que el PRI, PRD, PT, Convergencia y Nueva Alianza encararon el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, para asegurarle que no aprobarán nuevos gravámenes ni recortes en salud, educación y participaciones a estados y municipios.

Hoy, en la ceremonia previa al desfile militar, que se realizó en el Ángel de la Independencia, Calderón designó al secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, como único orador.

En su discurso, Gómez Mont no hizo referencia alguna al revés propinado al gobierno por la mayoría de legisladores en la Cámara de Diputados, pero convocó a "encontrar coincidencias" y a "asumir los costos que implica la transformación del país".

A la ceremonia de este miércoles, así como a la fiesta del Grito de Independencia en el Zócalo, la noche de ayer, no asistió uno solo de los diputados ni coordinadores legislativos que detuvieron en seco la intención del gobierno federal de aumentar 2% a los impuestos al consumo y servicios.

En cambio, en la mesa de honor estuvieron el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Guillermo Ortiz Mayagoitia; el presidente de la Mesa Directiva en San Lázaro, el panista Francisco Ramírez Acuña, y el presidente de la Mesa Directiva en el Senado, el perredista, Carlos Navarrete.

Frente a ellos, Gómez Mont dijo que este es el momento de "ser congruentes" con la responsabilidad de seguir el futuro y así "llegar a acuerdos que nos permitan tomar acciones necesarias para la consolidación de prosperidad, de equidad y de oportunidad para todos". Sobre el naufragio de la propuesta económica del gobierno, ni una sola palabra.

Cuando Gómez Mont terminó su discurso, Felipe Calderón y su gabinete montaron una guardia de honor en el Ángel de la Independencia, en medio de un silencio tan frío como sepulcral, pues a lo lejos no hubo ciudadanos que saludaran o gritaran vivas a los miembros del gobierno calderonista.

Ya instalados en Palacio Nacional, el Estado Mayor Presidencial giró órdenes para que los reporteros de la fuente presidencial no tuvieran acceso a los pasillos ni a los balcones, donde Calderón y su gabinete se acomodaron para disfrutar el desfile militar.

Los reporteros, en tanto, fueron llevados a una nueva sala de prensa con pantallas de televisión, desde donde atestiguaron el paso de los soldados y marinos. El acceso a los pasillos de Palacio Nacional fue imposible.

Mientras, en el balcón principal de Palacio Nacional, con el pecho levantado y saludando a los cadetes con la mano izquierda, Felipe Calderón entonaba, a todo pulmón, el himno del Colegio Militar. Lo mismo hizo el secretario de la Defensa, Guillermo Galván.

Al término del desfile, el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, fue sacado sin ser visto para evadir a los reporteros apostados en la escalera principal de Palacio Nacional. Nadie pudo conocer la respuesta del secretario en torno del naufragio del plan económico.

Silban a Calderón durante el concierto "Fiesta Mexicana"

JUDITH AMADOR TELLO
MÉXICO, D.F., 16 de septiembre (apro).- Ni los aplausos ni la voz del tenor Fernando de la Mora ni el ambiente festivo en el Auditorio Nacional, previo al "Grito" en la Plaza de la Constitución, impidieron que se escuchara una sonora rechifla al presidente Felipe Calderón cuando el concertista mexicano mencionó el nombre de Felipe Calderón, casi al término de su presentación, en el concierto Fiesta Mexicana, con la Orquesta Filarmónica de la UNAM (Ofunam).

De la Mora fue la voz en el concierto que ofreció anoche la Ofunam, bajo la dirección de Juan Carlos Lómonaco.

Aunque el auditorio lució semivacío y, por momentos, privó la solemnidad, los asistentes salieron satisfechos del concierto que inició con el Himno Nacional y continuó con un popurrí de música tradicional, en el que se interpretaron temas como La Adelita.

Vino luego Chapultec (Obertura republicana), de Carlos Chávez; Cinco danzas cubanas (La Siete, Serenata melódica, Viejos recuerdos, Triste amor y Ayer y hoy), de Mario Ruiz Armengol, orquestada por Arturo Márquez, por encargo de la Dirección General de Música de la UNAM, y Janitzio, de Silvestre Revueltas. Cerró esta primera parte Danzón no. 2, del propio Márquez, que sin duda forma parte ya de una de las obras preferidas del público mexicano.

En la segunda parte, De la Mora interpretó una serie de canciones como Dime que sí, de Alfonso Esparza Oteo; Te quiero dijiste, de María Grever, y Perjura, de Miguel Lerdo de Tejada. Un intermedio musical con el vals Sobre las olas, de Juventino Rosas, y retomó el canto con Cuando vuelva a tu lado, de Grever; Caminante del Mayab, de Guty Cárdenas y Antonio Mediz, y Así, también de Grever.

No faltó Huapango, de José Pablo Moncayo que, a decir del musicólogo Juan Arturo Brenan, tiene en su bien merecida fama aspectos positivos y negativos, entre éstos últimos "ser usada (y abusada) como fondo musical para toda clase de propaganda oficialista y gubernamental, así como en numerosos productos audiovisuales comerciales, promocionales y turísticos de intención nacional o mexicanista".

Al finalizar el concierto, el tenor cantó Un viejo amor, de Esparza Oteo, y una más de Grever, Júrame, invitando al público a corear con él.

Entonces, tomó el micrófono para referirse a la actual crisis, y comentó que, frente a tantos problemas, los mexicanos podían tomar una actitud positiva o negativa, pero él prefería la primera, e instó a hacer algo por el país:

"¿Qué podemos hacer? Simplemente cambiar cada uno de nosotros. Esto ya no es cuestión de que el gobierno cambie. El señor presidente Calderón..."

Fue cuando una rechifla interrumpió a De la Mora, quien luego afirmó que no es panista, priista o perredista. Dijo:

"Volvamos a ser el gran anfitrión que es México para recibir a todo el mundo y no sólo mostrar esta visiones fatalistas: Un país lleno de narcotráfico, de secuestros, de delincuencia. Somos un país de buenas personas, como todos ustedes, como esta maravillosa orquesta, la Ofunam.

"Hay que mostrar que somos capaces de cambiar. Todo está en cada uno de nosotros, no en el gobierno. Cada uno de nosotros tenemos que hacer el cambio", añadió.

"¡Viva México" –remató, y concluyó el concierto con Granada. Se encendieron fuegos artificiales y el escenario se llenó de papeles tricolores.

El público salió gritando vivas a México y a distintos héroes. Algunos entonaban México lindo y querido, que con insistencia pidieron a De la Mora, pero él ya no cantó.

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